No sé cuánto tiempo duermo, pero cuando me levanto no recuerdo nada ni de donde soy y mi lengua están rara que la única que puede entenderla soy yo, hago que las cosas que me atan me suelten para poder caminar con libre albedrío.
Veo a seres inferiores a mi caminar cerca de mí, como si nada y yo salgo hasta afuera de ese lugar para mirar el cielo y ver que esta todo oscuro, trato de trasportar me hasta el valle de los dioses, pero mis fuerzas no me dan para hacer ese largo viaje. Caigo rendida en el suelo mirando hasta esas hermosas figuras que están en el cielo.
-Phoenix -sale en un susurro de mis labios y observo como esas personas me observan.
-El paciente recuperó la conciencia, pero no sabemos cómo llegó aquí- veo que dicen y por fin puedo entender su idioma.
- ¿Que me sucedió? (Men bahan de selin) -pregunto al no recordar nada desde que lo mate.
Ellos se miran y me toman en brazos para llevarme de regreso a ese feo lugar, lucho, pero el sueño me gana y termino rindiéndome a este; cuando me levanto encuentro a un hombre que jamás había visto mirarme.
- ¡Aléjate! (abocaban hide) - grito y veo como sonríe desapareciendo en sombras.
Veo como los mortales entran a este lugar y revisan todo, me cuesta aprender su idioma por lo cual señalando su mano y le arrebato un pequeño aparato negro, ellos se rinden de amor por mi persona mientras me enseñan como buscar información; en menos de cinco horas ya me sé la historia completa de todas estas personas y aprendí todos sus idiomas.
- Gracias caballeros, ahora si me disculpan me iré de este lugar- murmuro parándome para crear mi ropa con unas sábanas blancas creando un estupendo vestido con rayas negras hasta llegar al piso.
-Mi adorada diosa, déjame acompañarte- me dice el hombre más viejo.
- No deseo tu ayuda, mundano -susurro un poco enojada.
Camino por todo el lugar para volver a salir, pero en el camino me encuentro con una gran situación hay muchas personas sangrando y sufriendo todo eso me lastima a tal grado que yo tomo pinzas en mis manos para abrirle la camiseta a un señor mayor y comenzar a hacerle presión en su pecho hasta que pudo respirar por vía de unas máquinas. Trato de salir corriendo de ese lugar cuando siento una presión en mi brazo izquierdo me giro para mirar a la persona que provoco eso y casi me caigo de miedo que siento al verlo aquí vivo y sereno.
Lo pateo y trato de huir de él, pero este me abraza a su cuerpo y me susurra en su perfecto sonido.
- ¿Por qué huyes de mí? (lihnag de tenmun gunilin) -susurra cerca de mi oído y yo solo grito para que se aleje de mí.
- Suelta a tu dios, imbécil- le grito y este como que reacciona porque mueve su cabeza de manera violenta.
Son unos efectos que me han quedado de su antigua vida.
- ¿Que me sucedió? -pregunta incómodo y cuando me mira puedo ver mejor sus facciones es igual a como lo recuerdo, bronceado y bien fornido con unos impresionantes ojos grisáceos casi azulados y su impresiónate estatura -eres el paciente que apareció en el rio- murmura recordando algo.
- No soy nadie- susurro tratando de irme de ese lugar y este me toma del brazo haciendo que no hulla.
- Eres esa chica, por la cual no pude dormir en meses -dice llevándome de regreso a la habitación.
-Escúchame bien, sal de mi camino te lo ordeno- digo haciendo que mi don funcione.
-Creo que te quedaron secuelas del accidente- murmura buscando un golpe y lo alejo con un manotazo.
-Ya tienes a alguien en tu corazón por eso no funciona contigo- susurro mas para mí que para él y este solo ríe.
Una vez en la habitación, me deja con la promesa de volver a visitarme mientras sus colegas me atienden, una vez termina yo desaparezco de ese lugar buscando un indicio de cómo puedo volver a casa. Camino por este lugar y seduzco a más de uno con mi gran belleza y estos me siguen.
- Deseo eso que ustedes llaman dinero, consíganlo para mí- digo y ellos salen a buscarlo.
Mientras que me hospedo en un lujoso hotel, lo mejor de lo mejor solo para mí; me doy una ducha relajante mientras trato de seguir aprendiendo su historia ya que por lo que se perdí muchos siglos de recuerdos en los cuales hice y des hice cada cosa que quise.
Una vez termine camino totalmente desnuda para mirarme en el espejo de cuerpo completo que posee este baño, ya ni recordaba mi propio aspecto tan angelical e único. Salgo de ahí para buscar ropa y me encuentro con la sorpresa de que mis esclavos ya volvieron con grandes bolsas con dinero.
Los humanos son tan fáciles de manipular, hago que cada uno se largue solo dejando al más joven de todos que creo que no pasa de 18 años humanos, lo hago crearme una cuenta bancaria y él se encarga de ir a depositar todo ese dinero. Yo me coloco un vestido negro pegado al cuerpo con unos tacones o zapatos como sean que los llamen.
Salgo desprendiendo sensualidad con cada paso que doy, buscó un lugar agradable para cenar el joven aparece dándome una lista de los lugares que debería visitar y me entregó muchas tarjetas de crédito.
-Mi señora debería tener una identificación- me murmura apenado este.
-Por lo que vi ya me nombraste como Phoenix Rouse -digo viendo las tarjetas.
-Disculpe mi atrevimiento, pero creo que es un nombre digno- dice abriéndome la puerta de un coche por lo que vi acababa de comprar.
-Descubre que me sucedió para acabar en un mísero hospital- murmuro una vez llegamos a un restaurante y este asiente en silencio mientras un hombre me habré la puerta.
Camino con ayuda de ese señor y me ingresan a una mesa sin la necesidad de dar mi nombre, disgusto el buen vino y cada hombre del lugar está pendiente de lo que haga al rato llega el mesero y le digo que me sorprenda esta noche con algunos platos lo cual gustosos corren a cumplir.
Mi atención se dirige a una pareja que ingreso al lugar y ya se me ocurrió arruinar su perfecto noviazgo, porque dudo que ese noviazgo de ensueño sea tan duradero y firme como el me profesó esta tarde.
Camino hacia ellos una vez toman asiento, sonrió mostrando mi lado más amable y una vez llegó a su lado susurro.
-Hola doctor -susurro y él se lleva una mano a la boca.
- ¿Cómo saliste estas bajo observación? - pregunta y yo solo me río.
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Feliz año nuevo mis queridos lectoras 🎉🎊👏😍😍😍Espero y la hayan pasado más que bién.
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Dioses De Egipto (saga Faraón) II
Historical FictionMi padre maldijo solo porque ya no quise cumplir con los consigno que él me había mandado. Mi madre la gran Isis nunca dijo nada dejando que Osiris decidiera mi destino. Tanto le odie que al final cambie el curso del antiguo Egipto, solo por cumplir...