Sol.

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FELIX

Narrador: omnisciente

-¡Felix! -gritó la extranjera cuando su novio se tiró a la pileta de un salto "bombita" provocando que la mojara.

Era un hermoso día de verano. Mucho calor y un sol excelente para poder tomarlo y lucir un poquito más morena para el vestido que se pondría en la siguiente gala de entrega de premios. Si es que estos chicos podrían dejarla estar tranquila por lo menos media hora.

-Vamos, _______ -dijo el chico con una sonrisa- Está lindo aquí en la piscina. Ven adentro.

-Ya hablamos de esto. Quiero tomar un poco de sol antes de los premios.

La chica volvió a su posición anterior, con sus ojos cerrados al sol intentando llegar a la calma.

Estaba hace unos 10 minutos allí. Y hace 11 le había dicho a todos los intengrantes de Stray Kids, incluyendo a su novio, que iría a la piscina del hotel un rato para refresgarse y sentarse por alli leyendo un buen libro. En simples palabras, para encontrar calma lejos de aquellos niños.

  Felix entendió perfectamente a su novia, debajo de todo ese sermón estaba un: "no vengan a molestarme", la conocía muy bien. Pero no pudo negarse (controlarse mejor dicho) a verla en bikini. No era la primera vez, pero jamás desperdiciaría mirarla en uno de ellos.

-¿Puedo arrojarte agua? -preguntó con picardía.

Estaba muy hermosa en ese bikini rojo con detalles negros. Santo quien sea. Era mejor vista de todas. De igual manera, quería molestarla como siempre.

-Intentalo y juro ahogarte -contestó sin abrir sus ojos. Solo pedía media hora en paz.

-Aún no entiendo -comenzó el muchacho, sentandose en el borde de la pileta- Nosotros hacemos lo que sea para estar más blancos, y tú podrías pasar horas en el sol para "broncearte" -hizo comillas con sus dedos, por más que ella no pudiera verlas.

-Son culturas y pensamientos diferentes -restó importancia a sus palabras, dejando de lado la pequeña crisis existencial que le estaba dando al de cabellos ahora oscuros.

-Entiendo todo eso, si -apretó su short para el agua, sacando un poco de esta- De igual manera, ¿para qué quieres broncearte?

_______ abrió sus ojos y se sentó en la silla para tomar sol, mirando al chico de muy mala gana. Le explicó como 20 veces ya la misma razón.

Suspiró- ¿Recuerdas el vestido gris de brillos?

Felix asintió intentando buscar en sus recuerdos ese vestido. Ya lo había olvidado, pero era mejor decir que sí para que ella no intente matarlo al agotarle la paciencia.

-Bien, pues no quiero estar blanca como un papel al usarlo. Queda mucho más bonito con un buen bronceado.

-Tu eres bonita, no necesitas nada para lucirte.

Si no fuera por la razón de que ya estaba algo roja debido al tiempo que llevaba ahí seguro se notaría el color en sus mejillas debido al sonrojo que llevaba consigo por ese comentario.

-Gracias -dijo- Ahora dame media hora y juro meterme junto a tí.

Volvió, otra vez, a la posición anterior, dejando al muchacho en los bordes de la pileta no sabiendo si volver a tirarse dentro, irse a la habitación con los chicos o continuar haciendo enfadar a su chica. Puede que la tercera opción le guste más.

Ella ya había entrado en calma. En los parlantes que había en el lugar sonaba
"Dally" de Hyolyn, haciendole sentir que estaba dentro del video, en su mente, claro, porque sino queda como una loca.

Sintió unos brazos en la parte de sus rodillas, y otro intentando meterse en la parte de la cintura por su espalda, levantandola.

-¡Felix! -gritó asustada- ¡Felix bajame!

Este comenzó a reir como un loco mientras se acercaba al agua, con su novia pataleando y gritando como si no hubiera un mañana.

-¡Bajame o te juro que...

No pudo decir más nada, ya era demasiado tarde, Felix ya la había tirado al agua junto con él

-¿¡Qué mierda te pasa!? -dijo al salir, el triple de enojada que antes, golpeando a su novio en el hombro- ¿Estás loco?

-Un chico de por allí te estaba mirando, no podía permitir eso -rió ante los tiernos golpes de la muchacha que estaba a punto de revertar de enojo.

-¡No hay nadie más aquí!

-Ups -contestó levantando sus hombros un una sonrisa picara.

_______ intentó salir por el borde de la pileta, cayendose debido a que todo el suelo estaba mojado y resbaloso. Maldeció unas cuantas veces en todos los idiomas que sabía.

-Ya estás dentro -dijo abrazandola por los hombros ya que se encontraba de  espladas- Quedate un rato.

-Si me quedo te juro que Stray Kids serán solo 8 a partir de hoy.

-No seas amargada.

-Suéltame.

-No te estoy agarrando tan fuerte, puedes soltarte sola.

Ese era un truco que _______ conocía bastante bien, el de jugar el papel de hacerse el inocente. El problema es que siempre ganaba con ese, nunca podía negarse y sentirse culpable ante lo que sea (incluso cuando pueda que no sea su culpa, como en este caso) con el australiano.

-Bien -contestó dandose la vuelta- pero cuando salga te mataré.

-Tengo tiempo.

El morocho tomó su cintura, pegandola a su cuerpo mientras ella colocaba sus brazos detrás del cuello de este.

-Lo siento.

-Ahora ya está, puedo tomar sol otro día -dijo sobre sus labios, muy cerca de un beso.

-¿En bikini otra vez? -comentó pícaro- Me gusta la idea.

-Lo sé -admitió para luego besarlo ya de una vez.

-¡Alto ahí ilegales! -dijo apareciendo Chan junto a Changbin y Hyunjin, señalandolos con el dedo.

-Ya tengo 18/19 años -reclamó Felix cuando se separó de los labios de su chica, quien reía levememte por el comentario.

-Pero ella no.

Stray Kids [ One Shots ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora