Kate ayuda al mejor amigo de su hermano a dejar de ser un playboy a ser el novio que toda chica desearía tener, para asi conquistar a una amiga suya. ¿Pero que pasa cuando ella empieza a tener sentimientos por él?
Me levanté y fui corriendo al baño, me alisté lo mas rápido posible y luego bajé para comer mi rico desayuno que mi madre me había hecho. Tomé una tostada y la empecé a comer rápidamente.
— ¿Por qué tanta prisa? — preguntó mi madre con una pequeña sonrisa y con el ceño ligeramente fruncido.
— Pues, sabes muy bien como son Manu y Dylan, odian esperar y si me tardo unos segundos no me llevan — expliqué a mi madre. Escuché como un auto estacionaba en frente de casa, Dylan caminaba hasta la puerta con una sonrisa traviesa — nos vemos mamá — le di un beso en la mejilla y corrí hasta el auto de Manu. Entré en él y los dos me miraban con desaprobación — ¿Y ahora que?
— 10 segundos tarde — mi hermano me miró con desaprobación. Yo rodé los ojos he hice una mueca, luego los dos se rieron y arrancaron el auto.
En el camino, los dos hablaban sobre la fiesta de Kimberly, la cual seria en una casa del lago. Yo solo los escuchaba con atención y algunas veces hacia una mueca por escuchar lo que decían sobre las chicas. Estos dos hombres nunca van a cambiar.
— ¿Y tu Kate, irás a la fiesta? — preguntó Manu mientras me veía por el retrovisor y mi hermano rápidamente le miró serio. Iba a responderle pero mi hermano me interrumpió.
— No, ella no se va a ir — Respondió serio.
— ¿Por qué no? — pregunté mirándole con el ceño fruncido.
— Por que ese no es lugar para chiquitas como tu, ve a leer un libro que ganas más — dijo mirándome con una pequeña sonrisa.
— Solo porque habrá lleno de chicos pervertidos como tu, no significa que actuaré como las porristas que te quedas todos los días — Respondí de mala gana.
Él me fulminó con la mirada — no te vas y punto — dijo con la voz firme. Yo me encogí de hombros y no seguí haciendo pucheros porque sé que de todas maneras mamá me dejará irme a la fiesta .
Llegamos al instituto y noté como muchas miradas se posaron en nosotros, mas bien en mi hermano y su mejor amigo, ya que ellos son muy populares por ser parte del equipo de fútbol y por ser hermosos, palabras de las porristas jamás mías.
Caminé hasta Kassie, mi mejor amiga, la cual miraba a mi hermano y a Manu algo atontada — Tienes suerte, daría lo que fuera por venir acompañada por ellos — dijo con una voz atontada.
— No es tan agradable como crees, siempre correr para poder llegar en el auto porque si tardo unos segundos ya se van sin mi, y también, es el celoso de mi hermano y su mejor amigo, no es gran cosa — Puse mi vista en ella, la cual me miraba sorprendida.
— ¿Cómo que no es gran cosa? Todas se mueren por ellos y harían lo que fuera por estar en tu lugar — dijo Kassie mirando a los dos.
— De todas maneras, ellas no podrían quedarse con ninguno de los dos, porque uno es mi hermano y el otro mi hermano de consideración, no puedo verlo como algo más — Respondí obvia y Kassie me miró con pena.
— Siento mucho por ti, por no poder quedarse con esos bombones por cuestiones familiares, pero cuando logre quedarme con uno de ellos, te diré la experiencia — Pone una mano sobre mi hombro con una voz determinada y nos reímos.
— Mejor nos vayamos o llegaremos tarde a clases — Miré mi reloj con una sonrisa, ella asintió y nos dirigimos a nuestra clase y por suerte nos tocaba juntas, lo malo es que la materia es historia y yo odio con toda mi alma historia. Sera una larga e interminable mañana.
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Ya era hora del almuerzo y yo estaba en una mesa junto a Kassie. Me había olvidado mi dinero para el desayuno, pero por coincidencia, tengo a un querido hermano que tiene mucho dinero, lo malo es que nunca me lo presta.
Yo me dirigí a la mesa donde se encontraba mi hermano, sus amigos y las algunas chicas, las cuales eran novias o ligues de los que estaban ahí. Abracé a mi hermano por detrás y le di un beso en la mejilla.
— Hola mi querido hermano que amo tanto — Le acaricié el pelo de manera amorosa, mientras seguía abrazada en él con mi brazo libre.
— No te daré dinero — Me alejé un poco para mirar como en su rostro adornada una pequeña sonrisa y luego bebió un sorbo de su jugo.
— ¿Por qué? ¿Qué te hice? — Pregunté con el ceño fruncido.
— Pues, por que hoy simplemente no quiero — Se encogió de hombros sin dejar aquella sonrisa, lo que me daba rabia.
— ¿Sabías que puedo morir si no como? — Dramaticé.
Él pensó por un corto tiempo poniendo su mano en su barbulla y luego vuelve a mirarme.
— Sufre — dijo mi "amoroso" hermano con una enorme sonrisa. Yo le fulminé con la mirada y me crucé de brazos, como una niña pequeña haciendo berrinches.
— Vamos, yo te pago — Manu se levantó y yo le sonreí de oreja a oreja, pero antes de irme junto al ojiverde, quería molestar un rato a mi hermano.
Volví a agacharme un poco para estar cerca de su oreja y susurrarle.
— Manu es tan bonito y caballeroso, ¿No crees? — Sabía que él iba a sentir celos y en la próxima vez si me daría el dinero. Me alejé con una sonrisa y escuche el gruñido de mi hermano.
Agarré toda la comida que quería y el adorable de Manu me pago, creo que cambiaré de hermano. Dylan no haría mucha falta.
— Gracias por pagarme el almuerzo, mañana te devuelvo el dinero — dije mientras me sentaba en la mesa donde se encontraba Kassie, la cual se encontraba algo confundida al verlo.
— Sabes que no es necesario que lo haga — Me sonríe de lado mientras se rasca la nuca y luego las esconde en los bolsillos de sus vaqueros.
— Gracias, pero no quiero aprovecharme de ti — Conteste sonriente. De verdad estoy pensando seriamente en convencer a mi madre en adoptarlo.
— Me voy con tu hermano porque estoy sintiendo su mirada de rabia en mi por hablar con su pequeña — Señaló con sus ojos hacia mi hermano.
— Entonces, nos vemos — me despedí de él.
— Nos vemos — Revolteó mi pelo para luego retirarse de ahí y sentarse en la mesa en donde estaba antes.
Empecé a comer mi hamburguesa y Kassie tenia una sonrisa pícara en la cara, yo rodé los ojos y reímos. Ella sabe muy bien que él y yo nunca estaremos juntos. Él es el territorio prohibido y yo también lo soy.