-¿¡PORQUE CARAJOS ESTABAS DESANGRANDOTE EN UNA DUCHA JEON JUNKOOK!?- preguntó Kim Taehyung en plena oficina universitaria, pero que gran bocota tiene.
-Vaya, vaya ¿Ahora si te cuerdas de mi nombre puto?- Jeon cruzó sus brazos justo en la parte de s...
Ya era hora, había tomado mi mochila para colocarla en mis hombros e irme de mi salón de clases. Pero justamente cuando dí un paso hacia los pasillos, dos manos grandes me sujetaron de mis fragiles brazos y le jalaron hacia atrás. Tambaleé varias veces para no caer y miré con rápidez quienes me sujetaban. Pues los mismos chicos inmaduros que estaban antes en mi casillero, me tenían sujetado hacia ellos.
-¿Adonde crees que vas Jeon?- Los labios de Yoongi se movieron lentamente con sus alentadoras palabras. -Espero que no sete haya olvidado lo que tenemos que resolver- negué varias veces con mi cabeza y luego miré a Jimin, el cual se reía junto a Yoongi. Parecía que se divertían cuando tenían que arreglar cuentas con alguien.
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Ambos chicos me acompañaron hacia la biblioteca. Tenía una postura bastante retante mientras ibanos de camino, las personas me miraban con rareza al ver a un debilucho junto a dos de los chicos que pertenecían a el club de deportes.
Digamos que mi rango en mi salón de clases no estan alto como el de Jimin y Yoongi, pero si era mayor comparado con los nerds o idiotas. Asi que era bastante raro ver a una persona tan normal como yo entre ellos.
Cuando entramos a el salón mi estómago se revolcó causandome nauseas. No creí ponerme nervioso ante la presencia de Taehyung en ese lugar, pero al verlo sentado en su silla con sus pies descansando encima de la mesa, sentí el verdadero temor. Es decir, sus labios tan serios, su mirada clavada en mi y el aura téteico del lugar ¿Como es que pensé jugar a el chico rudo con él?
Me acerqué a la mesa a paso lento y luego le miré -¿P-porque necesitabas verme? Creí que...- bajé la mirada por unos segundos para mirar los zapatos de Jimin Y Yoongi, los cuales estaban al lado mio. -Con el trato de la oficina fue suficiente para los dos-
-Jimin...Yoongi ¿me dan unos minutos a solas?- Miré de reojo como los dos jovenes asentían seriamente y se fueron de este lugar. Pues digamos que el salón no era muy usado, asi que no era raro que esto estuviera vacio si Tae y yo no estuvieramos aquí.
-Ahora si...¿¡Que diablos quieres puto!?- Alcé una ceja y golpeé la mesa levemente. Pues para mi no es juego que mi crush este más involucrado en mi vida varias veces. Osea, ES MI JODIDO CRUSH se supone que este hetero de mierda me ignore para que me llame aún más la atención. Pero creo que Taehyung no sabe nada de eso, o es que nunca lo ha intentado con un "hombre".
-Primero que nada- escuché como respiraba profundamente para tomar paciencia conmigo. -¡A MI NO ME LLAMAS PUTO BLOODY MARY!- abrí mi boca ofendido por su comentario y luego alcé mi voz.
-Tal vez soy bloody Mary...PERO TU, TU ERES UNA FÁBRICA DE BEBÉS ANDANTE, SÓLO MIRAS A UNA CHICA Y LA EMBARRAZAS- moví mis brazos como todo un dramático que era.
-Bah bah- el negó varias veces, como si no pudiera creer que discutía con alguien como yo -Escucha Kook, estás aquí por una sencilla cosa- una sonrisa de lado se plasmó en sus labios. Pues sólo pude ladear la cabeza cuando ví que él había sacado de su mochila un abrigo igual que el de Jimin y Yoongi tenían puestos del club de deportes.
¿Recuerdan cuando dije que esos abrigos representaban a su grupo de amigos populares en especial? Pues ese mismo pedazo de tela estaba en la mesa entre nosotros dos.
-¿Porque?...- me quedé mirando lo suave y bonito que era. Con el logo de su equipo de deportistas y mi nombre en la parte de atrás.
-Quiero que te unas a mi y mis chicos. Hago esto porque ya tenemos algo que nos une, nuestros secretos más oscuros serán totalmente sellados por este abrigo. Serás uno de los míos, alguien popular, alguien con dignidad, alguien que tiene mi protección- no podía creerlo ¿ser uno de ellos era así de fácil?
-¿A que te refieres con protección- pregunté de forma curiosa mientras modía mi labio. No quería quedarme con las dudas.
-Si tienes este abrigo y todos sepan que estás de mi lado...nadie se meterá contigo, ni te molestará. Te doy mi protección acambio de tu boca cerrada sobre Daegu y yo- asi que de esto se trataba, él me daría esto sólo por mantenerme callado...¿Que tan importante es esa chica? Ya casi me dan celos de lo tanto que la protege.
Tomé el abrigo en mis brazos, le dí un abrazo y luego aspiré el olor a nuevo que tenía impregnado. Ya era un hecho, necesitaba protección en esta universidad. Y ya podía decir que la tenía.
-Me alegra que aceptaras Kookie. Pero antes de que te vayas...necesitamos entrar en confianza- y ahí fue cuando dudé de aceptar esta dulce oportunidad. -Dime tu secreto...y yo diré el mío- le miré con los ojos muy abiertos casi apunto de salir corriendo. ¿Para que decirle mis condiciones si aún asi no me sentiré seguro con él?
Tae frunció el ceño por un momento -Prometo decir el mío después de ti...pero necesito que hables para que esto sea oficial Jeon- solté un suspiro y luego maldecí todo cansado del asunto, bien...sólo será una vez, una vez sólo para estar protegido.
-Bien- solté mi mochila y la tiré a una esquina. Luego pasé mis manos hacia mi camiseta de botones que poco a poco la fui desabrochando al igual que mi pantalón.
-Por favor...te enseñaré...pero sólo lo hago por la protección que necesito- miré a sus ojos que buscaban una explicación seria para saber el porque me quitaba mi ropa.
Me quité mi camiseta y la coloqué encima de la mesa, dejandole ver a Taehyung mis senos que al parecer se estaban desarrollando aún.
Sabía que no podía dejar que su mirada curiosa me detuviera, asi que asi de rápido bajé mis pantalones junto a mi boxer y luego cubrí mi cara al no poder creer que lo había hecho. Había dejado mi cuerpo extraño al desnudo y a la vista de sus ojos.
-Y-yo soy...un herm-hermafrodita- susurré casi temblando de miedo. -Por eso...e-es que estaba sangrando en las duchas ¡ESTABA MENSTRUANDO!- sentí un nudo en mi garganta que me apretaba cada vez más. Hasta dejar caer algunas lágrimas de dolor que me cosumían por dentro.
-Mierda...- escuché la silla moverse, él se había levantado y por el sonar de sus pasos, sabía que se acercaba a mi cuerpo desnudo -Eres...-
-¿¡Soy extraño!?- Chillé aguantando mis lágrimas.
-No no no- sentí sus manos calidas en mis muñecas, estás apartaron mis manos de mi rostro. Vi sus ojos y su sonrisa -Eres hermoso Kook- no lo podía creer, la primera persona que me había visto de tan cerca pensaba que era bonito. Esto...debe ser un sueño...
-Es mi turno- su dedo pulgar acarició y limpió mi lágrima que salió de mis ojos cristalinos -Daegu no es sólo una chica...ella es...mi prima-
