Errores del pasado

Capítulo 9

Jean no soportaba más y comenzó a buscar a Mikasa más de lo normal. Trataba de pasar el mayor tiempo posible con ella, siendo que a ella no le molestaba pero le preocupaba un poco que eso le causara problemas con Eren. El ojiverde notaba los acercamientos del cara de caballo pero tenía en mente lo que le había dicho a su chica, que no le iba a prohibir hablar con él ni con nadie. Guardaba toda esa rabia y la desahogaba en las noches que llegaba a pasar con La azabache.
Hasta que un día Jean se acercó a Mikasa cuando se encontraba con Eren.

-Hola Mikasa!. -le habló efusivamente, ignorando al ojiverde.
-Hola Jean.
-Mikasa hoy tengo mi ronda nocturna. ¿Vamos? -Se notaba el nerviosismo en la azabache-
-Que crees qué haces idiota?Estoy con ella por si no lo habías notado. -exclamó Eren-.
-Estoy hablando con ella... Y bien ¿que dices?. He visto que ya no has cabalgado por eso decidí invitarte.
-Jean yo...
-No irá idiota!
-¿Y tú quien eres para decidir por ella?
-Su novio, creo que ya lo sabias, pero por si no lo habías notado -tomó la cara de la pelinegra dándole un beso bastante rudo haciendo que ella se separara bruscamente.-
-¡No soy un juguete Eren, tú no decides por mí! -alejándose a veloces zancadas.
-¡Mikasa espera!... ¡Ves lo que hiciste idiota! No te vuelvas a meter con nosotros, ¿me entendiste?... yendo tras Mikasa pero no pudo encontrarla.

Jean sonreía, pues era una victoria para él pero eso no le bastaba.
Llegó la noche y al llegar a la caballería Se encontró con Mikasa, una sonrisa de oreja a oreja se plasmó en su rostro ya que a parte de lograr una discusión entre elllos, ella había preferido ir con él.

-Mi...Mikasa no te esperaba.
-Lo siento, entonces me voy.
-No, no! -tomando su mano para evitar que se fuera- lo digo por lo qué pasó por la tarde. Por cierto siento haberte metido en problemas, no creí que Eren reaccionara de esa manera. -Mikasa solo agachó la mirada-.
-Yo tampoco creí que fuera a actuar así, pero no tienes por qué disculparte yo sé que tu intención era buena.
-Si, yo sé cuánto te gusta cabalgar y creí que era una buena oportunidad, tal ves debí decírtelo en otro momento. -haciendo una mueca de arrepentimiento-.
-Él dijo que no me prohibiría nada, pero creo que solo fueron simples palabras. -frunciéndo el ceño-.
-¿Te parece si comenzamos? Ya no hay que pensar en eso y mejor disfrutemos del paseo.
-Si.

Hicieron su ronda plácidamente y cada quién regresó a su habitación.
Mikasa ingresó y vio una silueta en su cama.

-¿Estabas con él?
-¿Ya se te hizo costumbre meterte sin permiso a mi habitación?
-Contéstame Mikasa -con una voz gruesa.
-Dijiste que no me prohibirías hablar con él, pero ya vi que no tienes palabra.
-Entonces si preferiste a ese estupido.
-No es preferir, es que yo puedo hacer lo quiera. Me conoces Eren y sabes que ir a cabalgar o hablar con Jean no significa nada. Él es mi amigo y deberías empezar a respetar eso.
-¿No te has dado cuenta que lo hace a propósito?
-¿Hacer que?
-Mikasa ese imbecil cara de caballo siempre se está metiendo entre nosotros. Solo quiere traernos problemas, date cuenta.
-Tú quieres que me aleje de él, es lo único que dicen tus palabras.
-Si! Quisiera que te alejaras de ese idiota de mierda. Yo sé que quiere alejarte de mí.
-Pues no lo haré Eren... Siempre he estado a tu merced, esperándote y haciendo lo que te plazca... pero ya no Eren. Él solo ha hecho lo que tú no has podido... -El ojiverde la miro con desconcierto-.
-Y que te ha dado ese inútil?
-Su lealtad... Tú solo piensas en tí y creo que eso ya me está cansando. Ahora por favor vete.
-Mikasa...
-Véte Eren.

La azabache no le dirigía la palabra después de esa noche y Eren en respuesta a su actuar tampoco se acercaba. De pronto el  visualiza a Jean para aproximarse a grandes pasos hacia él, sus ojos se encendieron de furia, estaba decidido a acabar con su entrometimiento. Jean lo miro y se afianzó esperando su encuentro...