Capítulo 10. Confesiones.

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Mónica: Cuando te dio el infarto, Ximena y yo estábamos en el hospital y Ximena se sintió mal, fuimos a la enfermería y ella sacó esas pastillas que te dio aquella vez, se las mostró a la Doctora, y la Doctora nos dijo que esas pastillas estaban descontinuadas, porque causaban efectos secundarios muy graves, como ALUCINACIONES.

Camilo se quedó sin palabras, después de lo que Mónica le había contado. 

Mónica: Camilo, lo que te digo es verdad, pero... pero tu ya lo sabías, te diste cuenta, lo supiste?...

Camilo: Sí, lo sabía.

Mónica comenzó a llorar.

Mónica: ¿Desde cuando?  ¿Y cómo lo supiste tú?

Hubo un silencio durante unos segundos.

Mónica: Habla Camilo Sarmiento.  Quiero que me lo cuentes todo, con sinceridad.

Camilo: -Moni- Camilo suspiro. 
Esta bien, seré sincero. Esa vez yo creí que eras Diana. Cuando desperté me di cuenta que con quien había hecho el amor eras tú y no Diana.  Cuando me quedé solo en el departamento, me quedé pensando por horas, como pude haberlas confundido, de repente se me vino a la mente las pastillas que me dio Ximena, cuando leí que uno de los efectos secundarios eran las alucinaciones, llegué a la conclusión de que fueron las pastillas la causa de mi confusión. 

Mónica: ¿En enserio?  O sea que siempre lo supiste.

Mónica lloro con más fuerza. 

Camilo: Moni, deja te explico.

Mónica: Ay por favor, y qué me vas a explicar? Ya me lo dijiste todo, supongo que nunca me dijiste la verdad para no lastimarme.

Camilo: Lo hice para no romperte el corazón...

Mónica: Eso lo puedo entender, pero aún así me lo tenías que haber explicado desde ese mismo instante, y no dejar que me hiciera ilusiones contigo, y no hacerme creer que de verdad sentías algo por mi, pero... Fui una tonta.

Camilo: No Moni, yo no quería lastimarte, pero si nunca te lo dije fue porque hacer el amor contigo fue algo increíble, me sentí tan conectado a ti, me gusto tú piel, fue algo único y mágico, algo que nunca antes había sentido, es por eso que preferí no decirte nada, porque eso hizo que comenzará a sentir cosas muy especiales por ti.- Le acarició la mejilla.

Mónica: Claro... para ti fue muy cómodo, y mientas tanto qué, mientras tú te decidías con quién quedarte, si conmigo o con Diana, yo pensaba que en realidad me amabas, no Camilo tu tenías que decirme la verdad. 

Camilo: Lo sé Moni, y sé que fue un error no decirte la verdad desde un principio. Por favor...-Camilo se arrodilló ante Mónica y soltó en llanto.
Moni, te pido por favor que me perdones, soy un completo imbécil, nunca te supe valorar, te pido que me disculpes por todas mis pendejadas, te suplico me perdones.

Mónica: Camilo, qué haces?  Levantate.-  Camilo seguía arrodillado ante Mónica.

Camilo: No me voy a levantar hasta que me perdones, de igual manera te pido mil perdón por cómo te trate la vez que te corrí de Media Link y todas las cosas horribles que te dije cuando descubrí el trato que tenías con Diana, te insulte y te dije cosas horribles, te trate de lo peor y no lo merecías, soy un estúpido. Te pido que me perdones Moni, sé que antes ya te había pedido disculpas, pero siento que no como las merecías y por eso con el corazón en la mano y de rodillas te pido que me perdones...

Camilo estaba sumamente arrepentido y continuaba llorando desconsoladamente y de rodillas ante Mónica.

Mónica: Camilo, levantate. Tienes que tranquilizarte.

Camilo: No puedo, solo necesito tu perdón.

Mónica: Primero que nada te pido que te levantes, después hablamos. 

Camilo asintió con la cabeza.

Mónica: Sientate en el sofá.- Camilo se levantó y le obedeció, Mónica también se sentó. -Bueno Camilo, yo te perdono,  me hiciste mucho daño, pero todos cometemos errores, y ahora que has aceptado todos y cada uno de tus errores, quiero que sepas que de todo corazón, yo te perdono. -

Los dos se dedicaron una tierna sonrisa y Camilo abrazo a Mónica.

Camilo: Gracias, muchas gracias Moni, necesitaba tanto oír eso. - Mónica se levantó del sofá

Mónica: Te voy a traer un café Camilo, no mejor voy a hacer dos té verdes para los dos, y así tranquilizar los nervios.-

Mónica fue a preparar el té verde, para los dos, y en lo que se hervía el agua, ella fue con Camilo y se sentó a su lado.

Mónica: Bueno, ahora que ya dijimos lo que teníamos que decir, y que has aceptado tus errores, así como yo acepto que también cometí el error del trato que hice con Diana y de haberme entregado a ti, a pesar de que estabas casado...

Camilo: -Espera Moni- Interrumpió a Mónica.  Moni, acabas de decir que hacer el amor conmigo para ti resultó un error? 

Mónica: Y qué otra cosa puede ser Camilo?

Camilo: Para mi no, y quiero que sepas, que para mi no fue un error, lamento las circunstancias que sucedieron, pero para mi fue algo muy importante.

Mónica: Pero estabas pensando en otra, a quién le estabas haciendo el amor era a Diana, no a mi.

Camilo: Pero después supe que eras tu, y confieso que nunca me arrepentí, al contrario me gusto mucho. 

Mónica: Camilo, no sigas. ¿Qué caso tiene?  Después de todo, tu amas a Diana, una cosa es el amor y otra cosa es el sexo.  Te gusto tener relaciones conmigo, te gusto mi cuerpo, mi piel, es todo.  Eso era lo que en verdad sentías, atracción sexual.

Camilo: De verdad eso es lo que piensas tú?  ¿Crees que solo sentía atracción sexual hacía ti?

Mónica: Sí. Porque nunca dejaste a tú esposa Diana por mi, porque al final tú la elegiste a ella, porque la amas, hasta renovaron sus votos matrimoniales.  

Camilo: Cuando me dio el infarto, fue que entendí lo que  llevó llegar a ese extremo a Diana, entonces la comprendí, y entendí las razones por las cuáles hizo ese trato contigo, la entendí porque yo estuve al bordo de la muerte, fue entonces que la comprendí y luego de eso yo le conté a ella que había hecho el amor contigo pensando en ella. 

Mónica: Te atreviste a contarle eso? - Pregunto llena de furia.

Camilo: Quería salvar mi matrimonio y si te lo cuento, es porque no quiero mentirte más.

Mónica: Entiendo. Bueno pues tu mismo lo dijiste, querías salvar tu matrimonio.

Camilo: Moni... 

Mónica se levantó del sofá.

Mónica: Voy a ir a prepara el té verde, ahora vuelvo. - Camilo asintió con la cabeza.   

Mónica le dio una taza de té verde a Camilo, y ella también se preparó uno, los dos dieron varios sorbos. 

Mónica: Bueno... continuó, tu mismo lo acabas de decir, quisiste salvar tu matrimonio.

Camilo: Y por otra parte también lo hice por mis hijos, yo creía estar enamorado de Diana, pero cuando te fuiste a Madrid España con Iñaki, sentí que una parte de mi corazón y de mi alma había muerto, y no pienses que se debió por “costumbre" a que por 20 años fuiste tan incondicional conmigo, no, fue porque en realidad yo...

Mónica: ¿Tú? 

Camilo: Y hace unos días que te celebramos tu cumpleaños, y que Iñaki te pidió matrimonio y al saber que estas embarazada de el, yo me di cuenta que... en realidad yo Mónica, yo te amo. 

Mi verdadero amor. Monilo❤ (Terminada).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora