Capitulo Veintiséis

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Sé que soy un poco dura, pero me molestaba que cuando estoy con Norman mucha gente viene a sacarnos fotos, es que tienes que estar sonriendo a cada rato, y yo no estoy para darle mis sonrisas a la gente.

Entre unas horas saldría la revista en la cual participe, estaba ansiosa, nerviosa y muchas otras cosas.

También tenía miedo de como reaccionaria Norman, no estaba lista para nada.

Hoy había cobrado el sueldo de las fotos, le compré ropa a mí hija y a mí también, era suficiente para todo el mes o varios meses.

Soy de ahorrar mucho aún que quisiera gastar todo el dinero en cosas sin sentido.

El trabajo que tenia, lo deje, me habían remplazado por esta semana, pero al mes siguiente volvería.

Mañana iría a buscar a mí amiga Ayla para que vayamos a comer juntas, junto a su sobrina y a mí hija.

Quiero gritar no puedo con los nervios.

El timbre indico a que algo me esperaba afuera, tal vez sea el correo, me levanté rápidamente, pero mí sonrisa se desvaneció al ver a aquél tipo que arruinó mi vida.

Estaba bastante arruinado, su cabello era de castaño oscuro, y antes lo tenía negro, su barba la dejo crecer, sus ojos nunca tuvieron esa alegría, siempre iban apagados, tenía un poco arrugada la cara, pero jamás perdió esa mirada de maldad que tenía.

Tenía ganas de llorar, quería llorar y gritar quería que me lo saquen de mí vista.

—Hola ________ ¿me recuerdas pequeña?— relamio sus labios, y ya con verlo me dio asco.

Tal vez me salve por qué Norman vendrá a traer a mí hija de su casa, ella se quedó allí para jugar con Mingus y demás.

—Lamentablemente si me acuerdo— susurre con despreció.

—.¿No te alegra verme? Cuando te vi en aquella revista, me quedé conmovió, me alegra saber que me acosté con una niña que hoy en día es una mujer muy bonita— le di una bofetada

—¿Como te atreves a decirme eso? Arruinaste mí vida, imbécil— elevé la voz, quería generar caos, quería que alguien venga y me lo quité de encima.

—¿Y cómo anda mí hija?— se acercó mas que me aleje, quedando los dos adentro de mí casa pero con la puerta abierta.

—Ella no es tú hija, la tuve con otro hombre— mentí

—¿Te crees que soy estúpido?— me toma de los hombros y sacude mí cuerpo.

Tengo que ser fuerte, dije que sería fuerte.

—Vete— murmuré— porfavor

—Me voy, pero si me das un beso— río y trato de besarme pero lo esquive.

—¿Mamá?— aquella voz sonó en la habitación.

El tipo que tenia en frente se volteó a ver quien era esa voz.
No vi a Norman, solo vi a Lenny con cara de pocos amigos.

—Es igualita a mi— ríe John, el tipo que quito de mi inocencia.

—¿Quien es el?— pregunta Lenny

—Soy...— pero alguien con ronca voz interrumpio

—Un idiota— Norman se acerca a la puerta y me queda mirando.

Sonreí a verlo, okey esto parece típico de unos cuentos de hadas que el príncipe rescata a la princesa del malvado dragón etcétera​.

—Vete antes de que te meta a la cárcel— contesta Norman de mala manera

¿Me estaba defendiendo? Me la creo, pero no quería que nada de esto termine mal, no toleraría que Norman se meta en esto.

—Me iré, por qué ya se quien eres, pero esto no se queda asi— choco hombro con Norman y este le esquivó, se fue.

Al fin se fue, pero no por mucho.

—Gracias— susurre caminando hacia el, para besarlo pero me detuvo.

—De nada— contesto algo enojado.

—¿Estas enojado conmigo?— pregunte algo confundida

—No lo se, solo estoy enojado por la revista y ahora por esto, y lo de ayer— contesto sin ánimos

Me eh metido en un serio problema, está ofendido, y sorprendido, lo entiendo, yo solo estoy sorprendida.

—Lo siento por lo de ayer, dije las cosas sin pensar, pero odio salir y ya tener miles de cámaras— explique— aun que haya subido esas fotos, pero sabes que me gusta la privacidad entre ambos, espero que me perdones— baje la mirada al no tener respuesta.

—Te perdono, por qué tu no tienes la culpa de nada— suspiro e hizo que lo mire— Y ese tipo no te hará nada, te lo prometo, saldremos de estos problemas.

Al decir todo eso lleve mis manos a su nuca y enrede mis dedos en su cabello, lo lleve hacia a mí y el se agachó para quedar a mí altura y juntamos nuestros labios para formar un tierno y dulce beso necesitado de amor.

—Eh.. Mamá estoy aqui— la voz de mí hija hizo que nos separemos— ¿Que alguien me explique qué está pasando?— levantó la voz.

Me había olvidado de ella, igual me causó, ya que con Norman soltamos unas risas al no darnos cuenta de la patética escena que hacíamos en frente de mí hija.

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No estoy muerta 😂

Hola volví!

Lo siento por no actualizar hace un mes, es que la escuela me tiene apretada, y tengo más cosas, pero no abandone la novela.

Solo quería avisarles que prometo subir más capítulos, trataré de seguirlos, y bueno, espero que les guste el capítulo dejen su estrellita y su comentario si les gusta, me ayudan mucho y saludos!❤❤❤

La Fama No Importa (Norman Reedus y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora