Mariposa.

Capítulo 5.

Siempre he querido hacere una maratón de capítulos, no sé si logre subir otro capítulo hoy, pero aquí dejo uno más en éste día.

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Estaba acomodando una caja en la parte posterior de la bodega de la tienda, después de todo, esa era su función en el trabajo, aunque en ocasiones, si sus compañeros necesitaban ayuda, solía hacerlo si había terminado con su trabajo.

Apoyó su mano en una de las cajas cuando sintió un mareo, y ese fue el recordatorio de que esos síntomas los había estado teniendo desde ya algunos días atrás, y en un principio no quiso preocuparse, pero por lo constantes que se volvieron y estos seguían apareciendo cada día, llegó a pensar que era en una opción, una que no había considerado a esa edad, pero que la creía posible ahora, recordando cómo durante un tiempo, su pareja y él se habían estado cuidando, y casi podía escuchar a Jin Hwan culparlo a él por eso.

Intentó apartar sus pensamientos cuando estos empezaron a tomar una dirección lejos de su trabajo, y volvió a arreglar las cajas cuando se sintió mejor, intentando centrar su atención en lo que hacía, pero en cuanto tuvo un momento libre, tomó la mochila que solía llevar al trabajo y se metió al baño, sacando de ésta dos pruebas de embarazo que compró en la farmacia, y sintiendo como sus manos temblaban mientras las abría.

Leyó las instrucciones, y luego procedió a realizarse cada prueba, sintiendo que el tiempo pasaba sumamente lento mientras esperaba por un resultado, y quizás su trabajo no era el mejor lugar para que las hiciera, pero no quería imaginarse la reacción de Jin Hwan si sus sospechas eran reales, tenía de cierta manera miedo, porque ellos no habían planeado tener hijos, no ahora, ni siquiera lo hablaron como una posibilidad, incluso él había estado cuidándose con inyecciones, un bebé no era posible.

Cuando el tiempo pasó, sus manos temblaban al momento de tomar las pruebas, y su mirada se volvió borrosa cuando confirmó sus sospechas, porque sabía que ese no era el mejor momento para tener un bebé, no cuando hace poco menos de dos meses atrás ellos habían estado por separarse definitivamente, ni siquiera podían brindarle al bebé una vida digna, cada mes a penas y alcanzaba el dinero, un bebé no era lo que ellos necesitaban, pero tampoco podía hacer mucho si ya crecía en su vientre.

Limpió violentamente sus lágrimas cuando escuchó la puerta del baño se golpeada, y metió las pruebas dentro de su mochila, luego lavó su rostro para intentar ocultar que estuvo llorando, y abrió la puerta, viendo como su compañera que solía estar en la caja lo miraba preocupada, aunque ella intentó disimularlo, por lo que estaba seguro, que se notaba que lloró antes.

—Taemin, necesitamos que llenes el área de bebidas, los jugos de naranja se terminaron.

Asintió esperando que ella se fuera rápido para él poder refugiarse en la bodega, sin embargo, la chica solo se quedó a pocos pasos mirándolo todavía preocupada.

—¿Estás bien?

—Sí —intentó sonreír —no te preocupes, estoy bien.

—Taemin, ¿estás seguro...?

—¿Jugo de naranja dijiste? —se movió afuera del baño y ella sólo asintió —bien, ahora lo traigo.

—Taemin...

Ella intentó preguntarle por lo que realmente le sucedía, pero el rubio ya estaba lejos de ella entrando a la bodega, porque no quería contarle a nadie de su embarazo, creía que primero tenía que hablar con Jin Hwan, y luego con su jefe para saber si le dejaría conservar el trabajo, aunque sabía que cargar cajas iba a ser difícil en su estado. Sólo esperaba que las cosas no se volvieran realmente difíciles para él.