Una Caricia | Negovanman Fanfic

XXXII: Felicidad

***Días después...

----------------------- Elise ----------------------

Nat había mencionado algo de conocer a su familia. Era justo, ya que yo la había llevado a conocer la mía.
Honestamente tenía curiosidad por saber más de ella, todo me fascina y me sigue sorprendiendo; es como cuando eras pequeño y tenías un libro favorito por los dibujos que veías, pero cuando por fin entendías la historia te enamorabas aún más de ese libro.

Estaba nerviosa. Nat no solía hablar mucho de su familia, así que mientras desayunábamos  le pedí que me hablara de ella.  De mamá sólo decía que era maravillosa, que era más como su mejor amiga, jamás le ocultaba nada. Respecto a su padre, habló con brillo en la mirada. Dijo que era un padre excepcional, el mejor consejero y amoroso cuando se necesita. Sobre su hermano Tommy, cuando eran pequeños nunca se separaban, a dónde quiera que fuese uno el otro iba y cuando eran pequeños hicieron un juramento...

—¿Juramento? —le pregunté emocionada.

—Si, lo sé, a esa edad probablemente ni siquiera entendíamos muy bien ese concepto pero de igual manera lo hicimos —rió un poco al recordarlo. —Juramos que sin importar lo que pase o inclusive si estamos enojados y dejamos de hablar, sin cerrar puertas ni dar la espalda siempre que necesitemos del otro estaremos ahí

—Oh... Vaya, ese es un gran juramento muy sabio de hecho

—Lo hicimos luego de pelear por alguna tontería probablemente... Sólo recuerdo que le grité que ojalá hubiera sido hija única

—¡Oh por Dios! —reí.

—Papá me oyó y nos hizo reconciliarnos, dijo que los hermanos eran nuestros primeros amigos y los más importantes así que debíamos perdonarnos o nos arrepentiriamos... Así que luego de encerrarnos en un cuarto porque no queríamos... finalmente lo hicimos y fue entonces cuando creamos este juramento, que más que un juramento es como un pacto, un vínculo

—Es muy lindo ¿sabes? ¡Y muero por conocerlos, así que vamos!

Debiamos ir a otra ciudad así que Nat le pidió prestado un auto a un viejo amigo suyo. Empacamos ropa para al menos tres días y nos pusimos en camino. Llevamos a Charlie con nosotras, quién sólo se la pasó dormido en mis piernas.

Nat se veía algo cansada, y pensé que quizá necesitaba un poco de energía.

—Oye... ¿Alguna vez lo has hecho en un auto? —deslicé mi mano por su pierna.

—Elise... Necesito concentrarme si es que quieres llegar a tiempo y a salvo

—¿Podemos llegar un poco tarde? —mi mano llegó a su entrepierna.

—De acuerdo... Conduciré despacio... —dijo jadeando un poco.

Cambié a Charlie a la parte de atrás y desabroché el pantalón de Nat. Metí mi mano y comencé a complacerla. La carretera era recta y larga, no pasaban muchos autos.

Luego de un viaje de dos horas por fin estábamos llegando. Paró frente a una casa con un patio enorme al frente. Había un árbol y en él, un columpio. Algunas personas estaban fuera.

Nat corrió para abrirme la puerta del auto y entonces tomadas de la mano caminamos hacia la casa.

—¡Natasha! —gritaron todos al verla.

Miéntras Nat los saludaba me los iba presentando.

—Bienvenida a la familia Elise, un placer —su padre me estrechó el brazo con una sonrisa.

—Ven acá linda, eres mi nueva hija —su madre me abrazó.

—Elise Bauman ¿eh? —su hermano estrechó el brazo. —Cuida mucho a esta chica hermana...

Reímos y luego me presentó a su cuñada y su sobrino.
El pequeño de unos cuatro años me abrazó la pierna.

—¿Tu eres la tía Elise?

—Asi es, ¿quién eres tú pequeñito?

—¡Superman! Pero mi nombre aquí es Stefan

—Muy bien Superman. Este es Charlie y le encantan las aventuras, ¿por qué no juegas con él?

Luego de bajar las maletas entramos a la casa.

--------------------- Natasha --------------------

A penas entramos reconocí el olor de la comida, mamá había cocinado spaghetti, papas a la francesa y pollo.
Miré los cuadros llenos de fotos mías y de mi hermano. La casa seguía igual, me sentía pequeña de nuevo.

Tommy me ayudó a llevar las cosas a la habitación, mi vieja habitación.

—Es bueno volver a veces... Quería llorar cuando encontré esto en mi closet

Me entregó una hoja arrugada y vieja. Había un dibujo de nosotros dos y una leyenda que decía "Los mejores hermanos".

—Voy a darle una noticia a mamá y papá, me acabo de enterar hace unos días —dijo.

—¿Es buena?

—Bastante... Katherine está embarazada

—¡¡Oh por Dios Tommy!! Me alegro demasiado por ti —lo abracé. —No podría ser mejor noticia que esa

Bajamos y nos sentamos a comer.
Elise lucía feliz y cómoda.
Platicamos acerca de viejos recuerdos de cuando éramos pequeños, travesuras sobre todo.

—Nat y Tom eran inseparables —decía papá. —A donde quiera que fuera uno el otro iría también. Él la defendía y ella a él. Cuando Nat entró a jugar béisbol, Tom siempre estaba desde las gradas gritando que era la mejor y ella siempre que podía volteaba a saludarnos

—Es verdad, recuerdo que una vez lanzaron la pelota fuera y corrí a atraparla. Me la quedé y le dije a Nat que la autografiara, desde entonces aquí la llevo —alzó unas llaves y ahí estaba la pelota.

Después de terminar de comer Tom les dió la gran noticia. Mamá lloró y papá se levantó a felicitarlo.

—¡Espero sea niña para ser como tú y la tía Nat papá! —dijo Stefan haciendo reír a todos.

Salimos al patio para seguir conversando mientras veíamos al pequeño Stefan jugar con Charlie.

—¿Cómo les va, con eso de las conferencias y todo eso? —preguntó papá.

—De maravilla, se vienen bastantes ya que grabaremos la segunda película el año que viene

—Vaya, si que te has convertido en una estrella hermanita

Seguimos conversando hasta que el cielo oscureció por completo. Elise y yo nos quedamos unos minutos más.
Se sentó en el columpio mientras yo la empujaba despacio.

—¿En qué tanto piensas?

—En lo feliz que me siento, estando aquí contigo, con tu familia, en la casa donde creciste... y eso me hace pensar algo aún más increíble

—¿Ah sí? ¿Y qué es? —la abracé por detrás.

—Decidí que en esta próxima conferencia deberíamos revelar lo nuestro

—¿E-estás segura?

—¡Por supuesto! quiero que todos sepan lo feliz que me haces, lo mucho que te amo y tú me amas, lo mucho que quiero hacer mi vida a tu lado y gritarle al mundo que te amo mientras viajamos por él

—Bien... que así sea entonces —la besé sabiendo que hablaba en serio y eso me llenaba de felicidad.

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Me emociona demasiado ver que las vistas aumentan rápido y cada vez son más lxs que se unen a estas historias y me dan su apoyo, son lxs mejores!!! ❤❤❤