Capitulo XXIX (Final)

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17 de Junio de 1920

La mañana era perfecta, radiante, el sol comenzaba a dar su luz, los rayos que salian de el cubrían las praderas...
Terry se unió a Candy para limpiar el jardín, con la ayuda de Mark y su hijo, para terminar antes de que los Ian y Richard despertaran.

Terry terminó con las manos llenas de pequeñas heridas, Candy se sintió culpable de ver las manos de Terry en aquel estado y acercándose a él le dijo:

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Terry terminó con las manos llenas de pequeñas heridas, Candy se sintió culpable de ver las manos de Terry en aquel estado y acercándose a él le dijo:

—Terry, tienes las manos heridas.
—No es nada Pecosa, pronto pasará.
—Déjame verlas, dijo ella mientras extendia sus manos
Terry le sonrió e hizo lo que le pidió, cuando Candy tuvo las manos de su esposo frente ella, se dio cuenta lo,lastimadas que estaban...y llevo las manos de su esposo a sus labios y deposito un beso en cada una...y le dijo:
—Iré por el maletín de primeros auxilios.
Candy saco del maletín una crema, para aplicársela.
—Te curaré las heridas, esta crema la usábamos muy a menudo en el la sala de emergencia del Hospital Santa Juana....Terry asintió y extendió sus manos para que ella hiciera su labor de enfermera.
—Es una ventaja contar con una enfermera tan eficiente, se atrevió a bromear él mientras Candy aplicaba la crema....ella sonrió y luego le dijo:
—Me temo que por hoy no podrás atender ninguno de los asuntos parlamentarios que requieran tus manos, por la noche aplicaré un poco mas de crema y tal vez en un par de días ya se vean mejor....Por que no me dijiste que no sabias de jardinería?
Terry le sonrió, pero no había manera de dejar que ella hiciera ese trabajo sola, ya que aun cuando el insistió en contratar a un jardinero, Candy se rehusó.
—Prometo que la próxima vez tendré mas cuidado, gracias Pecosa.

Esa tarde Ian y Janneth los visitaron, y mientras Janneth conversaba con Candy y disfrutaba de sus nietos, Ian le llevó un informe sobre una propiedad de cual Terry estaba interesado.

—Terry, que te sucedió en las manos?
Terry se sonrió y le respondió.
—Quise jugar a ser el jardinero y termine con las manos cortadas.
Ian no pudo evitar reir a boca de jarra y Terry lo acompañó.
—Asi que el dueño es de origen Frances...interesnate!
Tan pronto como terminaron con sus asuntos, Ian y Terry salieron del despacho y se reunion con sus esposas y los gemelos.
Los días pasaron sin ninguna novedad y las manos del castaño sanaron por completo, Terry regresaba a la Mansion Granchester, después de una larga jornada de trabajo en el parlamento y se encontró a Candy en el jardín junto a los bebes y a Klin....pero mirada de Candy se via un poco triste...Terry se preocupó un al verla de aquella manera
—Candy esta todo bien?
—Terry mi amor, hace cuanto llegaste? no escuché el sonido de tu coche.
—En realidad, acabo de llegar, pero dime, que te sucede Pecosa.
—Terry, he recibido una carta de la hermana Maria en donde me dice que la señorita Pony esta enferma, y luego me dice que no debo preocuparme que no es nada de cuidado....pero aún así no dejo de sentirme preocupada, desearía estar con ella y cuidar de ella en estos momentos.
—Y por que no le llamas a Annie, y le preguntas cual es la condición  de la señorita Pony y así estarás mas tranquila.
—Tienes razón Terry, le llamaré a Annie.
Candy se sentía mas tranquila ya que después de hablar con Annie pudo corroborar que tal y como la hermana Maria le decía en la carta, la señorita Pony ya estaba mejor, que no había sido nada de cuidado.

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⏰ Última actualización: Dec 20, 2018 ⏰

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