Cuando mencioné que soy una persona que se acostumbra demasiado rápido a las cosas, estaba hablando enserio.
Me acostumbré tanto a tener a Ryan cerca, tanto como ahora me he acostumbrado a no tenerlo, y a extrañarlo.
Soy rara en ese sentido, se supone que soy joven, se supone que los jóvenes no nos aferramos a personas porque ha esta edad todo es temporal, lo he escuchado tanto, pero joder, nunca he comprendido cómo se aplica.
Y Noah es un claro ejemplo, la única amiga que he tenido, si yo tuviera el poder de que Logan nunca hubiese hecho esa tonta declaración de amor hacia mi, a puesto a que Noah y yo seguiríamos siendo amigas, pero aunque quiera, no puedo echar el tiempo atrás, mucho menos cambiar lo ya ocurrido.
Y continuando con el tema, también me he acostumbrado a dormir temprano, casi en cuanto llego a casa, luego del trabajo, a veces hasta me da pereza ducharme, eso no importa tanto, desde que Ryan se fue, duermo sola.
Y he aquí mi rutina de todos los días.
Tomo las sabanas de la cama para hacerme un espacio, hace frío, así que prefiero que estas cubran de mi y no de la cama.
Termino de acostarme, cierro los ojos y me acurruco lista para dormir cuando escucho a mi madre llamarme.-¡Rae! -Exclama mi mamá. -¿Dónde dejaste la canela?
¿Quién prepara canela a las 10:19?
Cierro los ojos, no quiero gritar, pero yo no sé dónde haya quedado esa canela, así que, tranquilamente me levanto de la cama y comienzo a bajar las escaleras hacia la cocina.
-Mamá..
Mis palabras se ahogan en mi boca al mirarla. Carolina. Trago duro mientas mis ojos se abren enormes al mirarle, esta detrás de mi madre, una de sus manos descansa en la madera de la silla en que mi mamá está sentada, sonríe mirándome y su sonrisa se hace más amplia mientras posa su vista en mi mamá. ¿Qué demonios?
-¿Hija no era más sencillo que simplemente me gritaras? ¿Dónde has dejado la canela? No tenías que haber bajado.
Mis ojos siguen intactos en Carolina, parece que ella disfruta la escena, el verme asustada frente a mi madre, joder esto es demasiado, ¿Qué se supone que ella pretende hacer? ¿Cómo fue que entró? ¿Qué se supone que haga yo?
Persisten tantas incógnitas en mi cabeza, el pensar que ella podría hacer una acción rápida, como la del otro día, pero esta vez en contra de mi mamá. ¡¿Pero yo como la defiendo?!-Rae, ¿Estás bien? Hija te has puesto pálida de repente. -Habla mi mamá poniéndose de pie, encaminándose hacia mi y pasando de lado de Carolina.
Mi piel se ha puesto de gallina.
Trago duro antes de hablar. -Es-estoy bien. -Mi voz suena como un eco.
-¿Enserio? -Pregunta sujetando un mechón de mi cabello. -¿Te gustan las nuevas cortinas? No has dejado de mirarlas.
-¿Qué? Ah, -Reacciono. -Las cortinas (detrás de Carolina) si tan insignificantes, no son necesarias, pero aquí están, se hacen resaltar, pero están muertas. -Volteo a ver a mi madre. -¿No?
Ella me mira unos segundos fijamente y luego sonríe. -La filosofía persiste en ti cariño. Bueno si. -Continúa. -Solo es tela, y en colores muertos, debí haber comprado quizá en color verde pastel, no café opaco, pero en fin.
-A veces no tomamos buenas decisiones. -Demonios que estoy haciendo, me recrimino. -Pero a veces tomamos las mejores, como cuando tú y papá decidieron comprar esta casa, o cuando eligieron los muebles, o la fecha en que se casarían, todo eso, -Volteo a ver a Carolina. -persistirá aún después de la muerte, por qué ha sido real.
ESTÁS LEYENDO
La Razón De Estar Contigo.
Genç Kurgu¿Alguien se ha preguntado, qué hay después de la muerte? Si. ¿Hay un cielo y un infierno como algunas personas lo afirman? ¿Las personas descansan, ó sufren ahí por los hechos realizados en vida? Sin duda un tema abastecedor, del cual, podríamos di...