T R E C e

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Al amanecer Hoseok se encontró de cara con una imagen realmente encantadora, el menor era precioso incluso al dormir. Con su hermoso rostro a su disposición se acercó lo suficiente hasta juntar sus labios con los del chico en un suave beso sin movimiento. Dedicándole una tierna risa, Tae abrió uno de sus ojos juguetón para proceder a devolverle el beso pero convirtiéndolo inconscientemente en uno más apasionado. Cuando estuvieron satisfechos se separaron dejando el momento para más adelante. Y es que tras querer darle aún más emoción a su obsequio, Taehyung había decidido que Ho abriría aquella misteriosa caja a la mañana siguiente por lo que a cambio de unos cuantos besos se había acomodado sobre él en medio de un abrazo la noche anterior.

—Bebé, ¿y el regalo?— Taehyung de una manera traviesa y con medio cuerpo sobre la cama comenzó a rebuscar bajo la cama de Jung.

—Deja abrir las cortinas y cambiarme de ropa Hobi, tápate los ojos.

Hoseok acató su orden casi a la perfección, a no ser porque pasados unos diez segundos abrió uno siendo testigo de como Tae se quitaba los pantalones mientras que ya no tenía nada cubriendo su torso. Como por arte de magia su pene empezó a endurecerse palpitando fuertemente dentro de su boxer. Renegó con la cabeza invocando sin querer a las imágenes de una de sus pasadas sesiones de sexo apasionado con el menor frente a él aún buscando ropa adecuada para ese día en el armario, y dentro de dos segundos ya se encontraba de camino hasta el morocho de espaldas.

—¿Qué tal si el regalo queda en segundo plano y nosotros por mientras revivimos uno de los mejores momentos del pasado que vivimos juntos?— Sedució Hoseok mientras repartía besos y mordidas por cada centímetro de piel a su alcance.

Taehyung se estremeció de pies a cabeza cuando este presionó el bulto que seguía formándose entre sus nalgas y la delgada tela que las cubría. Con lentos vaivenes de cadera Jung fue invitándolo a gemir corriendo el riesgo de ser encontrados por Mamá Jung o su hijo, pero poco les importó cuando de una vez por todas Hoseok descendió un poco de la parte delantera de los calzoncillos que portaba Taehyung y agarró su miembro esta vez sin prenda alguna que lo interrumpiese, haciéndolo suspirar y morderse los labios de una forma brutal.

Hacían años que nadie le tocaba de una manera íntima, mucho menos quien amaba. Esto era la gloria para el más alto.

—Hoseok... Siempre tienes que ser t-tan espontáneo con tu calentura. ¡Ah!, no me muerdas. Estoy muy sensible.— Dijo con voz entrecortada. —Sólo... Por favor, tócame más, Hobi.

Ese magnífico incentivo auditivo lo llevó a deslizarse con mayor ímpetu entre los glúteos que también eran apretados al gusto de la mano de Hoseok. De pronto un nuevo recuerdo fugaz vino a su mente y sonriendo de medio lado tomó entre sus dientes el lóbulo derecho de Taehyung, incitando de forma inminente la corrida del chico que a la par liberó un fuerte grito que fue acallado en los dedos largos que metió súbitamente en la dulce boca del menor. Alcanzando el orgasmo con las mordiditas que el moreno le otorgó.

—Ah, bebé. Eres tan bueno.— Suspiró el mayor besando en esta coyuntura los labios que lograban maravillas.

—¡Hobi, el regalo!— Regañó sonriendo.

—Aún no estoy completamente listo TaeTae.— Besó la mueca del ligeramente más joven. —¡Tomemos un baño juntos Taehyungie. 

—Está bien, creo que el sudor y la agitación que acumulé son dignos de unas bombas de baño junto a ti.

[...]

Tras otra ronda de toqueteos en el baño ambos adultos se vistieron y arreglaron para salir al patio con la caja en mano, sentándose luego en una hamaca bajo unos árboles de cerezo que comenzaban a florecer. Preparado para su sorpresa, Hoseok tiro de los lazo azules y quitó la tapa del paquete. Completamente fascinado miró a su chico que sonreía alegremente al ver su reacción y comenzó a sacar con cuidado todas las fotos impresas, unas cajetillas con tests de embarazo, fotos de lo que creía que eran ultrasonidos, y como mínimo unas veinte prendas de ropa de distintos tamaños y CD's.

Comenzó por las fotos de un Jungkook apenas nacido y en una incubadora, luego partió con lágrimas inundándole los ojos con las fotos de Taehyung y su pequeño hijo de unos días y así sucesivamente hasta encontrarse con la foto más reciente de su último día en Japón. Estaba sin palabras, Taehyung sin dudas era el mejor del mundo y se sentía tremendamente afortunado poder tenerlo entre sus brazos consolándolo para calmar su llanto emotivo. En su mano tomó de repente un mameluco demasiado pequeño.

—Era de JungKookie cuando recién fue vestido por primera vez gracias a las enfermeras en la clínica.— Relató recordando ese mágico momento de su vida.

—Mierda, Taehyungie... Me lograrás dejar sin lágrimas estos días.— Dijo quitando una que corría por su mejilla.

—Y eso que no haz visto aún los videos que te he grabado con todos los momentos más emblemáticos de estos siete años.

—Lo malo es que yo quería verte en alguna fotografía con una gran panza, o por último con tu vientre algo hinchado Tae.— Ante su puchero Kim mostró sus dos bellas hileras de dientes en una característica sonrisa de forma geométrica.

—Eso es porque hice un video de lo que fueron unos intensos nueve meses con un bebé muy inquieto Hobi.— La mirada brillante que le dedicó el nombrado fue suficiente para regalarle un nuevo besito en los labios a Hoseok.

✨🎁 Uwu 🎁✨

Esa no se la vieron venir, ahre sndnsndns. Miren que no iba a escribir por aquí nada porno hasta varios capítulos más adelante pero como sé que varios lo deseaban pues todo lo vale (igual sorry por ser un mala escribiendo). 🌺💕✨


(Ahre, este capítulo era el 13 uwu, en mi pendejada había repetido el doce en el título iwi)

MY BEST FRIEND; Vhope [호석] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora