Capítulo 5: Mi primer novio

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Aunque fuese increíble, las evidencias apuntaban a que le gustaba a Yuto y basándome en mi intuición y lo que sabía del amor por alguna película que había visto con mamá era muy posible que él también me gustase a mí. ¿Debía decírselo y salir con él entonces? Todo era muy confuso y el hecho de que hubiese tenido algún asunto turbio con Leo no ayudaba. Leo en sí no ayudaba. No podía sacarme de la cabeza la expresión que puso cuando sus dedos rozaron mis labios. Espera, ¿En qué mierda estoy pensado? Le pegué un cabezazo a la pared y el dolor me ayudó a despejarme. Me vestí y bajé a desayunar.

Mamá, Will y Leo ya estaban sentados comiendo. Les di los buenos días y mamá se acercó a darme un beso.

-¿Entonces te ha gustado la casa May?- me preguntó Will sonriente.

-Sí, es genial, sobre todo mi cuarto.

Mamá y él continuaron hablando sobre lo contentos que estaban de que nos estuviéramos adaptando tan bien. Yo sólo puse los ojos en blanco. Entonces reparé en la hora.

-¡Voy a llegar muy tarde! ¡El autobús tarda casi media hora!

-¡No te preocupes!- me dijo Will- Obviamente Leo te lleva en coche.

Tanto Leo como yo miramos a Will con cara de no-es-una-buena-idea pero él estaba tan feliz que no era capaz de decirle que prefería llegar a la escuela haciendo el pino a estar a solas con el idiota de su hijo. Aunque sólo fuesen diez minutos.

-De todas formas tenéis que iros ya si no sí que vais a llegar tarde- dijo mi madre.

Nos desearon un buen día en la escuela y salieron a despedirnos a la puerta. Sólo esperaba que no fuese así todos los días. Leo desapareció en la parte trasera de la casa y volvió conduciendo un Ferrari descapotable negro de dos plazas. “¿Esto es en serio?” pensé alucinada. ¿Cómo podía tener un coche tan caro?

-¡Vamos!- me gritó.

Yo reaccioné y me senté el asiento del copiloto mirándolo todo con asombro. Nunca había visto un coche así en la vida real, estaba impresionada. Él comenzó a reírse de mi reacción.

-No todo el mundo tiene tanto dinero como tú, idiota- me excusé.

-Eso es evidente- respondió con arrogancia.

De verdad que tenía un don para hacer que quisiera pegarle a cada segundo de mi vida. Afortunadamente mi odio por él estaba de nuevo renovado y fuerte y ya no pensaba en el momento extraño de anoche. No hablamos en todo el camino, yo le miraba con odio y él ni si quiera me miraba. Aparcó un par de calles detrás de la escuela y se volvió hacia mí, serio.

-No digas nada en clase, no quiero que piensen que tengo algo que ver contigo.

Le hice un corte de manga y salí del coche dando un portazo. “¡Hay un límite para ser gilipollas!” pensé. Estaba demasiado cabreada. Afortunadamente Yuto y Paula me esperaban junto a mi pupitre y pude relajarme un poco charlando con ellos aunque casi todo lo que salía de mi boca eran insultos para Leo. Estaba tan enfadada que ni me acordaba de la confesión de Yuto de anoche y cuando me preguntó que si había pensado en lo que me dijo no sabía de qué me estaba hablando.

-¿Lo que me dijiste…?- le pregunté sin comprender.

El profesor ya había entrado en clase y todos comenzaban a sentarse en sus asientos y a callarse.

-Sobre salir conmigo- aclaró él.

Se hizo el silencio y todos nos miraron, enrojecí por completo mientras él se reía.

-Mejor lo hablamos cuando termine la clase- me dijo con una sonrisa.

Toda la clase lo había escuchado ¿Por qué me pasaba esto a mí? Fijé la vista en mi libro e intenté concentrarme en la clase pero podía oír los murmullos y risas de mis compañeros y estaba segura de que hablaban de nosotros. Me sentía muy mal. Además cuando acabase la clase se supone que tendría que darle una respuesta a Yuto. Ahora mismo mi cabeza sólo podía pensar en salir corriendo. Cuando quise darme cuenta sonó la campana. Las clases habían pasado imposiblemente rápido y en seguida noté un montón de mirada curiosas puestas en mí. No se me daba nada bien ser el centro de atención. Empecé a sentir pánico cuando vi a Yuto levantarse de su asiento y acercarse, realmente iba a salir corriendo.

Estoy enamorada de mi hermanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora