Lo Que Imagino Contigo

Flores Cuerdas

Miraba una mosca merodear en el piso cuando mamá tocó la puerta con el pote blanco en la mano. Negué con la cabeza. No había visto nada. Nada en una semana entera. Y ese era el problema.

Los seres humanos se adaptan, es su naturaleza. Y yo me adapté a mi demencia. Me adapté a verte en lugares en donde no estabas. Me adapté a escucharte aunque no hablaras. Me adapté a las pesadillas, a las fantasias, a las visiones. Y me adapté solo porque te vería a ti.

Si me caería al río, tu estarías ahí conmigo. Si las paredes se encogían, tu me cubrías. Si las sombras me asustaban, tu las espantabas.

Miraba una mancha de pintauñas, de un naraja tan fuerte que parecía rojo. Me gustó porque esos dos son tus colores favoritos y los atrapé los dos en uno. Los tenía en las uñas ya largas, hacía tiempo que no las mordía, ----un hábito que siempre he tenido, hasta antes de enloquecer.

Mamá dijo que era para sentirme mejor pero no era cierto. Eso solo me daban ganas de dormir aunque no tuviera sueño. No te podía ver, ¿que de interesante tiene el mundo sin ti?

Tenía ya cinco retratos tuyos. Cada vez me volvía mejor pintando. Era lo que me mantenía concentrada en estos momentos. Se suponía que hoy venías, y por eso mamá quiso darme las capsulitas una hora antes.

No las necesito. Ya me has visto antes. Me has visto peor. Ahora solo lloro en silencio, siento como el alma se me rompe y no puedo gritar. No puedo decirlo. Odio las miradas de todos. Como si me fuera a quebrar en cualquier momento.

Si tan solo te viera de nuevo, ya estaría brincando en la cama, sonriéndole al espejo, abrazando mi televisor.

No me las tomé. Solo bebí agua y las escupí cuando Mamá Alina cerró la puerta. Las escondí en una caja color vino antigua que hay en mi mesa de noche. Por si en la noche las necesito de verdad. Puse la botella al lado, solo le quedaban dos sorbos.

Llegaste en media hora. Habías prometido llevarme y cuidarme, se lo dijiste a mamá por teléfono. Ella estaba tán preocupada pero al fin del día tu eras todo lo que necesitaba.

Te recibí con una media sonrisa. Todavía sentía la cabeza en el aire. No tuve más remedio que volver al cuarto y tomarme las pastillas.

Lo hice por ti. Para que hablaras con una Lisitea decente. Para que vieras a la Lisitea cuerda que conociste.

Pantalón negro y camisa naranja, tu todo de negro. Ambos con el color favorito del otro. El pelo parecía haber crecido, ya te llegaba a los hombros. Me emocioné al verlo y corrí a tocarlo.

----¿Te gusta?---- Alzaste una ceja.

----Me encanta.---- Sonreí.

Sonreíste también y nos fuimos. Sabía que mamá estaría preocupada, "con los nervios nerviosos". Pero le prometimos que estaría bien.

Fuimos a un parque. Jamás había venido a este parque. Habían muchos arbolitos llenos de flores en las esquinas y nos sentamos allí.

Fué la primera conversación normal que he tenido en meses. No se si eran las pastillas o eras tu. O tal vez yo. Tal vez seguía loca porque quería. Tal vez yo misma me podría curar. Y sabes, lo intentaría si eso significa que estarás conmigo.

Pero por ahora me quedaré aquí, bajo este arbolito, enrredada en tus brazos y sintiendo tu aliento en mi oreja. Me quedaré aquí tocando tu pelo, acariciando tu piel y hablándote así bien de cerca.

----Ahora quisiera preguntarte yo,---- Dijiste. ----¿Qué sientes cuando me ves?----

Solté una leve risa. ----Llevo una semana que no te veo.----

Alzaste las cejas asombrado. Y me decidí. Lo intentaría.
----¿Encerio?----

----Si.---- Pensé. ----¿Me quieres más loca o cuerda?----

----¿Qué?---- Te reíste. Pero fue una risa bonita. Moviste la cabeza, sonriendo.

----Ed,---- Te miré más seria y entendiste. ----¿Tu me quieres?----

Me miraste fijo; miraste mis ojos, mi boca, mi cuello, mis manos. Y luego sonreíste. Una sonrisa tan sincera que me derritió el alma. Repito, con esta forma de mirar se enamora cualquiera.

----Te quiero.---- Asentiste. Como si fuera algo que nunca habías considerado. Como si lo hubieras acabado de descubrir. ----Te quiero mucho, Lisi. Ahora no sé cuál de las dos te quiero más pero..... tú necesitas mejorarte. Y eso significa estar, "cuerda". No quiere decir que te quiera menos si te pones loca, pero pues.... por tu bien, necesitas recuperarte...----

----Necesito sanar....---- Repetí.

----Exacto. Sanar.---- Tomaste mi cara con tu mano para que te viera a la cara. ----Te quiero.----

----Yo más.---- Sonreí y te guiñé el ojo.

Me pusiste una flor tras la oreja y me sonreíste. ----Lo sé.----