Al Estilo Emma© #1 (Nueva versión)

Capítulo 18

𝒞𝒶𝓅. 𝟣8

Siempre había sido una chica solitaria, pero pocas eran las veces en las que se sentía sola. Con Colin distanciado, la temperatura se sentía más fría y las horas pasaban más despacio. Sabía que era absurdo chequear su celular para ver si él se acordaba de ella como la chica con quien había pasado buenos ratos y no como la chica que le mintió.

Era final del periodo cuando a la distancia vio a Eugene caminando en compañía de Alan; recogió sus pertenencias de la mesa donde estaba sentada y caminó rápido para alcanzarlos.

—Chicos —dijo para llamar la atención de los dos. Ellos voltearon al mismo tiempo—, hola —terminó de acercarse.

—Reina, siento que no te veo desde hace años —dijo Alan.

Emma chocó su puño con el de Alan cuando él lo levantó frente ella.

—Eugene —pasó a decir de inmediato Emma—, ¿puedo hablar contigo un segundo?

—Seguro. —Eugene sabía perfectamente de lo que ella quería hablar.

Tanto Eugene como Emma se quedaron en silencio. Ella juntó sus manos y se balanceó una vez de atrás para delante.

—Sí, sí, ya entendí...—Alan le dio una palmada al aire y se alejó despacio—. No se preocupen. Estaré por allá, creando cientos de teorías sobre lo que necesitan hablar sin mí.

—No es nada, en realidad —dijo Emma para consolarlo.

No era nada; era todo.

Cuando Alan se alejó casi por completo, Eugene preguntó:

—¿En qué te puedo ayudar?

—Pues —tomó aire. No sabía qué tan legal era recurrir al mejor amigo de él, pero tampoco sabía qué otra cosa hacer—, quería preguntarte si Colin te dijo algo sobre mí.

—Mm... pongámoslo así. Él no querría que tú y yo hablemos porque está peleado contigo —confesó. Emma había pensado que no podía sentir más dolor del que ya sentía, pero se equivocó—. Me contó todo lo que pasó. En serio lamento que estén peleados.

—Yo aún no termino de creerlo. Debías verlo. Estaba furioso y me prohibió seguir viendo a Brandon.

—Puedo imaginarlo...—Un momento—. ¿Dijiste que te prohibió?

—Sí, y luego se marchó.

Eugene enarcó una ceja. "Oschner...", pensó.

—Supongo que lo que quiero saber es si él ahora me odia —siguió diciendo Emma.

—Emma, él jamás podría odiarte; solo está molesto porque le ocultaste lo que estaba pasando. Lo que pasa es que Colin siente con más fuerza que el resto, ya sabes; algunas cosas, que parecen pequeñas para el resto, le pueden doler mucho, así como irónicamente hay cosas que pueden calificar como gruesas que resultan ser completamente indiferentes para él. Tal vez puedas intentar hablarle.

—Tengo miedo de que me rechace. Yo no podría vivir con eso.

¿De qué clase de rechazo estaban hablando exactamente?

—Por supuesto que está la opción de que no quiera hablar contigo, pero se trata de algo momentáneo, ¿entiendes? Colin no es ni un estúpido. No va a botar tu amistad por esto; solo necesita un momento.

—Claro.

Nada estaba claro. Para ella se sentía como si se encontrara tratando de mirar por una ventana empañada.