¿No les pasa?
Han estado toda su vida anhelando rotundamente el estar cerca de una persona, crean mil escenas de vosotros juntos hablando y manteniendo contacto, un rose de manos o un pequeño beso sería la gloria infinita, nerviosismo y cosquilleo, de cuando las miradas consisten por unos segundos y luego ¡boom! Todo eso sucede.A veces, para mi, mejor dicho siempre, es más importante mantener una buena conversación con una persona, tener cosas en común, de las cuales podamos debatir, discutir y luego llegar a un acuerdo, Stefan posee todo eso, pero sigo sin sentirme completa cuando estoy con él.
-¿Estás aquí Rae? -Me pregunta haciéndome regresar a la realidad.
-Oh perdona. Me distraigo muy rápido con cualquier tontería.
-Me he dado cuenta. -Sonríe. -Eres curiosa, eso te hace muy interesante. Hace preguntarme en qué piensas tanto.
-Pienso en que eres tal y como te tenía en mi expectativa.
Las comisuras de los labios de Stefan se levantan en una amplia sonrisa. -Eso es bueno.
Le devuelvo la sonrisa acomodándome en mí lugar en la silla.
-¿Por qué no antes?
-¿Disculpa?
-Si. -Dice colocando sus manos en la mesa y acercando su rostro por medio de esta a mi. -¿Por qué no tuvimos contacto desde antes?
Involuntariamente coloco una sonrisa en mi rostro mientras continúo escuchándole.
Te veía desde hacía un tiempo, desde siempre he ido a la cafetería, y cuando comenzaste a trabajar ahí llamaste mi completa atención.
-Eres bueno disimulándolo entonces.
Stefan ríe volviendo hacia atrás. -Era divertido mirarte de reojo mientras tú me acosabas descaradamente.
Mis ojos se abren enormemente al escucharle, según yo era precavida y cuidadosa.
-Y-yo..
Stefan vuelve a reír abiertamente. -Descuida Rae, no me gustan las chicas que tratan de lucirse 'inalcanzables' -Hace comillas con sus dedos. -prefiero a las chicas que se dejan ver como son, y por lo que son.
Tú por ejemplo, eres una persona sencilla, y eso te hace tan diferente, tenemos un millón de temas de conversaciones y eso te hace tan interesante, a veces actúas como una niña pequeña a la cual tengo que terminar de criar y eso te hace lucir tan tierna.Estaría saltando en su regazo si me hubiese dicho eso hace un tiempo.
-¿No dices nada? -Pregunta en medio de sonrisas. -Descuida, tampoco me disgusta que no hables mucho.
Siento mis mejillas calentarse a nivel extremo, cierro los ojos al sentir su mirada siempre en mi y niego.
-Dejaré que tomes aire unos momentos, mientras traen nuestra comida iré al servicio. -Dice poniéndose de pie.
Solo asiento y lo veo marcharse. Cierro los ojos sintiendo un cosquilleo y pongo toda mi atención a la nueva voz que se hace escuchar. -¿Alguien ya le atiende?
-Si, ya, gracias.. -Doy una sonrisa de boca cerrada y levanto la vista hasta verme reflejada en sus ojos, de nuevo.
-Ryan...
-Rae, -Veo alivio en sus ojos y una mueca confusa sobre sus labios. -¿Cómo estás?
-Bi-bien. -Alardeo. -¿Qué estás haciendo aquí?
Ryan levanta los hombros en señal de respuesta y al cabo de unos segundos finalmente lo oigo hablar. -He venido a atenderlos a ti y a ¿Stevan?, como parte de mi nuevo trabajo.
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La Razón De Estar Contigo.
Teen Fiction¿Alguien se ha preguntado, qué hay después de la muerte? Si. ¿Hay un cielo y un infierno como algunas personas lo afirman? ¿Las personas descansan, ó sufren ahí por los hechos realizados en vida? Sin duda un tema abastecedor, del cual, podríamos di...