Él era Sherwin, un chico muy extrovertido y con una buena cantidad de amigos en la escuela Newgate... Su vida social era como de cualquier adolescente. Pero, solo bastó un día para que todo esto cambie.
Este chico pelirrojo tuvo que pasar por algo...
—Entonces, ¿Vienes de Jersey City? Debes despertarte temprano para llegar aquí supongo.
Bien esto será fácil, comencé a estudiar en una buena preparatoria porque me ofrecieron media beca, la cual yo acepté, mi madre me dijo mucho antes que tal vez en un futuro me aburriría de estudiar todo el día, pero no, no fue así.
—Sí, queda lejos pero tomando el tren llego un poco más rápido.
Estaba con una compañera de clase, Kate y yo habíamos entrado a un restaurante que estaba cerca a la preparatoria, ya que teníamos una asesoría de deportes y la verdad es que no sabíamos dónde diablos comer pero a las finales ella decidió venir aquí.
—¿Qué vas a jugar tú?
—Fútbol, creo, o no lo sé, tal vez baloncesto ¿Y tú?
—Quisiera jugar baloncesto, pero se van a burlar de mí y... No lo sé.
—¿Qué? ¿Por qué?
—Es que... ya sabes soy baja y...
—No, no lo eres —reí
—Claro que lo soy, hasta te estás riendo, Javier.
—No, no, no, es solo que me recuerdas a mí, ¡En serio! Había un tipo que siempre me molestaba por eso, pero he crecido, ¿sabes? Sí no hubiese sido por su estúpidas palabras que decía todos los días no me hubiese obligado a hacer ejercicio, bueno al menos yo crecí con eso.
—¡Wow! parece que te motivó demasiado.
—Claro, si a eso se le puede llamar motivar.
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—¡Ya llegué mamá!
Realmente había llegado exhausto, me sentía como si hubiese intentado cargar un barco, y lo peor de todo es que en uno de los ejercicios que nos habían mandado, me caí, la terrible herida que tenía en la rodilla lo dice todo.
—¿Ya comiste o quieres que te sirva algo?
—Sí, ya comí no te preocupes... ¿Y papá?
—Fue a dejar el auto para mantenimien... ¡Oh, por Dios! ¿Donde te caíste, hijo?
—¿Qué? Esto... Pues no es nada.
Y como no tuve escapatoria dejé que mi madre me vende la rodilla mientras que me hablaba de mis caídas pasadas, que por cierto eran peores. Subí a mi habitación, me tiré a la cama, ya era un poco tarde y me estaba dando sueño así que agarré mi celular y empecé a buscar algo por YouTube.