El Idiota Del Mejor Amigo De Mi Hermano - Manu Rios [SI#2]

CAPITULO VEINTISIETE

EXTRAÑA SENSACIÓN

La biblioteca es el único lugar dónde puedo leer mi libro de crepúsculo en paz y también el lugar dónde no estaré siendo el mal tercio de nadie, ni de mi hermano con Kassie, ni de Ryan con una chica que anda de lío y mucho menos de Cadence y del Rios. Quiero demasiado que ya termine ese campeonato de fútbol del colegio para que pueda pasar mas tiempo con Grier y no estar tan sola, menos mal que después de clases saldremos en una cita.

Empecé a leer este libro el año retrasado y aún estoy en la mitad. Ya vi unas cien veces esa película y era tan corta, ¿porque este libro tarda una eternidad para terminar? 

- ¿tu por aquí, O'Conell? - alcé mi mirada y me encontré con un sonriente Manu - no sabía que leías, mucho menos esas apestosas novelas.

Él mira burlón a la portada del libro, yo le muestro mi lengua.

- dices eso porque tienes envidia porque no eres un vampiro o un hombre lobo, y ni no eres tan guapote como ellos.

- yo no tengo envidia de nadie bonita, yo soy perfecto - me guiña un ojo acompañado de su típica sonrisa burlona, yo le sonrío y ruedo los ojos - ¿porque no te fuiste al comedor? Te estaba esperando.

Mi celular suena y era un mensaje de Nash que decía: 

Hola linda, lo siento tanto pero no podré salir contigo hoy, hay demasiado entrenamiento y mi hermano viene a vivir con nosotros otra vez, tendré que ayudarle. Mañana puedes venir en mi casa para que te presente a mi hermano y luego podremos salir a cualquier lugar que quieras para compensarte. Besos: tu osito cariñosito.

Si mi día estaba malo, ahora esta peor. Solo le respondí con un ok.

- ¿todo esta bien? Te vez algo mal - me mira preocupado, yo niego con la cabeza y fuerzo una sonrisa, que me salió mas una mueca.

- todo va bien, es solo que no podré salir con Nash hoy. A quedarme sola en mi casa comiendo palomitas otra vez.

Agacho mi cabeza y respiro fuertemente, estoy tan mal que ni puedo fingir una sonrisa y odio que me vean cuando estoy asi de vulnerable.

Siento como él toma mi mano que estaba encima de la mesa y la entrelaza con la suya, lo miro y él me sonríe tiernamente, sin ninguna pizca de su típica sonrisa burlona de playboy.

- no te pongas así O'Conell, me siento muy mal al verte así - empieza a acariciar la palma de mi mano con su pulgar - yo estaré contigo y veremos un maratón de aquella serie que tanto te gusta, mientras comemos como cerdos y hablamos mal de las personas.

- pero odias Gossip Girl.

Manu se encoje de hombros y frunce los labios.

- lo que haces por amor.

Él acerca su silla a la mía y me abraza. Extrañaba demasiado a este playboy.