“Ashton, Ashley, ¿quién eres?”
Su sonrisa se ensancha al contarle aquel chiste, su sonrisa, una cosa bastante hermosa, ella es hermosa… perfecta.
Sus labios rosados se ven tan provocadores que duele, siento la magia empezar a crecer a mi alrededor, pero trato de ignorarla, no quiero cometer una estupidez.
--Y dime… ¿Cuánto son 2+2?—pregunta, riendo bobamente.
--No sé… ¿5?—pregunto, ella ríe aun más fuerte, haciendo que yo me ría junto a ella.
--¡Estás loca, Natalia!—exclamo, en tono divertido.
--Tú eres peor, Ashley.
--Eso claramente no es verdad.
--Básicamente sí, sí lo es.
--Ok… Tengo hambre, ¿tú no tienes hambre?—niego con la cabeza y ella se ríe.
Por la puerta entre Laura, que tiene cara de asco, tristeza y fastidio.
--¿Qué pasó?—pregunta Natalia desde mi lado.
--¿Quieres saberlo? ¡Calia me beso!—exclama, con lágrimas en los ojos.
--¿Qué? ¿Por qué haría eso?—pregunto, tratando de saber una razón lógica.
--Dijo que fue por la emoción, pero ¡Dios mío! Sus besos se parecían a los de Calum y y-yo, lo extraño demasiado.
Natalia se levanta del sofá rápidamente abrazando a su hermana, me siento extraño y levantándome camino hacía el baño, saco mi celular y marco el número de Calum.
--Ashton, no estoy bien del todo.
--Eso lo tengo entendido.
-¿Crees que me odia?
--No, no lo creo, pero ¿dijo tú nombre?
--Sí, y me insulto, fue lo más lindo.
--¡Hey! Sé que estás rodando los ojos, y no, no lo hagas. Solo falto yo y sé, lo re sé que será muy difícil.
--Buena suerte, campeón, y por favor. ¡Hazlo rápido! Está noche es luna nueva.
Cuelgo la llamada y salgo del pequeño baño, Natalia está mirándome, expectante.
--¿Qué te falta a ti?—pregunta encarnando una ceja.
--Yo, sinceramente espero que me perdones.
--¿De qué hablas, Ashley?—pregunta, sonriendo.
--De esto—me acerco rápidamente a ella, tomándola de la cintura y besándola, se deja llevar por un momento, y un pequeño gemido se escapa de sus labios, haciéndome suspirar.
Sus ojos verdes me miran al separarse de mí y confundida balbucea.
--Ashton, Ashley. ¿Quién eres tú?—pregunta, sus ojos se cristalizan, siento vergüenza de mi mismo.
--Perdón—logró balbucear yo.
--Ashton, ¿qué?—se pregunta más hacia ella misma, pero yo la escucho perfectamente.
Tomo mi pequeño bolso y salgo de la casa rápidamente, son alrededor de las 6:30 de la tarde y tengo que llegar a las 8:20, en mi auto, me dirijo, compro unos cafés en Starbucks y sigo mi camino.
--¡Ya llegue!—grito, en las escaleras.
--¡Ashton! ¡Rápido!—gritan mis amigos.
Todo volverá a la normalidad.
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We are the girls ||5 Seconds of summer||
FanficEllos eran chicos, hasta que pidieron un deseo. ||Be original||