012

4.6K 798 164
                                        

—¿Quién eres tú?— preguntó enfadado Taehyung y parpadee confundido al notar que me encontraba entre los brazos de un desconocido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¿Quién eres tú?— preguntó enfadado Taehyung y parpadee confundido al notar que me encontraba entre los brazos de un desconocido.

—Nadie que te importe— respondió el extraño y una pequeña chispa se encendió en mi cerebro aunque aún no lograba procesar por completo la información.

Dejé de llorar ante la situación y me deje arrastrar hacia afuera por este chico, notando la mirada furiosa de Taehyung. Me dolía demasiado su forma tan brusca de tratarme pero aún así, ¿Por qué sentía que aún lo quería?.

Soy un verdadero tonto. Tonto, tonto, mil veces tonto SeokJin.

—¿Quién es ese idiota?— me detuve abruptamente al recordar que mi mano seguía apresada en la de este pelinegro.

El volteó observándome con sus pequeños ojos gatunos —¿Te volviste mudó o qué?— cuestionó.

Entonces la chispa termino explotando y sin pensarlo o temerlo me abalance hacia los brazos de este pequeño gruñón.—¡Yoonie!— exclamé emocionado.

El me devolvió el abrazo y lo oí suspirar. —¿Cómo es que no me reconociste desde el inicio?. Eres un cabeza hueca.

—Lo siento, el color de tu cabello es diferente ahora y también tu voz cambio— murmuré sin querer separarme de su lado. — Además ya no estás gordito.

No podía creer que YoonGi, mi mejor amigo de la infancia estaba aquí, conmigo. De vuelta como en los viejos tiempos.

—Ah. No me recuerdes esa oscura parte de mi pasado— negó constantemente con la cabeza y me tomó de la mano para salir de esa pasillo.

En donde por cierto, varios estudiantes nos miraban con asco o sorpresa quizás, al parecer la gente por aquí era homofóbica. —Eras tierno, como un osito de peluche.

—¡Vamos Jin!— exclamó con una mueca. —Me decían "pelota con ojos", era tierno solo para ti, ¿Acaso ya olvidaste las cientos de veces que me defendiste de los grandulones de sexto grado?

—Es cierto...— murmuré recordando mis días de niñez, cuando tenía el valor para cuidar de Yoon y defenderlo de los maltratos de los demás. Todo lo contrario ahora, que ni de mi mismo puedo cuidar.

Levanté la mirada cuando él jaló de mi mejilla causándome dolor. —¿Por qué estabas llorando?

—Bueno...— me quedé callado, tenía mucha vergüenza de contarle lo que había pasado en el almacén.

No podría decirle que tuve la cosa de mi novio en mi boca a la fuerza.

—Jin— me cohibí ante la manera en la que pronunció mi nombre, tan varonil. —Ya no soy más ese chiquillo gordo y llorón que no podía defenderse, ahora estoy aquí para protegerte, ¿Ese tipo te lastimo?

—TaeHyung es mi novio— respondí mordiendome el interior de mi boca. —Discutimos y por eso estaba llorando, nada más. Él no es malo— jugué con los bordes de mi suéter.

Me sentí aliviado cuando suspiró más tranquilo. —Pues dile que tenga cuidado de volver a hacerte llorar o le patearé el culo, no, ¿Sabes qué?, se lo diré yo.

—Tranquilo Yoonie, no es algo tan grave— me encogí de hombros y sonreí. —Mejor cuentame cómo es que estás aquí de nuevo.

—Haré como que no me di cuenta de que querías cambiar de tema. Ahora sí, siéntate por qué esto va a tardar— sonrió mostrando sus encías y pequeños dientes.

Ah. Había olvidado lo bien que se siente tener a alguien con quién hablar. Ahora ya no estaría tan solo.

Sweet Lies| TAEJINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora