25-. Salvador

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(Savior)

Perdí la voz de Makoto y solo podía escuchar mis propios pensamientos "me odia", "yo lo haría", "¿Lo podemos superar?", "JP y Miah". Por favor salven me

Mis propios pensamientos empezaron a desvanecerse y todo se ponía por completo oscuro. Estaba en una habitación oscura caminando de un lado a otro, no sabia que clase de lugar era este, pero se que no era real. Sonidos de truenos se escuchaban en ese cuarto y yo me tira al suelo, desde muy niño e sido astrafobico por eso intente cubrir mi cabeza con mis manos.

-¿Estas feliz en este momento Matthew?- La voz de Makoto se empezó a escuchar en la habitación.

-¿Makoto?

-Si, te gusta estar sufriendo bastante.

-¡No, ¿donde estas?!

-Solo soy una voz en tu cabeza "la culpa" si tu me das esta voz yo la usare.

-No me gusta.

-A mi no me gustaba que trataras mal a Makoto y él esta ahora al lado tuyo en la ambulancia, ¿Cómo crees que se siente?

-No es mi culpa.

-Claro que si.

-El podía haberme dejado ahí.

-¡Deja de dar soluciones estúpidas!

-¡No es estúpida!. No quiero causarle mas daño

-¡Admítelo él esta ahí porque te ama y tu no has hecho mas que causarle problemas!

-¡No!

-¡¿Cómo que no?!

En un de las paredes del cuarto se empezó a proyectar una imagen del momento justo en que Makoto me encontró con mi brazo sangrando y la botella tirada a un lado.

-Eso es algo normal-dijo la voz- es normal que él llore por ti y no contigo.

Yo solo guardaba silencio y veía la proyección.

-Lo único que me enseñas Matthew es que no sabes aceptar la culpa por tus actos. Ignoraste cada señal que nosotros en tu mente te debamos, los recuerdos, las excusas y otras cosas que hacíamos para que tu volvieras a ser esa persona que Makoto tanto ama, pero tus adicciones te sobrepasaron y te dejaste llevar por ellas de nuevo. No me sorprendería si Makoto te dejara una vez que despertaras, todos tenemos un limite Matt y creo que ya sobrepasaste el de Makoto desde hace un buen tiempo.

-Él no dejaría... tu solo ¡dices pura mierda!

-No Matt- la misteriosa voz de Makoto se presento a mi y era yo mismo, en ese momento su voz se conviertio en la mía- tu te estas diciendo la mierda a ti mismo.

-¿Cómo puedes ser yo?

-Soy tu conciencia así de simple y e querido hacerte entrar en razón desde hace un buen tiempo. Podías haber evitado estar aquí si me hubieras hecho caso. Yo soy el responsable de esos recuerdos felices en el parque y creí que estaba haciendo un buen trabajo, pero eres una persona impulsiva, egoísta y débil, todo lo contrario a lo que intentas demostrar. ¿Y aun así quieres que Makoto siga contigo? vaya patán que eres, eres aun peor que Alejandro.

Me estaba diciendo la verdad a mi mismo y no podía negar lo, ¿En verdad soy peor que Alejandro?. Quería llorar quería golpearme a mi mismo quería hacer muchas cosas, pero a pesar de eso solo seguía de pie observándome a mi mismo.

-Me da vergüenza ser tu conciencia.

-Lo se a mi también me da vergüenza ser mi mismo. Sabes, bueno claro que lo sabes. Desde muy chico e sido una molestia para mucha gente, mis padres si me amaban, pero cuando nos mudamos a Estados Unidos se inundaron de trabajo y empezaron a ignorarme ya no eran esos padres cariñosos con los que crecí en Tokio cuando me violaron ni siquiera se dieron cuenta de ello, ese día llegue a mi cuarto y tome un largo baño cuando estaba en mis primeros años de prepa empece a hacerme heridas a propósito. Extrañaba a Makoto en esa época como a nadie mas, Bruno llego, pero no pudo llenar el hueco en mi corazón que habia dejado Makoto, pero me ayudo un poco a superar mi trágico pasado aunque no cicatrizo por completo es como si a una herida grave le pusieran un simple curita y dijeras que todo esta bien, pero llega el momento en que ese curita se cae y la herida se vuelve a ver y aun peor que como estaba. Todo este tiempo creo que estuve buscando a alguien que me salvara cuando él único que podía salvarme era yo mismo.

-¿Y aun así dices que eres una mierda? no ves lo mucho que lograste solo- en las paredes del cuarto empezaron a aparecer imágenes de mis mejores momentos como el nacimiento de JP, la propuesta de matrimonio que me hizo Makoto, nuestra boda, mi vida con él y en el techo habia una imagen gigante de mi familia y yo sonriendo- todo esto lo lograste tu siendo la persona que yo conozco que eres y la que él también conoce.

-El Matthew que tu conoces esta aquí.

-El Matthew que yo conozco ama mucho a su familia daría todo por su familia y en especial por Makoto y no necesita de una persona extra que lo salve.

-No necesito que nadie me salve- la habitación donde estaba se empezó a desvanecer y con ella mi conciencia- adiós.

-Es hasta pronto Matthew yo estoy en tu cabeza y en tu corazón.

Toco mi mano y desapareció en un montón de luciérnagas brillando en toda la habitación mostrando mis mejores momentos, yo jugando con los niños, durmiendo con Makoto... besando a Makoto y la primera vez que lo volví a ver. No hay momentos felices sin etapas de tristeza.

Salve mi amor por años para Makoto y no voy a tomármelo esta vez, quiero hacer lo correcto por él. quiero ser mi propio salvador.

❄🎍❄

Desperté y me vi en una cama de hospital con Makoto al lado mio llorando en mis piernas. Lo único que quería hacer en ese momento era abrazarlo, pero mi cuerpo no tenia mucha energia así que solo levante mi brazo para tocar sus cabellos.

-Tu... hyung esta bien.

-¡Matt!

________________________________________________________________________________Jun: ¡Aun no acabas CAB! me vale que seas mi jefe, si no acabas hoy te corto la cabeza.

CAB: Ok Ok-nervioso-.

Kai: Relájate un poco Jun.



Real Friends ❄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora