Ｉｎｆｅｒｎｏ (Zᴜᴋᴀᴀɴɢ)

【El Pantano】

Las cosas apenas si habían mejorado.

Zuko estaba distraído, mas bien siempre estaba reflexionando, Aang estaba preocupado pero debían seguir, y el príncipe había insistido que se fueran de una vez, estaba nervioso, veía a su alrededor a cada momento, como si una amenaza fuera a sorprenderlo en cualquier momento. Era inquietante por decir lo menos. Katara se estaba poniéndose nerviosa con todo este asunto.. Maldiciones, cuidados, mantener siempre la guardia ahora no solo de la Nación del Fuego sino también de su príncipe que parecía que iba a colapsar en cualquier momento, y aunque no le gustara admitirlo, estaba preocupada. Sokka estaba nervioso y harto de esto, quería que terminara, quería que todo terminara de una vez por todas, le preocupaba ver a Aang estar pegado al príncipe y le atormentaba el hecho de no poder hacer nada. Le recordaba demasiado a la muerte de Yue.

Iroh.. Iroh era otro tema a tratar. El hombre había insistido que las pequeñas conversaciones que había tenido con Aang por las noches eran suficientes. Que debían continuar solos, sus destinos estaban entrelazados pero deberían separar su caminos. Iroh debía emprender su propio y Aang, Sokka, Katara y Zuko debían seguir.. Solos.

Solos.

Aang casi no podía creerlo. 

Pero no le quedo mas remedio que escuchar al hombre. Así que siguiendo su camino terminaron por pasar 2 días en un pueblo, no queriendo irse sin pasar algo de tiempo con el hombre tan amable, a pesar de todo la negación de Zuko y el miedo de Aang, Iroh les sonrió y termino por mencionar que todo estaría bien. Que todo estaría bien, y que volverían a verse.

Terminaron por quedarse unos días. 3 días en total en aquel pueblo, y después, tuvieron que abandonarlo tal como Iroh había decidido dejarlo el día en cuestión. Se hubiesen quedado mas si el hubiese elegido quedarse.

Así que ahora estaban solos.

Solos y sobrevolando un pantano, o algo así.

Aang estaba tan embotado en sus pensamientos que se sobresalto inmediatamente cuando las manos de Zuko tomaron las suyas para jalar las riendas de Appa, logrando que el bisonte se elevará en el aire. Parpadeo, con el pecho agitado por el susto termino por levantar la vista para ver el ceño profundamente fruncido del príncipe. Desaprobador y molesto.

—¡Aang!

El mencionado miro a Sokka, que le observaba arqueando una ceja.

—¿Porque estabas descendiendo?

Parpadeo. De nuevo. No.. No estaba..

—Aang..

Fue apenas un susurro ronco, pero le hizo estremecerse de pies a cabeza y le costo toda su fuerza no mirar a Zuko a la cara.

—Se.. Se que sonará raro pero, creo que el pantano me estaba llamando.

Sokka se asomo por uno de los costados de la montura de Appa, haciendo una mueca. Katara hizo lo mismo, solo que ella arqueo las cejas suavemente.

—No es por ofender al pantano, pero esto definitivamente suena a mala idea.

—Bumi dijo que si quiero ser un maestro tierra debo esperar y escuchar, y ahora estoy escuchando a la tierra.

Katara le miro, tratando de apaciguar su pequeño balbuceo.

—No lo se, Aang.. Hay algo siniestro respecto a este lugar.

Siniestro.. Como la O-

—¿Lo ves? Incluso Appa y Momo están de acuerdo.

...