Valentina Copper.
Estaba de buen humor ya que era sábado, eso significaba que no habría instituto por lo tanto podría quedarme en la cama todo el día si así lo deseaba.
Pero la verdad es que mi mente no dejaba de repetir las escenas que viví junto a los chicos desde que llegué, el abrazo hacía Alex, sus comentarios estúpidos y la pregunta que me hizo hace unos días.
¿Por qué demonios no dejo de pensar en eso?.
Sabía la respuesta, al menos tenía una idea pero me negaba a aceptarla.
Es el amigo de mi hermano. Mejor dicho, uno de sus mejores amigos.
Ayer Hannah estaba extraña pero ninguna de nosotras sabía la razón, cuando decidí mudarme a Los Ángeles no creí que mi vida sería el drama en persona. Fruncí mi ceño recordando la extraña discusión entre Hannah y Liam ayer.
Flashback.Estábamos en nuestro salón de clases ya que habíamos llegado antes que el resto, Daisy dormía sobre su mesa, Sam ordenaba sus cuadernos y yo me senté sobre la misma mientras que Hannah entraba sin ánimos.
— Buenos días.— Murmuró la chica con cara de pocos amigos.
— ¡Hola bonita!.— Gritó un Liam animado detrás y todas lo miramos indicándole que guardará silencio.— ¿Estás molesta?.
— No.— Respondió Hannah.
Liam se encogió de hombros y se acercó a mi con una sonrisa extraña, lo observé de pies a cabeza por acto reflejo ya que parecía querer algo.
— Valen, ¿eres cercana a Nick?.— Preguntó el pelirrojo y asentí, pude ver que Hannah alzó la vista cuando lo nombró.— Es atractivo, diría que me agrada mucho. Hablé unas veces con él en la cafetería y...
— Cierra la boca.— Soltó Hannah tomándose la cabeza y Samantha levantó la vista extrañada.
— Estás molesta, pero tranquila, no pienso quitarte a tu chico.— Dijo Liam haciendo que ella se levantará y lo dejará contra la pared.
Me puse de pie al instante para apartarla del chico quien la veía alarmado, la tomé de la mano pero se zafó de mi agarre y se fue del salón sin emitir palabra alguna.
— ¿Qué le ocurre?.— Pregunté.
— No lo sé.— Respondió Sam con el ceño fruncido.
Fin del Flashback.
Salí de mi habitación y bajé las escaleras, los chicos estaban viendo una serie llamada "La Maldición De Hill House"; yo la había visto más de tres veces por lo que ignore la pantalla.Mi móvil sonó indicando un mensaje por parte de Sam.
Samantha: Cuida de Hannah, fue a tu casa.
Fruncí el ceño y miré a los chicos.
— Buenos días.— Dijo Alex sin despegar la vista de la pantalla, su voz sonó ronca y sentí varios escalofríos recorrer mi cuerpo.
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Pequeño Demonio: El Comienzo ✔
RomansaSe supone que a los dieciséis años una chica debe estar de novia y ser feliz, pero no es su caso. Ella no es cualquier chica, ella rompe los estereotipos de una adolescente y destruye las reglas. Tras mudarse con su padre, quién no ve hace años, to...