La Invasión.

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Había pasado un día desde que el matrimonio de la rubia y el castaño habían recibido la notificación para ir a juicio por la posesión de Star entre Marco y el esclavista.

La hermosa rubia estaba en pánico pero trataba de mostrarse tranquila en todo momento para no alarmar a su hija, además de que ya había un plan.

El plan se había elaborado en caso de recibir un revés en el juicio en caso a Star se la den a quien pretende ser su amo legal, en ello Marco le dijo todo lo que tenía ella que hacer para salvarse.

La rubia tenía la mente fría en todo ello que hacer para salvarse, pero ello no significaba que sería fácil para realizarse ya que debía ser muy cuidadosa y hacer algo que no quería hacer, pero sería necesario para estar a salvo con su familia.

El verano era caluroso y lluvioso en esos días, la brisa fresca soplaba de manera suave sobre aquella ciudad del este que al llegar al rostro y cuerpo de todos las personas les daba un aliento que los aliviaba de aquel calor abrazador, las lluvias se precipitaban con fuerza en esos días humedeciendo el ambiente y levantando el calor y el polvo de aquella ciudad desprendiendo aquel aroma peculiar a tierra mojada aunado a las fragancias de la vegetación urbana y las zonas boscosas de su alrededor, los truenos caían con fuerza de manera ocasional con aquellas lluvias veraniegas aunque llegaban a haber algunas tormentas eléctricas las cuales deslumbraban constantemente a quienes las veían.

La pareja aprovechaban este espectáculo de la naturaleza nocturno para verlo y disfrutarlo mientras se tomaban una taza de café frente a la ventana de la sala abrazados y tomados de la mano, sentados en aquel marco amplio sólo disfrutando su compañía, mientras su pequeña Moonlight juega con el pequeño Scott a quienes veían ocasionalmente que estuvieran bien, ellos a veces jugaban y otras simplemente se abrazaban expresando su amor inocente e infantil que con el tiempo maduraría de acuerdo a su edad.

El joven matrimonio mientras veían la lluvia y disfrutaban aquel café con aroma a canela mezclado con las fragancias de la vegetación y la tierra mojada hablaban de otras cosas, no querían hablar en ese momento de nada relacionado al juicio ni menos de que se querían llevar a Star para esclavizarla, solo hablaban de sus expectativas y de sus futuras vivencias que esperaban fueran felices.

-Star: Me dará mucho gusto cuando nuestra hija se case con el en unos años, que hermoso amor tienen, que son niños todavía pero cuando sean adolescentes sera un amor mas hermoso y también muy intenso, se casarán un día, se amarán todos los días de manera intensa y serán muy felices.

-Marco: Se que así es, me dará también mucho gusto cuando ella sea grande y disfrute bien ese gran amor y haga su vida con el - la rubia se abraza mas fuerte a su amado y posa su cabeza en el hombro de su castaño para después frotar su mejilla a la de el seguida de besos tiernos, la lluvia sigue cayendo y ellos se siguen mostrando afectuosos, ellos quieren hacer el amor pero deben esperar a la noche para poder entregarse a su amor, su hija y yerno siguen jugando y no tienen sueño todavía para que se vayan a dormir, los padres del niño rubio le dieron permiso que se quedara a dormir como una pijamada para ellos dos nada mas.

Los niños seguían jugando en la sala solo poniéndose atención uno al otro, pero los padres de la niña castaña hacían lo mismo, Star empezaba a besar a Marco en la boca disfrutando el contacto de el, ella apenas puede resistir controlarse un poco, los corazones de sus mejillas se iluminan de un rojo intenso, esta en un éxtasis total, ella empieza a replegarse su hermoso y curvilíneo cuerpo a el para empezar a hacer que el empiece a excitarse con el contacto que ella le da, la rubia es increíble seductora de su pareja, sabe encenderlo de manera rápida y el también a su vez lo hace con ella, entonces la pareja empieza a besarse de manera mas erótica ya que están perdiendo el control, el quiere arrancarle su minifalda de mezclilla y su blusa color verde para empezar a hacer su entrega amorosa, pero por los niños debes contenerse.

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