Capítulo VIII

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 Su respiración era agitada, intentaba controlarse pero le resultaba imposible. Jay en un acto de tratar de proteger al más joven lo había dejado en su encerrado en su habitación diciendo que por nada del mundo abriera la puerta a pesar de lo que llegase a escuchar.

Lo intentaba, pero cada vez era más difícil de ignorar, la forma en que las paredes vibraban cada vez que el cuerpo del lobo intentaba tumbar la puerta de la sala.

El más joven se encontraba recostado contra la pared sentado en el suelo de la habitación, llevo una mano hacia su rostro intentado tapar su boca reteniendo las ganas de vomitar que habían comenzado a atacarlo.

Sentía ganas de llorar, sus nervios estaban a flor de piel. Recordó la forma increíblemente rápida en que su hyung había abandonado su forma humana para dar paso al gigantesco lobo blanco.

Dio unas bocadas de aire tratando de tranquilizarse, no podía ser una carga, debía controlarse.

Llevo una de sus manos a su rostro pero al mismo instante la alejo como si quemase, observo su palma extrañado.

Estaba llorando.

— ¡¿Qué hacemos?! — pregunto desesperado DK.

— ¡Espera un segundo! — Bobby se encontraba apoyado contra la puerta de la sala evitando que cediera a los imponentes empujes de su líder.

— Debemos llamar al CEO.

— ¡No, ahora no! Hanbin no dejaría entrar a nadie— Song intentaba razonar.

— ¡La puerta caerá en cualquier momento! ¡No aguantara!

Un aullido los interrumpió logrando que varios llevaran sus manos a sus oídos tratando de frenar el sonido de su líder acusándolos de estar en su contra.

El silencio reino por unos segundos, todos se encontraban ansiosos, sin embargo era inevitable querer relajar los músculos en busca de un respiro.

Solo era el ojo de la tormenta.

El sonido del movimiento de un picaporte los hizo mimar hacia el pasillo en dirección de la habitación de Chanwoo.

— ¡P-por favor, abran la puerta! — rogó el omega.

— ¿Le pusiste llave? — DK pregunto en dirección a Jay.

Este asintió en respuesta—. Era por si acaso.

Un sollozo los regreso en el tiempo—. Q-quiero ver a hyung.

Lagrimas bajaban rápido por el rostro del más pequeño, no comprendiendo en que momento su propia voluntad se había quebrado y sus sentimientos habían comenzado a controlarlo. Una de sus manos se encontraba a la altura de su corazón sujetando su camiseta con fuerza, le dolía.

— Abran la puerta, hare lo que digan. No me dejen encerrado aquí— no entendía que sucedía, solo tenía la imperiosa necesidad de estar al lado del alfa—. ¡Solo quiero ver a Hyung!

Bobby y June lo notaron en el aire, las hormonas del más joven estaban comenzando a afectarles, siendo alfas no podían ignorar la necesidad de cuidar del omega.

El aroma del más joven ya no era del todo dulce, ahora se encontraban mezcladas notas de ansiedad y tristeza.

El cuerpo de Bobby había cedido por inercia al recibir la fuerza del impacto con la que su líder intentaba derribar la puerta, ahora los golpes eran más potentes y más seguidos, la madera de la puerta empezaba a quebrajarse, June se apoyó contra la puerta ayudando a Jiwon.

Mi omega [ChanBin; iKON]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora