Mi Pequeño Kookie - Vkook

Un día antes

Estaba en el quinto sueño cuando un beeb, beeb, beeb me despertó de mi adorado sueño, la alarma sonó indicando que era hora de despertar, quise levantarme pero sentí un peso que impedía levantarme, había olvidado que Tae estaba dormido a mi lado con su brazo al rededor de mi cintura que impedía moverme.

-Hyung es hora de despertar- le susurré al oído para luego tratar de levantarme pero él no me dejó.

-Quédate conmigo, no vayamos a clases- habló somnoliento apretando más su agarre para acercarme a él-

-No hyung no podemos faltar- seguía diciendo tratando de soltar su agarre.

- No hagas eso bebé- dejó mi cintura libre y se dio la vuelta para no verme.

-¿No hacer qué? No le entiendo- volteé a mirarlo y coloqué mi mano en su hombro para voltearlo y mirar su rostro.

-Actuar así de maduro cuando yo soy mayor Kook-

-Lo siento Tae, pero usted dijo tengo que madurar, ahora seré hermano mayor.

Soltó una risita y se levantó de la cama, rodeó el cuarto quedando en frente de mí para luego empujarme al centro de la cama con sus brazos a los lados impidiendo moverme

-Buenos días bebé- se acercó lo suficiente para dejar un casto beso en mis labios y luego sonreir, con esa sonrisa que tanto me encanta.

-Buenos días hyung-

-Entonces, me iré ahora, paso por ti luego-

-Solo no haga ruido, mamá aún está dormida y no sabe que usted se quedó en casa-

Solo asintió con la cabeza acto seguido besó mi frente y salió de mi cuarto, no era necesario acompañarlo hasta la puerta, esta también es su casa y ya conoce donde están las llaves y como salir.

Esperé unos minutos después que Tae se fue para ir a la ducha, recordé lo sucedido ayer y aún no lo he terminado de procesar la información lo único que viene a mi cabeza es que en realidad me quiere mucho y su mañana quiero llevarlo conmigo a la boda de mamá como mi pareja, necesito decirle hoy a mamá.

Me duché rápido, quiero estar en la sala antes de que mamá se vaya, está es la última oportunidad para decirle.

Bajé ya listo a desayunar y ya estaba terminando de cocinar, caminé y me senté a la mesa.

-Buenos días Mamá, ¿Lista para el gran día?- necesito relajarme antes de decirle.

-Buenos días hijo, aún me faltan unas cosas pero hoy las resuelvo.

-Me alegra mamá- luego de eso nadie dijo nada, no soy de hablar mucho con mi madre aunque en este instante es necesario, es ahora o nunca.

-Mamá, ¿Qué opinas de los homosexuales?- Necesito introducir el tema.

-Que eso de decisión de cada quién y ¿Quién soy yo para juzgarlos?

-Y si hubiera alguien de tu familia que lo fuera, ¿Qué pensarías?- trataba de actuar normal pero es casi imposible cuando estoy muy nervioso.

-Lo amaría igual, pero dime ¿A qué vienen éstas preguntas?

-Emmmm- miraba la mesa fijamente, no podía verla a los ojos- Es que mamá, Soy mmm soy gay-

Ella no dijo nada, se quedó en silencio por un largo lapso hasta que puso su mano sobre la mía y la apretó dándome alivio.

-Tranquilo hijo, yo no dejaré de quererte solo por tu orientación sexual, eres mi único hijo al cual amo con todo mi corazón- me levanté de mi asiento, necesitaba abrazar a mi madre, la abracé y unas lágrimas se escaparon de mis ojos, siempre creí que no me aceptaría.

-Muchas gracias mamá, te amo- dije entre sollozos.

-Eso no es de agradecer amor, solo falta que me digas que tienes novio.

Ups! Dió en el blanco solté una risita nerviosa que ella conoce perfectamente me separó para verme la cara un poco asustada

-¡No puede ser! ¿Quién es? ¿Lo conozco? Habla hijo no te quedes callado, ¿ Cómo es que mi bebé tiene novio y yo no lo sabía?

-Ya mamá tranquila, respira es que este último mes has estado ocupada con esto de la boda y no tenemos mucho de estar juntos, y si lo conoces y muy bien, adivina quien- me miró a los ojos frunciendo el ceño como tratando de leer mi mente era una vista muy chistosa que no pude evitar reírme.

-No me digas que... no no puede ser, él se ve tan, será que? Es que es imposible-

-¿Que tanto murmuras madre?

-Estoy pensando, pero solo se me ocurre una persona y no creo que sea él-

-Nunca lo sabrás si no me lo dices.

-Esta bien, creo, no estoy segura pero su creo que podría ser tu vecino- me sonrojé automáticamente luego que ella dijera eso- es el? Oooh es él?- solo hice un movimiento con la cabeza- aaaah hijo me alegra mucho, él es un gran muchacho, Felicidades!

-Si, lo és y gracias Ma- volvía mi asiento para terminar mi desayuno.

-Me tengo que ir ya, Somin viene mañana a primera hora, ahí de dejo dinero por si te falta, hoy no volveré así que te veo hasta mañana y una última cosa llega temprano, quiero verte antes de subir al altar, cuida mucho Somin y se van con cuidado.

-Si mamá entiendo, y por eso no te preocupes, invité a Tae y él nos iremos en su auto.

-Excelente, ahora me cae mejor, y por cierto tienes que presentármelo.

-Con gusto mamá, solo no le hagas muchas preguntas.

-Solo haré las necesarias, Me voy Te quiero, hasta mañana- solo se oyó el portazo de cuando ella salió.

Me he quitado un gran peso de encima, me siento mucho mejor ahora.

Maratón por mi cumpleaños, Sí hoy cumplo 20 inviernos...

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