Gabriel, Helena, Ratón y Gabriela llegaban al mismo parque de atracciones donde se encontraba Lucas con Nahia, pasaban directamente a recoger sus pulseras sin tan si quiera ser revisados.
- Hay están pintadas las familias mafiosas nosotros estábamos delante y ellos llegan y pasan así como si nada, préstame atención te has quedado en blanco.- decía Nahia a Lucas.
- Pues tía yo no sé si serán mafiosos o no pero nunca antes en toda mi vida había visto una niña tan hermosa.- decía Lucas mientras miraba a Gabriela a lo lejos.
- Parece toda una muñeca, pero es mejor no mezclarse con esa gente.- decía Nahia mientras recogían ya sus pulseras.
- Gabriela camina no te quedes atrás vamos a ir a desayunar primero.- decía Helena.
- Estaba chateando con Ricky mama,- decía Gabriela
- Amor vinimos a estar en familia no con los celulares apágalo y guárdalo por favor.- decía Gabriel.
- Está bien papa, ya lo guardo Decía Gabriela.
Lucas y Nahia llegaban al restaurante dentro del parque a desayunar.
- Que suerte tía mira quienes están desayunando aquí también.- decía Lucas.
- Sí que bien, no me tendrás dando vuelta buscándola por todo el parque, vamos ve, te espero aquí.- decía Nahia.
Lucas se acercaba a la mesa donde estaba desayunando la familia de Gabriela.
- Donde cree que va niño- le preguntaba Ratón, desde la mesa de al lado.
Gabriel observo la situación.
- Déjelo que pase Ratón es solo un niño quiero ver que quiere.- decía Gabriel.
- Buenos días, caballero, disculpe que los moleste, mucho gusto Lucas Rivero Henao, me gustaría poder hablar un momento con su hija, observe como se le cayó su celular y quisiera devolvérselo.- decía Lucas.
- Así que es el nieto de Don Jacinto Henao, un placer, un joven muy educado, llamare a mi hija para que se lo entregue usted mismo, espéreme aquí un momento.- decía Gabriel.
- Que sucede quien es ese muchachito tan apuesto- preguntaba Helena.
- Es nada más y nada menos que el nieto de Don Jacinto Henao, el padre de Marcos, quiere hablar contigo Gaby ve y no tardes.- decía Gabriel.
- Hablar conmigo y de que yo a ese muchacho no lo conozco de nada, que pereza hasta en el parque de atracciones tengo admiradores.- decía Gabriela.
- Ojala y ese muchacho algún día sea pretendiente tuyo mi amor, es un partidazo, y esta guapísimo, ve y no lo hagas esperar no seas grosera- decía Helena.
Gabriela iba enojada a su encontró con Lucas, apenas les habían servido el desayuno, y no entendía para nada el interés de sus padres en que hablara con él.
- Buenos días, yo soy Gabriela mi papa me dijo que querías hablar conmigo, sino te importa tengo algo de prisa ya nos sirvieron el desayuno y se me va enfriar el café.- Decía Gabriela a Lucas que se encontraba de espalda haciendo señas a su tía quien estaba impaciente.
Lucas giro su cuerpo y miro fijamente a Gabriela ambos sintieron como si el mundo se parara en ese instante, como si se desbordara un mar, o estallara el más inmenso volcán, surgieron dentro de ellos un sin fin de emociones, veían a través de sus ojos su esencia. Ninguno había sentido antes algo igual.
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La hija de mis padres
RomanceHelena Mendoza se vio desde temprana edad sola en el mundo, le toco aprender a sobrevivir siendo una pequeña niña le robaron la inocencia y en todo lo que creía, con tan solo doce años su padre la vendió en un prostíbulo, para que dejara de ser una...