Barata y cliché

176 15 1
                                    

Colarme en la dichosa fiesta fue sencillo, a diferencia de encontrar a Ele. Muy a penas encontraba espacio entre las aglomeraciones para caminar.

De manera afortunada, justo la veo cuando un hombre se le pega y le dice algo al oído, y por la expresión de la chica, supe que le había incomodado.

Furioso por eso, voy con ambos y al estar, empujo al güerito del pecho--. Aléjate de ella.

El oxigenado tarda en enfocar su vista en mí: estaba borracho--. ¿Y... tú qué o qué?

-- Memo... --pronuncia la pelinegra. Tenía los ojos muy abiertos.

-- Vamos a casa --ordeno, mirándola seriamente.
Ella accede y la tomo de la mano, sacándola de ese lugar.

-- No era necesario que me recogieras --dice, acurrucándose en el asiento. Evitaba mirarme--. Ya me iba.

Yo exhalo y no respondo.
Tenía poco menos de cuatro horas para dormir y no es que me gustara mucho eso.

Percibo que Ele comenzó a tiritar, y cómo no, con esa blusa de tirantes y falda que llevaba.
Estiro el brazo a la parte de atrás, alcanzando una chamarra que ahí estaba--. Toma, póntela.

Eleonore, avergonzada, se pone la prenda.

-- ¿Quién era ese chico con el que bailabas? --no soporté más el silencio.

-- Nadie, un amigo...

-- Un amigo al que le tienes mucha confianza, ¿no? --suelto neutral.

-- ¡Sí, y gay también! --se cruza de brazos.

-- Sólo dime algo ¿sí? --digo despacio--. ¿Subiste todo eso para... que me dieran celos?

-- ¿Qué? ¡Cla-claro que no! Es... divertido subir historias.

Una risa sarcástica brotó de mis labios--. No me mientas, nunca lo haces.

-- ¿¡Bueno, y qué importa!? --exclama de pronto--. ¡Yo... yo...!

Un semáforo en rojo me obligó a frenar. Esto me da una oportunidad de posar mis ojos en ella: parecía batallar con decir algo--. ¿Tú...? ¡Vamos, dilo!

-- Quizá... tal vez... estoy celosa --lo último por poco y no lo entendía por lo quedo que lo dijo.

Mi boca formó una perfecta "o".
¿Eleonore estaba celosa?
En este tiempo (más de medio año), que llevábamos juntos, Castillo jamás me había celado.
¡Jamás!
Al preguntarle el motivo, ella había sonreído de lado y había dicho "es seguridad, sé que lo que sientes es tan fuerte como mi sentir y por eso confío en ti"

Estaba en shock.

-- ¿En serio? ¿Celosa, tú? --el semáforo cambió a verde y seguí con el rumbo--. Vaya... ¿De quién?

-- Denisse --se encoge de hombros--. Es muy empalagosa contigo.

-- Solo es una compañera de trabajo, nada más --ya casi llegábamos a su casa--. De todas maneras, no creo que subir historias como esas fuera la mejor solución a tus celos... bastaba con hablarlo CONMIGO.

-- N-no estaba pensando --se excusa--. Fue un impulso... y sé que estuvo mal, pero --le tiembla la voz un instante-- ¡Agh, maldito Andrés!

Freno el auto a un lado de nuestro destino.
Lo apago y acomodo mi cuerpo para verla mejor.
Eleonore estaba con una mano en su vientre y un tanto inclinada adelante.

Lo entendí.

-- Espera, espera... ¿Andrés, el que llega cada mes?... ¿Ese Andrés?

Ele me da un zape--. ¡Sí, sí, ese Andrés! Lleva tooodo el día jodiendo. ¡O sea, yo ni siquiera soy dramática y mira: te hice una escena de celos barata y cliché!

Si estaba enojado, ya no lo recordaba.

-- Bueno, es verdad --acorto distancia de su rostro al mío y sonrío burlón--, pero fueron celos, ¿no?

La pelinegra, algo distraída, empezó a balbucear cosas sin sentido.

En mi interior, experimentaba una pequeña  victoria: ella casi nunca se quedaba sin palabras, y de ahora y por siempre, podría recordarle este momento para molestarla.

-- Buenas noches, celosita --vuelvo a mi lugar y Ele por fin reacciona--. Descansa.

-- Disfruta mientras puedas, Guillermo Aponte --dice mientras salía, con un notable tono de amenaza.

-- Oh, créeme que lo haré --susurro para mí, aunque luego grito, antes de que la chica se metiera a casa--. ¿¡Hey, y las gracias!?

La muchacha regresa sus pasos y se coloca en mi ventana. Después empaña, con su aliento, parte de ella y escribe:

 Después empaña, con su aliento, parte de ella y escribe:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sonrío ampliamente, y le mando un beso.
Ella lo 'atrapa' y ahora sí se va, al igual que yo.
Esperaba no tener mucho sueño mañana...

Mi chico ideal (Memo Aponte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora