King of Gods |TRADUCCIÓN|

Capítulo 18

Disclaimer: Esta es la traducción del fic con el mismo nombre, cuya trama, ideas y desarrollo pertenece a Mrs Scorpius Malfoy, quien muy amablemente me ha permitido compartir. Los personajes mencionados pertenecen a Masashi Kishimoto, y en esta historia se presentan sin ningún fin de lucro. Cabe decir, que está prohibido re-suban esta traducción/trabajo de la autora ya mencionada. Yo, Aricat, no tomo el crédito de esta hermosa historia.

NT: Porque @luutulip  me lo pidió, y porque justo lo había terminado de editar... como lectora comprendo las ansias por querer saber cómo continua.

En algún lugar

Sasuke abre sus ojos y sus pies están fijos en un piso de bambú y un pasillo.

El sol poniente crea tonos naranjas y púrpuras sobre el mismo camino que él recuerda de su infancia. Se siente cálido en su piel, un recordatorio de las puestas de sol de verano en Konoha. Los pájaros gorjean al fondo, las plantas en el patio trasero de su madre están en plena floración de verde y rojo. Sasuke una vez pensó que olvidaría por siempre esta sensación, este recordatorio de tiempos más simples en su mente.

No lleva zapatos, pero las pantuflas que eran tan comunes en su casa antes de la masacre se adaptaban perfectamente a sus pies. Quiere sentirse confundido y en pánico debido a esta extraña situación. Sin embargo, esos sentimientos nunca lo alcanzan, y es casi como si supiera a dónde ir y qué esperar.

Y así empieza a caminar. Da pasos lentos, el leve golpe de sus pies tocando el suelo es el único sonido que registra aparte de los pájaros que cantan. Sasuke mira sus manos y las encuentra en perfectas condiciones y reales. Prueba los dedos en su mano izquierda y descubre que son los mismos que tenía antes de su batalla final con Naruto. Se siente más liviano sin todo su equipo ninja, sólo vestido con la ropa de su casa. Sasuke no lo comprueba, pero está bastante seguro de que el abanico Uchiha está bordado con orgullo en la parte de atrás de su camisa.

El pasillo parece familiar. Por supuesto que sí, ya que esta es su casa de la infancia. Es curioso cómo todo lo que se elimina en la vida real aparece en este momento sin un solo rastro del sufrimiento que su clan experimentó mientras existió. Mientras baja, Sasuke sabe que su propia habitación está en la dirección opuesta, así como la habitación donde Itachi mató a sus padres. Él camina hacia la cocina y la sala familiar de todos modos, no queriendo revivir el mismo escenario después de pasar tantos años buscando un cierre.

De alguna manera, Sasuke sabe a dónde ir. Y cuando abre la puerta corredera que lo lleva a la sala de estar, su cuerpo enmascara la sorpresa y el dolor que lo conquistó desde dentro. Este pecho se aprieta, sus extremidades se congelan.

—Sasuke —dice ella con la misma dulce voz que él recuerda tan bien. El cabello negro azabache de su madre es igual al que Sasuke recuerda, muy parecido al suyo. Su cara carece de las arrugas que vienen con la edad, sus ojos de ónix le devuelven la mirada con la misma expresión de ternura con la que él los asocia.

Su corazón duele cuando recuerda lo mucho que se parece a su madre, mientras que Itachi se parece a su padre. Sus ojos los ven. Ahí están: madre, padre e Itachi. Su familia lo mira desde la misma mesa donde solían compartir las comidas. Su madre se sienta al lado del padre, e Itachi se sienta en el lado opuesto, al lado de un lugar vacío que está reservado exclusivamente para Sasuke. Su hermano mayor lo mira con orgullo y nostalgia, dolor y alegría. Las líneas que bajan de los ojos de Itachi no se han extendido más, su rostro se ha congelado en el tiempo.

Sasuke da pequeños pasos hacia su familia, pero su madre se levanta de su asiento a toda prisa para envolver sus brazos alrededor de él. Mikoto no era cariñosa en comparación con las madres de sus compañeros, ella siempre guardaba sus abrazos y besos para ocasiones especiales. Se siente muy real, pero demasiado perfecto para ser verdad, porque madre le dio este tipo de abrazo cuando llegó a casa con demasiados moretones en su cuerpo para contener su dolor. Él abraza a su madre, notando lo pequeña que se siente en sus brazos a diferencia de cuando era un niño pequeño. Ella es casi una cabeza más baja que él, pero todavía tiene la misma cantidad de fuerza que recuerda tan bien. Sus hombros tiemblan bajo su abrazo, y Sasuke sabe que su madre está llorando por él.