Seguir Adelante

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Perdón :(





Pese a los esfuerzos de Heather y Ruffnut para hacer entrar en razón a Astrid, no conseguían que se levantara del frío suelo, ni mucho menos que les prestara atención; la participante de Mema tuvo la intención de dejarla ahí, sin embargo también tenía sus valores morales, así que con una fuerza descomunal se quitó de encima a la berkiana, la tomó de la cintura y se la llevó arrastrando hacia el interior del hotel, mientras que Heather procuraba que ninguna de la dos se lastimara.

Al entrar, las pocas personas que había en el lobbit las miraron con curiosidad, notaron que algunos traían cámaras y conforme más las miraban empezaron los murmullos y señalamientos.

— ¡Go, go, go! (vamos, vamos, vamos) —Apuró Heather sospechando que alguno de ellos podría ser algún reportero que no desaprovecharía una nota escandalosa.

Ruffnut como pudo siguió arrastrando a Astrid, quien cada vez dejaba caer más su peso, totalmente ida de la realidad y con el corazón en pedazos..

—Where is Tuffnut when I need him? (¿Dónde está Tuffnut cuando lo necesito?) —Se quejó la gemela al borde del cansancio.

La berserker al ver que tenía más dificultad para llevarla, la ayudó a cargarla poniendo uno de los brazos de Astrid por encima de su cuello, Ruffnut la imitó una vez que Heather la sostuvo, apoyándose la una a la otra lograron entrar en uno de los ascensores, alejándose de las curiosas miradas de los huéspedes y empleados.

Heather le explicó a Ruffnut (en su idioma) que Astrid estaba en el mismo piso que ella, ya que la había visto salir de la habitación el día anterior con su entrenadora; por supuesto que Ruffnut no entendió nada de lo que decía por lo que se limitó a sólo asentir como si comprendiera, deduciendo por ella misma que el botón que había oprimido la berserker era el del piso de su rubia rival.

Cuando llegaron al piso de su destino, Heather la guio hasta la habitación. Tocó la puerta dos veces, tratando al mismo tiempo que Astrid no se le cayera, esta parecía que se había sumido en un dolor muy profundo y seguía balbuceando cosas poco comprensibles para ellas. Al no recibir respuesta, Ruffnut tocó la puerta con más rudeza, sin embargo, nadie abrió, tampoco podían abrir la puerta puesto que no tenían la llave que era una tarjeta que introducían en una pequeña ranura.

—Hiccup...—hipeó Astrid, dejándose caer más peso sobre las chicas.

Se había desvanecido.

—What do we do? (¿Qué hacemos?) —Preguntó Ruffnut ya no aguantando el peso.

Heather le hizo una seña hacia la izquierda, luego señaló la puerta de la habitación, tratando de explicar sus intenciones con mímica.

—You room? (¿Tu habitación?)

Quedando comprendida la idea ambas encaminaron a Astrid hacia la habitación de la berserker. Lo hicieron a prisa, pues muy apenas en inglés, Heather le explicó a Ruffnut que si su hermano la veía con ambas se podría enojar, así que debían moverse rápido; aunque por otra parte estaba tranquila, Dagur había bebido demasiado como para darse cuenta de quien estaba en la habitación. Una vez en la habitación Heather las guio hacia donde se estaba quedando momentáneamente.

— ¡Wow! —Eso y unas cuantas palabrotas fue el grito de un chico de cabello castaño y ojos azules que se encontraba muy campante acostado en la cama de la berserker, el cual del susto salió disparado de la cama, casi cayendo de esta.

Heather se puso colorada al ver a su novio ahí, con lo de Astrid había olvidado que habían quedado de dormir juntos. Mientras tanto, Ruffnut puso una cara picarona, riendo por sus adentros, sospechando lo que pasaba con aquellos dos.

Cómo entrenar a una patinadora (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora