-¿Qué pasaría si Tony Stark y Natasha Stark del universo tierra 3490, hubieran coincidido en el mismo universo?
Si ambos hubieran pertenecido allí desde el principio. ¿Se habrían llevado bien? ¿Habrían conectado? ¿Se habrían acaso percatado de la e...
No sabía cuántas horas habían pasado, pero ya no sentía frío. Se giró sobre sí mismo y sintió que la luz del sol daba directamente en su cara. Pensó que aún debía estar durmiendo, pues su taller estaba en el sótano de la mansión y por consiguiente hasta allí no podía llegar la luz del sol.
Poco a poco se fue desperezando para darse cuenta de que no se encontraba en el taller, sino en su gran cama tapado con su edredón de plumas. No recordaba cómo había llegado hasta allí, pero de cualquier modo agradecía el haberlo hecho. Miró su reloj de muñeca y se extrañó de que marcara las ocho de la mañana. ¡No podía ser...! Eso le indicaba que si se había quedado dormido el lunes sobre las dos de la tarde, debía haber dormido unas 18 horas de tirón, cuando su máximo eran 3 o 4 horas seguidas a lo sumo.
Se incorporó en la cama y se quedó sentado por un momento hasta que sintió que alguien abría la puerta.
- ¡Buenos días Sr Stark!
Peter entró en el dormitorio con una bandeja en las manos y una gran sonrisa en la cara.
- J.A.R.V.I.S me avisó de que al fin se había despertado el "bello durmiente". Me alegra ver que por una vez descansó como es debido.
- ¿Por qué no me despertaste mucho antes, chico? Siento como si hubiera dormido toda una vida. ¿Y cómo es que llegué hasta aquí? Bueno... Quizás eso no lo quiero saber.
- ¡Oh!... No se preocupe por eso, el Sr. Happy me ayudó a traerle hasta aquí ayer por la tarde.
- Entiendo... - Tony desvió su mirada de la del chico con algo de pena.
Peter hizo cómo que no se dio cuenta del gesto del mayor y continuó con lo planeado, así como con esa estúpida sonrisa en su cara que a Tony le parecía de idiota, pero a la vez adorable.
- Mire, le preparé el desayuno. Le traje tostadas con mermelada de naranja amarga y café muy fuerte. Todo fuerte y bien amargo cómo a usted le gusta. ¿Porqué no se da una ducha y se toma el desayuno tan rico que le preparé?
- Peter, ya sabes que no me entra nada por las mañanas. ¿Por qué no me preparas un whisky mientras me doy esa ducha?
Peter reprimió la mirada inquisidora que habría deseado darle al mayor.
- Voy a hacer cómo que no he escuchado eso, teniendo en cuenta que aún anda medio dormido. Se dará esa ducha y si no quiere comer no lo haga. Pero se tomará el café y bajará conmigo a pasear o a lo que le apetezca hacer y no quiero peros ni protestas.
Tony dio un suspiro cargado de resignación, mientras dejaba caer su cabeza hacia atrás. Empezó a cuestionarse en qué momento aquel chico del cual él era responsable cómo su tutor legal, había adquirido el papel de padre en esta relación y él había asumido el de adolescente refunfuñón.
- ¡Está bien! Tú ganas. Me voy a duchar y me tomaré ese café si es que puedo retenerlo... y te agradecería que dejaras de mirarme con esa estúpida sonrisa. No querrás contagiármela, no me quedaría nada bien en esta linda cara. - Tony hizo círculos con su índice señalando su rostro.
Salió de la cama arrastrando los pies y se giró para dirigirse hacia el baño. Algo le hizo detenerse, sintió los brazos del menor rodeándole por la cintura desde atrás y un tierno besito en su hombro izquierdo.
-Le espero abajo en veinte minutos, no lo olvide.
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Peter levantó una ceja extrañado del mismo modo en que lo solía hacer su tutor. Estaba adquiriendo algunos gestos de este sin saber ni cómo.
Se encontraba en el salón principal y vio cómo el Sr. Stark bajaba las escaleras enfundado en uno de sus costosos trajes de corbata y chaleco.
- ¿Demasiado formal para dar un simple paseo, no?
- Mira mocoso. Aunque no te lo creas yo sigo siendo el adulto responsable aquí.
El chico no pudo más que hacer una mueca de burla ante eso.
- Se supone que es martes y que tú tienes que ir a la escuela a estudiar, o a lo que quiera que sea que hagas allí con mi dinero. Así que yo me iré a mi empresa y trataré de nuevo de recuperar mi posición allí con Pepper.
- Eso suena muy bien Sr. Stark. Me alegra que tenga de nuevo energías para poder trabajar. Pero hoy no es el día. Pepper como recordará no se encuentra en la empresa
- ¿No está? UHM... ¿Olvido algo?
¿Peter?...
¿Por qué tengo la sensación de que me olvido de algo?
- Hoy es el evento de la presentación de las becas Stark. Cómo todos los años en esta fecha, señor. Pensé que lo sabía.
- No, no lo recordaba, y extrañamente "O no tan extrañamente" – Hizo comillas con sus dedos.- Ahora que lo pienso, tampoco Pepper me dijo nada ayer cuando la vi. Supongo que pensó que sería mejor que no me presentara, pero creo que se va a llevar una sorpresa. Estoy seguro de que no me espera, y mucho menos a estas horas de la mañana.
- ¿Se presentará allí Sr. Stark? ¿No tiene miedo de la reacción de Pepper?
- Niño, no me he puesto mi mejor traje para ir al parque a dar de comer a las palomas. ¿No crees? – Dijo el mayor levantando las solapas de su americana con sus pulgares.
Peter estaba emocionado al encontrarse con un Sr. Stark tan animado, le parecía estar viviendo un flashback en el que se reencontraba con aquel hombre encantador e irreverente al que siempre había admirado. Así que aún con un poco de desconfianza, decidió animarle.
- ¿ Está usted increíble Sr. Stark! Yo le doy todo mi apoyo para que vaya y haga la presentación de las becas cómo todos los años. Sólo no trate de enojar mucho a Pepper, ya sabe lo quisquillosa que es cuando se trata de trabajo ¿Ok? – Dicho esto último el menor le guiñó un ojo de forma traviesa.
- Si, si. Como sea. – Tony sacudió su mano cómo restándole importancia al asunto.- Nos vemos a la tarde Peter. No hagas nada que yo no haría... Ni nada que yo haría. ¿Ves ese espacio en el medio? Ahí es dónde te puedes mover ¿De acuerdo?
