7. Solo una noche

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Para quienes me leen por aquí, vengo a dejarles una súper actualización de 10 capítulos. Espero recordar subirlos al mismo tiempo que en FF, pero realmente a veces no me queda tiempo de subirlo por aquí porque demasiado tengo que volver a editar.

Así que gracias a las personitas que le han dado "Me gusta". Se les quieres chicas.

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Disclaimer 1: todos los personajes pertenecen a la grandiosa mangaka Rumiko Takahashi, yo solo los tomo para poder expresar todo lo que tengo, hacer que sufren y de paso cumplir mis perversidades.

Disclaimer 2: NO PRESTO mi fics, no hago continuaciones de lo que ya terminé, así que, si se terminó, así quedará, no me insistan en ninguna de las cosas porque si no, simplemente ignoraré los comentarios y/o peticiones.

Nota: Digan NO al plagio, es cierto que nosotros los fickers tomamos los personajes famosos, pero las historias son originales, así que cuando vean una de mis historias (o de cualquier otro ficker) tomadas por alguien más, por favor avisen y reclamen, porque no es justo.

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Capítulo 7

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Solo una noche
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Después de darme una ducha, me coloco una de las batas del hotel y regreso a la habitación sentándome en una de las 3 camas individuales.

Nos han dicho que una convención de médicos ha abarrotado las habitaciones sencillas, y las dobles una boda, por lo que no nos queda de otra que optar por una triple. No es un hotel de lujo, creo que ni siquiera debe de contar con 1 estrella, pero es uno acogedor de 5 pisos, bastante limpio y agradable, pero sobre todo a menos de 10 minutos del hospital.

—Ya hablé con Muso, él pasará por tu casa temprano para traernos ropa limpia —al momento en que me siento en la cama que está en dirección a la puerta, lo veo a él sentado en la cama que está pegada a la ventana, dejando la otra sin utilizar en medio de nosotros.

—Gracias —quiero decirle algo más, pero al verlo desnudo solo con su bata del hotel igual a la que yo porto, mi corazón empieza a latir con fuerza.

Nuestra ropa la hemos entregado a la lavandería del hotel, la cual, por un precio «especial», ya que es fuera de la hora de servicio, nos la entregarán en 2 horas. Me siento en la esquina de mi cama para poderlo ver comenzando a secar mi cabello con una toalla pequeña tratando de ignorar los sentimientos que van a todo galope dentro de mí.

—También hablé con Haku —intento cambiar el tema enseñándole mi celular—, ellos pasarán al hospital a las 6.30 antes de irse al colegio —cuando termino de decir aquello, mis pensamientos cambian por completo.

Un vacío me llena, ¿y si este fue el último día que vi a mi pequeña? Veo en mi celular una fotografía de ella corriendo tras una mariposa, en la foto tenía 3 años, llevaba un vestido rosa que le había confeccionado especialmente para ella, el cual le había gustado tanto que no se lo quería quitar ni para dormir, así que cuando caía exhausta a escondidas se lo quitaba para lavarlo para que a la mañana siguiente lo encontrara limpio, según ella, las hadas lo hacían.

—Todo estará bien Kagome —se me acerca Sesshoumaru para sentarse frente a mí dándome ánimos.

—¿Cómo puedes decirlo? ¿Estás seguro qué ella estará bien? ¿Qué pasará si no resulta bien a operación? Suikotsu ha dicho que el peligro no ha pasado todavía, eso quiere decir que.... que todavía... hay mucho riesgo para ella, ¿cómo puedes saber si ella estará bien? —él niega de un lado a otro quitándome el celular para colocarlo en el tocador y se vuelve a sentar frente a mí tomando mis manos.

El canto de los árboles de SakuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora