Estoy enamorada de mi hermano

Capítulo 4: ¡No te metas en mi relación!

Pensé en llamar a Yuto y quedar con él de verdad pero también me ponía un poco nerviosa delante suya y lo que necesitaba ahora era un buen amigo así que llamé a Paula y quedé con ella, me vestí rápido y salí corriendo.

-Leo tu hermana va a una cita ¿No vas a decirle nada?- dijo Ren riéndose cuando bajé.

-Me importa una mierda- le contestó el idiota de los ojos azules- vámonos nosotros también, yo he quedado con Ana.

Me despedí de Akira y Ren y salí de casa ignorándolo y preguntándome si Ana sería la chica que trajo a casa el otro día. Quedé con Paula en el mismo bar en que había estado bebiendo con Yuto anoche, aunque había estado varias veces en la ciudad visitando a la abuela antes, no había tenido ocasión de conocer muchos sitios. Después de contarle todo lo relativo a Yuto y Leo y nuestra nueva vida como hermanos, ella se quedó un rato pensativa asimilando mis palabras.

-Vaya… realmente es un problema May, Leo nunca me ha parecido un tipo agradable.

Yo asentí, desde luego que no lo era.

-A parte de que él sea idiota, sigo sin entender que problema tiene con Yuto.

Paula se quedó de nuevo pensativa.

-Bueno… yo tampoco se mucho sobre eso pero ellos antes eran amigos.

Me quedé tan sorprendida que escupí la cerveza que tenía en la boca.

-¿Amigos? ¡Pero si ellos se odian!

-Sí, ya lo sé. Pero Yuto antes estaba en su grupo, eran los cuatro idiotas en vez de tres- dijo Paula riendo.

-No puedo imaginarme a Yuto juntándose con esos trogloditas- comenté pensativa- ¿Se enfadaron por lo del club de karate?

-No te sabría decir… algo pasó entre ellos el año pasado y Leo le echó del grupo y también del club, después de eso no se les ha vuelto a ver juntos.

-¿Y con Akira y Ren  tampoco? ¿No eran un grupo los cuatro?

-¿Vives en su casa y  no te has dado cuenta?- me dijo Paula sonriendo

Yo la miré sin comprender.

-Leo es inmensamente rico May, ya te dije cómo funcionaban las cosas en éste colegio. Él es el que tiene más dinero y también es el más fuerte así que es el que manda. Ni Akira ni Ren van a llevarle la contraria.

Yo me quedé pasmada. Es cierto que su casa era demasiado pero no sabía que fuese hasta ese punto. Aun así que él usase el dinero y la influencia de Will para hacer lo que le viniese en gana, me resultaba asqueroso. Por el motivo que fuese, Leo odiaba a Yuto y había usado su influencia para arrebatarle a sus amigos, realmente era despreciable. Pedí otra cerveza, bastante cabreada. ¿Qué podía haberle hecho Yuto para que Leo le odiase tanto? Tenía mucha curiosidad pero no podía preguntarle a mi hermanito y tampoco a Yuto. Evidentemente él no me había contado toda la verdad en cuanto a Leo, quizás fuese doloroso para él y no quisiese recordarlo. Aun así me costaba creer que siendo una persona tan tranquila y amable hubiese sido amigo de esos tres. Bebimos un par de cervezas más, Paula no parecía soportar bien el alcohol así que la acompañé a su casa y busqué un autobús para volver a la mía. Entonces vi a lo lejos la figura de Yuto que se acercaba.

-¡Vaya que coincidencia!- me dijo mientras acariciaba mi cabeza a modo de saludo.

Yo enrojecí un poco y le sonreí.

-Ya me iba, estuve con Paula tomando algo.

-Pero aún es temprano, ven a tomarte la última conmigo- me rogó.