IX;

6K 497 44
                                        

  ━━━━━━━━━━━━━━━━━━━┓
Capítulo IX
┗━━━━━━━━━━━━━━━━━━━┛

  ━━━━━━━━━━━━━━━━━━━┓Capítulo IX┗━━━━━━━━━━━━━━━━━━━┛

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Desperté sin saber bien que hora era.

No había rastro del sol de ayer en aquel cielo gris. Tampoco lo había de Fred. Había partido tal cual lo había dicho.

Volvía a estar sola. Pero esta vez, con un secreto.

La fogata ya se había consumido, así que lo único que me quedaba por hacer era volver a casa de Billy.

Billy.

Su rostro volvió a mí con más fuerza que la última vez. Su rostro, preocupado, golpeaba con fuerza. Me dolía verlo preocupado, aun cuando solo se trataba de una imagen, un recuerdo, que mi cabeza estaba creando. Pero dolía mas que el tenerlo frente mío.

No supe bien que dirección tomar, hasta que un olor familiar determino mi sendero de vuelta a casa.

Era el olor de Fred. Su dulce olor estaba allí, guiándome. Como una brújula.

Lo seguí decidida, tomándome mi tiempo, caminando a paso humano. Necesitaba de ese tiempo. Necesitaba pensar. Pensar en todo lo que había descubierto, en todo lo que Fred me había contado.

No pare mi andar. Solo seguía aquel olor. Solo me guiaba ese olor.

Pero tenía una pregunta en mi cabeza. Una a la cual Fred no había contestado aun.

-¿Porqué cuidarme?- mi voz se hizo eco en el bosque, y, otra vez, la lluvia caía sobre mi. -¡Genial! ¡Como si no tuviera suficiente ya!- me estaba molestando el cambio de clima. Era como si el cielo quisiera borrar con la lluvia todos mis recuerdos.

Apure el paso. Si llegaba mojada de la cabeza a los pies a Billy le daría un infarto.

Al cruzar un pequeño arroyo, pude sentir que me seguían, que me observaban. Fred no podía ser, se había marchado, y a estas alturas ya debía encontrarse en la frontera de Canadá.

No me gire para averiguar quien era. Solo acelere el paso. Llegue a correr, solo a velocidad humana.

Mi respiración se aceleraba.

¿Quién era? ¿Qué quería? Esa eran las preguntas que se hacia mi curiosidad. Y esta, le gano la batalla a mi instinto de mantenerme a salvo.

Me gire y observe todo el bosque. Cada lugar, cada sombra era escrutado por mi mirada.

Nada. No había nada. Solo el bosque.

【MONSTRUO】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora