Hye Sun entró al auto del policía. El corazón se le partiría en cualquier momento. Sentía que apenas podía respirar bien. Todo le dolía, incluso le costaba pestañear sin derramar algunas lágrimas. Todo esto le dolía en el fondo de su alma. El hecho de irse, abandonar ese departamento en el que ella y Jungkook...habían hecho el amor, en el que había sentido más que un simple afecto de parte de él.¿Había sido verdad?...¿O solo se lo había imaginado?
—Vas a estar mejor con nosotros—le dijo uno de los policías. Acomodó el retrovisor, mientras Hye Sun se acomodaba en la parte trasera. El policía encendió el motor.
—Llevala al aeropuerto y vigílala hasta que el avión haya partido ¿Entendido? Nos quedaremos aquí hasta hallar pistas de ese idiota.
—Entendido.
A Hye Sun se le encogió el corazón.
«Jungkok...»
Oh, no. Joder, deseaba al menos despedirse de él.
El auto arrancó. Hye Sun movió la cabeza, con una pequeña esperanza en el corazón de encontrarlo en alguna parte, mirándola desde algún lugar, o quizá tan solo verle por un segundo por última vez. Pero el auto avanzó, ella con el ahí adentro, y no lo veía...y no lo vería nunca más....
* * *
Jin cogió el celular. Marco el número de Jungkook, este contestó
—Ella está en el auto—le dijo Jin. A Jungkook se le aceleró el pulso—. Me vas a tener que pagar algo muy grande cuando acabe todo esto.
—Si todo sale bien, te prometo que si.
Jin colgó. Dobló la esquina, y siguió el auto del policía, aquel que llevaba a Hye Sun ahí adentro. Lo siguió sigilosamente, esperando el momento exacto. Fue entonces cuando en un momento de la carretera, solo se encontraron los dos autos. El suyo y el de ese jodido policía. Jin sonrió.
«Te tengo»
Pensó y chocó la parte trasera del auto policial.
* * *
El cuerpo de Hye Sun se balanceó. De inmediato se volteó a mirar hacia atrás.
—¡Joder!—gritó el policía, observando por el retrovisor. Detuvo el auto y bajo de él—¿Pero que demonios me sucede?—gritó alterado. Hye Sun solo miraba desde adentro.
Jin también bajo del auto y al oficial solo le faltó pestañear para observar el arma que traía en las manos.
—Saque a la chica del auto.
—¿Que?...pero...—tartamudeó.
—¡Que la saqué si no quiere que le vuele los huevos!—gritó Jin.
Y entonces Hye Sun lo reconoció. Si, claro que sí...lo había visto antes, el amigo de...¡Jungkook!, bajo del auto de inmediato. Con una esperanza. Queria verlo, por última vez...quería sentir sus labios sobre los suyos al menos por un instante. Jin volvió a coger su celular con la otra mano, sin dejar de apuntar al policía. Marco un número y se lo enseño a Hye Sun.
—Él tiene algo que decirte—Hye Sun cogió el teléfono, colocándose instintivamente detrás de Jin—Sube al auto—le volvió a indicar él. Hye Sun obedeció. Una vez adentro pudo hablar con aquella persona que esperaba su voz en el teléfono.
—¿Hye Sun?—ella se estremeció. Las ganas de llorar le volvieron. Pero se resistió—¿Eres tú?
—¿Dónde estás?—le preguntó ella, con un hilo de voz.
—Perdóname.
—¿Por qué?
—Por esto...—Jungkook respiró hondo. Era su última oportunidad con ella. La última. Esta vez no habría otro día, ni otro momento. Era ahora, o la perdería para siempre—Por hacerte pasar por estás cosas...
—Ya no importa—le espondió ella.
—Si importa. Me importa a mí
—No mientas...joder, ya lo se todo.
—No...dime que aún confías en mí—murmuro él. Cuánto deseaba tenerla junto a él en ese momento. Poder abrazarla. Anarla, tanto como podía—Yo...yo no quiero decepcionarte a ti también—Hye Sun guardó silencio, una lágrima brotó de sus ojos—Hye Sun...—murmuró él—Eh cagado todo...ya lo se, se que soy un gran imbécil, y que nunca hago las cosas bien, y que eh cometido millones de errores en mi vida...pero no quiero equivocarme de nuevo—se quedó en silencio por unos segundos—No quiero dejarte ir, mi amor...—Hye Sun abrió un poco más los ojos. Apretó el celular con las manos.“Mi amor”—Te amo, Hye Sun, te amo como nunca eh amado a nadie en el mundo—respiró. Ella no pudo evitar sonreír—Y si no me crees pregúntaselo al cabrón de Jin, jamás eh hecho esto por nadie.
—Quiero que me lo digas en persona—le dijo ella.
Jungkook sonrió.
—Ven aquí conmigo, entonces.
—¿Dónde estás?
—En el aeropuerto, y tengo dos boletos—Hye Sun sonrió de nuevo. Jin subió al auto, después de una bonita conversación con el policía—¿Quieres venir conmigo?—preguntó Jungkook.
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Secuestrada |Jungkook|+18
FanfictionCuando Jeon Jungkook, uno de los criminales más buscados en Corea es convocado para el secuestro de cinco millonarias, no duda ni un segundo en aceptar la oferta. Lo que no pensó...fue enamorarse de una de ellas »Se dónde estás ahora-le respondió el...