El Deseo Navideño de un Magnate. N°6 Serie Amigos de la Realeza

Capítulo Final

Escuché los dos disparos y me desperté de golpe. Me costaba respirar. Enfoque mis ojos y el techo lo vi oscuro. Había caído la noche. Giré mi rostro hacia la izquierda y observé la melena de cabello de Cameron apoyado en la cama. Su mano estaba entrelazada con la mía. Sonreí levemente y suspiré. Todo fue una pesadilla. Los disparos están solamente en mi mente. Cameron debió sentir que me desperté porque él también lo hizo. Sus ojos estaban adormilados y cuando me vio suspiró. Apreté levemente su mano y sonreí.

- Todo fue una pesadilla ¿cierto?--- le pregunté con voz ronca. Él besó los nudillos de mi mano que aún estaba entrelazada con la suya.

- Tranquila mía cara, Mika no volvera a hacerte daño. La policía la encerró.

- No entiendo porque me disparó--- pregunté con voz rota. Él suspiró y en su rostro pude ver culpabilidad y rabia.

- Mika fue una de mis amantes anteriores. Estuve con ella hace un año, pero la dejé al ver que ella trato de hacer cosas que yo no quería---puso una mueca--- en el fondo, ella tiene una mente perversa. No quise estar cerca de ella por lo que la abandoné y la obligué a través de mi abogado que no me contactara. Que no tuviera nada que ver conmigo. Sin embargo, hace un mes ella aborto y se complicó. Estuvo internada en una clínica en Nueva York donde me colocó de custodio. Tuve que viajar y llamar a su manager para que se hiciera cargo. Yo no quería tener nada que ver con ella. Sin embargo, debo admitir mía cara que cubri los gastos clínicos de ella. En el fondo no soy tan malo o tan despiadado para no humanizarme ante la salud---vi como el suspiró--- Hace unos días mi abogado me llamó para informarme que ella había pedido el alta voluntaria de la clínica en el que estaba internada, además que él había hablado con el manager de Mika y él le comentó que ella estaba yendo desde hace un año a un psiquiatra, porque se había obsesionado conmigo. Él le mostró fotos del ultimo amante que ella tuvo y era idéntico a mí. Él era el papá del bebé que abortó. El hombre al ver que ella había salido embarazada la abandonó por otra mujer. Mika se practicó un aborto y casi muere en el intento. Mi abogado me dijo que extremara la seguridad porque no se sabía dónde estaba ella--- sentí como él apretaba mi mano y su rostro se tornaba de rabia--- debí haberle hecho caso, pero nunca pensé que llegaría a tales extremos. Cuando escuché el disparo, sentí que mi mundo había acabado y cuando te vi  tendida en el suelo toda llena de sangre pensé que te había perdido---sus ojos se cristalizaron. Los cerro, respiro hondo y los volvió a abrir---lo lamento mucho mía cara. Nunca creí que ella sería capaz de disparar. Lo siento mucho. No te protegi como debí haberlo hecho---separé mi mano de la suya y acaricié su mejilla, sus ojos, sus labios, su cabello y lo miré con todo el amor que siento por él.

- No debes disculparte. Tú no me disparaste, me disparó ella y tú nunca creíste que ella sería capaz de hacer algo como eso, así que no te eches la culpa de algo que no pensabas que ocurriría. No puedes saber que puede o que piensa hacer otra persona, así que olvida lo que ocurrió. Yo también trataré de olvidarlo. Te amo con toda mi alma y estoy feliz de que tú lo hayas admitido--sonreí con cariño--- Annie tenía razón--- él me observó con sorpresa y sonrío levemente

- ¿Annie tenía razón?

- Si---respondí alegre--- Annie fue la que me dijo que tú me amabas. Cuando llegue a su casa en lo único que pensé fue en escapar e irme a Londres y no volverte a ver, porque sería difícil para mí estar junto a ti sin que tú me amaras, pero Annie habló conmigo y me contó de tu pasado y me hizo ver que no podía escapar que debía luchar por tu amor. Ella me dijo que tú no actuabas como realmente eras. Que estabas distinto desde que llegamos a Roma. Que ella no te conocía esa faceta y para ella eso era amor.  Así que me hizo ver que tú me amabas y fui a verte---sonrei levemente--- y aquí estamos--- él entornó sus ojos y sonrió.