Stray Kids [ One Shots ]

Puente.

SEUNGMIN.

Narrador: omnisciente.

Porque la noche es oscura, y todo el mundo la toma como si fuera mala. Porque el día es claro se toma como sinónimo de felicidad. Porque si llueve no sale el sol, y eso es triste.

Déjenmen decirles, ni la noche es triste, ni un día soleado es bueno y feliz.

Por lo menos, para uno de los menores de la banda, un día lleno de luz y rodeado de amigos no significaba un buen día. No del todo.

Y ahí estaba otra vez. En aquel punte en el medio de la calle, donde podías pasar de una cera a la otra, ver los autos pasar desde lo alto y sentirte libre. Una vez.

¿Por qué su mente daba tantas vueltas en algo tan simple?

El viento frío que se sentía, la ciudad rodeada de silencio, y aquel vacio sin llenar que tenía no resultaba de mucha ayuda. Un conjunto de cosas que llevaban, a cualquier otra persona, a un desastre.

Al menos, podía tener un momento a solas consigo mismo. Solo un momento.

Cerró sus ojos, dejando que la brisa choque con su rostro y moviera sus cabellos. No tenía que apurarse para nada, no hoy. Iba a disfrutar este tiempo.

Sintió algo en su lado derecho, como una presencia.

Miró al lugar, encontrándose con una chica de coleta alta y luciendo jeans junto a una campera gris simple. Ella observaba la nada, al igual que él.

Él la ignoró. No era dueño de este puente. Cualquiera podía venir y hacer lo que quisiese. Incluso colocarse en la parte de la baranda que prefería, por más que tuviese todo el lugar del mundo y justo se coloca a uno metro de distancia de él. No iba a dar ordenes a nadie, menos en un lugar público.

A la muchacha, al principio, le pareció extraño que su contrario no diera gesto alguno, más bien que quedara estático en su lugar. Le resultó extraño porque, básicamente, venía a asegurarse que el chico no estaba por cometer alguna locura aquí arriba.

A los ojos de ella, el chico de perfil bonito tenía mucho en mente como para fijarse en su presencia. Se dió cuenta de ese detalle.

-Son las 2 de la mañana -dijo ella para captar la atención del muchacho. No sabía cómo comenzar una conversación con él. ¿Cómo comienzas a hablar con un extraño? -¿No es muy tarde para que estés solo aquí?

Seungmin miró a la chica. No comprendía la razón por la cuál hablaba con él.

Menos comprendía la pregunta de la muchacha. Después de todo, ella también está aquí sola y en el mismo horario.

-No en realidad -respondió sin ganas, volviendo su vista a la carretera.

-Comprendo -dijo ella.

Iba a iniciar una historia, donde ella era la protagonista y le confesaba al castaño todas las veces cuando venía sola aquí a lo mismo que él. Cuando venía a pensar en su vida, en lo cual vagamente importante era y lo insignificante que era para los demás. Los largos ratos que pasaba aquí.

Tenía ganas de contarle al chico, cual no sabía su nombre, su historia para evitar algo que ella pudo también. Que ella pudo evitarse.

Pero se contuvo. Ella no es nadie para hacerlo.

Seungmin se dió cuenta de la intranquilidad de la chica a su lado, que parecía querer decir algo, pero nada salió de su boca.

Tomó más importancia a la presencia a su lado. Porque por una razón cual no sabía, ella se había quedado allí en vez de seguir con su camino hacia otra parte, dejándolo solo.

Sus miradas se cruzaron sin decir palabra. Ninguno sabía dónde ni cómo comenzar.

- ________ -dijo ella, extendiendo su mano hacia el muchacho.

-Seungmin -contestó él, tomando su mano.

Fue como eléctrico el roce de su piel, el de sus manos juntas. Fue extraño y a la vez dulce.

Las manos de la chica estaban heladas, y las del muchacho cálidas.

Si fuera un cuento de hadas, podríamos hablar de complementarse. De que justamente el estado de sus manos era para acompañar al otro.

Pero volvamos a la realidad. Dos extraños dandose la mano en el medio de la noche sobre un puente. Eso es muy peculiar.

-¿Tú que haces aquí a estas horas de la noche? -preguntó Seungmin cuando soltaron sus manos.

-Solo pasaba y te ví aquí -ella guardó sus manos en sus bolsillos- ¿Puedo preguntar lo mismo?

-Mejor no.

-¿Entonces puedo acompañarte aquí arriba por un rato?

-Eso si. -Seungmin sonrió de manera original. Sin tener que mentir.

¿Ahora comprenden lo que hablo? Las noches no son del todo tristes. Del todo solitarias.

Fíjate quién está contigo en el día y quién en la noche.

Cada uno pude comprender lo que quiera de esa frase. Y ellos tomaron eso muy en cuenta también.

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El shot habla por sí mismo. Seguro van a comprenderlo.

Subieré el de Jeongin ahora mismo. Vamos a tomarlo como un regalo por ser lunes.

~DEVON.