Por buen camino

Un adiós diferente (parte dos)

-Sakura es muy buena en los genjutsus, tal vez no sea tan fácil hacerla caer en uno... – pensó, pensó y siguió pensando. No teniendo idea de que iba a hacer ni menos que decirle Sasuke pensó que la mejor forma de encontrarse con Sakura para decirle que se iba de la aldea era mediante un genjutsu. El único problema era que Sakura era muy buena con las ilusiones. Tal vez Sasuke tenga esos ojos pero en este caso él tendría que realizar un genjutsu sin mirar a sus ojos, a la vieja escuela, ya que aunque estaba seguro de que ella caería, primero debía hacer que lo mire. Y eso no era parte de su plan.

Ya sin mucho más rodeo se dirigió a la puerta del hospital donde debería de estar Sakura, él no sabía sus horarios ni menos sus rutinas. Pero estaba seguro que la chica estaba en su casa o en el hospital. Ya una vez corroborado que no estaba en su casa solo quedaba un lugar. Sus pensamientos fueron despejados al distinguir una cabellera rosa salir del hospital, sin duda era ella. La causante de sus indecisiones estaba saliendo del hospital, y para colmo con una radiante sonrisa – si sabes poner las cosas difíciles – susurro Sasuke. Sería una lástima ver como se borraba esa sonrisa con las noticias que el traía.

-tal vez... - una idea surgió de su mente, él nunca se caracterizó por ser muy inteligente pero si sabía que estaba por el promedio normal – habría que intentarlo... - volvió a susurrar. Activo a todo su poder su ojo izquierdo, ese tan inexperto ojo cuyas habilidades eran aun desconocidas para su portador, Sasuke.

La técnica parecía no surgir efecto al principio y Sasuke comenzaba a desesperarse, puesto que no tenía ganas de enfrentarla cara a cara sabiendo como ella reaccionaria. De un momento a otro Sakura cambio su dirección hacia donde él había planeado. Al parecer pudo aprender una nueva habilidad de su reciente ojo. Ya más tranquilo solo se limitó a seguir los pasos de Sakura, aunque siempre bajo una distancia prudente. Sería raro que alguien lo encontrara siguiendo a una persona que estaba bajo su propio genjutsu.

Sakura se detuvo justo frente a ese tan famoso banquito de piedra, bueno famoso para ellos dos. Fue entonces donde Sasuke se posiciono detrás de la peli rosa – Sakura – vio como Sakura reaccionaba a sus palabras, pero tal y como lo esperaba Sakura estaba bajo la merced de su genjutsu. Lentamente sin apuro se puso frente a ella, observo bien sus facciones... impecables.

Una última mirada y Sasuke se fue despacio de ese lugar, ya todo estaba en manos del genjutsu.

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Lo que realmente paso en el genjutsu:

-s...Sasuke... kun – dijo mientras se volteaba con alegría la peli rosa.

No hubo respuesta.

-¿Qué haces aquí Sasuke kun? – pregunto olvidando por completo el hecho de que ella se desvió sin razón de su camino.

Tampoco hubo respuesta.

¿Sasuke kun? – Ya pregunto más dudosa - ¿estás bien, te encuentras bien Sasuke kun?

-ha – fue el único sonido que se escuchó. Fuera de eso Sakura no pudo oír nada más, cosa rara sabiendo que cuando salió del hospital juraría que se escuchaba el ruido del pasar de la gente, pequeños murmullo de conversaciones ajenas, pero ahora no. Ahora solo se escuchaban sus voces únicamente. Tan asi era que por un momento se preguntó si se encontraba en la realidad.

-¿Qué es lo que haces aquí? – volvió a preguntar pero ya con más duda. El comportamiento del Uchiha era ajeno al que solía tener desde que estaba en la aldea.

-es mejor que te enteres asi – solo eso fue lo que dijo. Hiso una leve pausa, casi como esperando una contra pregunta.

-¿Qué es lo que tengo que enterarme Sasuke kun?

-no es bueno, pero es lo correcto.

Sakura solo sintió que su corazón se paralizaba, ese entorno, ese tono y la falta de su mirar hacia índice hacia un solo lado de la conversación.

-mañana pienso partir... no sé si es lo correcto, pero si lo mejor.

-¿partir? ¿A dónde? – su legre corazón se tornó más triste de lo habitual, no le gustaba nada a donde iba la charla – Sasuke kun no digas que tu... - llevándose las manos a su pecho con tristeza y dolor – no tendrás pensado volver a irte ¿no es asi?

Sin respuesta verbal pero asintió.

Una lagrima comenzó a deslizarse sobre sus mejillas, otra amenaza con salir - ¿porque? ¿Por qué Sasuke kun tiene que volver a irse? ¿No sería mejor quedarse? ¿Acaso tu...? – una leve pausa puesto que su tono subió de nivel a una de desesperación y no controlaba bien su espiración - ¿pensé que aquí eras feliz? ¿Tal vez sea una tonta pero pensé que eras feliz junto a mí? – más lagrimas comenzaron a salirse de sus ojos jade, esos ojos que eran difíciles de ignorar, incluso el mas despistado caía bajo el encanto de esos ojos.

-la felicidad no es algo que me corresponda recibir.

-todos debemos ser felices y todo debemos hacer felices a otros Sasuke kun – hablo levemente más calmada pero entre cortada. Entre medio de sus oraciones se escuchaban sus leves llantos.

-no creo, es solo un sueño vacío.

-incluso si esta vacío puede llenarse, los sueños son para soñarse, anhelarse y realizarse – dijo ya en un quiebre de llanto – por favor... por favor Sasuke kun, sé que sonara egoísta pero si asi es no me dejes te lo suplico... no me dejes – bajando su tono con cada palabra, intentaba mantener un tono medio pero los llantos y los latidos de su corazón no le permitían.

-no es solo eso, va más allá de lo que piensas.

Esas palabras quebraron aún más su corazón. Sentía que no sabía nada de él. No entendía del todo sus palabras y tampoco entendía la razón de su partida, solo sabía que no quería que se vaya – pero... ¿porque? ¿Por qué te vas?

-no es porque me voy, es el por qué quedarme. Necesito esa respuesta.

-si te quedas, yo... - saliéndole aún más lagrimas – yo podría ayudarte a encontrarla, juntos... podríamos hallar una respuesta a cada una de tus dudas. Incluso con Naruto y Kakashi sensei podríamos ayudarte Sasuke kun.

-no merecen malgastar más de sus vidas en mis problemas. En especial tu...

-¿eh? – Sakura se sorprendió de la profundidad de esas palabras - ¿yo?

-desperdiciaste gran parte de tu vida persiguiendo a un chico que jamás te merecerá, uno que solo sabía cómo envolverse más y más entre la tinieblas de la soledad mientras tú solo brillabas con el único fin de alejar esa oscuridad.

Sakura se sorprendió de lo dicho por Sasuke, tanto asi que quiso comprobar algo – s...sa...Sasuke...kun ¿Cuándo tienes planeado irte? ¿Quiero saber si al menos tengo tiempo para hacerte cambiar de opinión? – mostrando más madures en su tono.

-mañana, pero no hay nada que cambiar. Cuando uno cierra por voluntad propia sus ojos es difícil que otro intente hacerle ver lo que uno se negó a ver. Mi camino solo lo encuentro en las sombras.

-p... pero Sasuke kun solo te pediría que no te vayas... por favor...

-¿pediría?

Al oír la respuesta de Sasuke Sakura solo se limitó a contener su leve llanto y se acercó a Sasuke con cautela, lentamente acerco su cuerpo al de el – extraño ¿no?

-¿a qué te refieres?

-juraría que no transmites calor – dijo mientras acercaba una de sus manos a la mejilla de Sasuke. Lo miro fijo a sus ojos y lo supo. Ese no era Sasuke. Para comprobarlo solo hacía falta algo, asi que acorto la distancia entre su mejilla y su mano. Y cuando ella debería de haber sentido el tacto con su piel no lo sintió y la imagen de Sasuke empezó a desaparecer con si de humo se tratase.

-siempre fuiste buena en los genjutsus – fue la voz de Sasuke que se oyó segundos antes de desaparecer la ilusión.

-y tu Sasuke kun también, pero no para las palabras – se dijo a si misma.