Los escuadrones restantes del ejercito de la Gibson korp. y la mayor facción de los Muramasa se habían atrincherado en lo que quedaba de los limites sur oeste de la ciudad, muy cerca del hogar de Klaus Stark y Kazuya Nairoboi, jóvenes kriegers de la Vieja Guardia.
La guerra llevaba varios meses, con bajas de uno y otro lado, muchos jóvenes kriegers habían muerto junto con civiles, esclavos, e incluso algunos cargos importantes de las metacorporaciones importantes en esos tiempos, el hambre y la desesperación habían echo mella en toda la ciudad.
Neodeltoya a pesar de su tecnología y capacidad para protegerse a si misma con los campos cuánticos de fuerza, había sido parcialmente destruida, como en todo conflicto la peor parte se la llevaron todos los que no eran kriegers, los civiles y habitantes de los sectores mas humildes. Klaus no había vuelto a su barrio desde el comienzo del conflicto, pero sabía que le seria difícil reconocer el lugar donde se había criado, si es que quedaba algo que fuera capaz de reconocer o ver como familiar.
─¿Vamos hermano! ¿que pasa? Hoy estas más iracundo que nunca, o esa pantera te a dejado atontado ─y rio escandalosamente como era común en él─ como se llama...eh uhmm, Krüger, Anto...¿Antonia? ¿Si?
─Deja de decir gilipolleces, Kazu.
─¡Vamos, vamos no te enfades! ¡Vaya mujer, si, yo también estaría atontado!─ y siguió descojonándose de su amigo.
─¡Quieres callarte! No hace falta que se entere todo el jodido batallón con quien folle anoche.
─¡¿Y que?! Yo ayer estuve con Dunia, antes de ayer con Nadia y Anne, joder tendrías que haberme visto Aniki* ─abrió la boca soltando otra tanda de carcajadas─ y antes...uhmm ya no me acuerdo –y su risa siguió retumbando en el embarcadero.
─Si a ti te gusta ir preponderando, a quien le clavas tu espadita cuántica cada puta noche, no es mi problema, así que baja la voz.
─¿Que pasa hoy? estas de muy mal humor hermanito.
─¿Acaso no sabes adonde vamos?
─Si, ¿y que?, no somos los únicos que tienen destruidos sus lugares de infancia, ¿que más da?
─Solo es que no es lo mismo para mi, hacer la guerra donde antes solo podía sentir paz. Es algo contradictorio.
─Hermano, sentirás paz, como siempre ,en el fragor de la batalla. Recuerda que llevo algo más de tiempo que tu aquí, ¿recuerdas la destrucción de SODOMA?
─Si, joder era nuestro local favorito.
─Forme parte de la operación que destruyo el local por completo debido a unos objetivos. Después de eso, comprendí que nada queda, aniki.
Todos los batallones fueron subiendo a sus respectivas naves de asalto, la nave donde iban Klaus y Kazuya era la nave donde iba el mismísimo Coronel Mayor Eberhard Süskind y el legendario General Sugawara. Justo antes de subir el hijo de Sugawara se estaba despidiendo de él, el chico hacía un tiempo había echo buenas migas con Klaus.
─General...─e hizo un gesto con la cabeza.
─Soldado raso Stark─ y lo detuvo cogiéndole amigablemente por el hombro- mi hijo Garin a querido venir a desearos suerte en la batalla venidera, a insistido mucho en veros personalmente.
Klaus se agachó y saludo al pequeño Garin Sugawara, Kazuya tambien se acercó.
─Hola pequeño, ¿como van las clases de estrategia?
─Hern Stark, tengo una estrategia muy buena para la batalla de hoy, pero mi padre dice que todavía no es lo suficientemente buena ganar la guerra.
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Primera Orden
Science FictionPortada por @thedemonsdynasty Gif por @BlasfemiaBohemia ¿Puede amar alguien que ha perdido su humanidad? Cuando has escalado en la corporación de guerreros TrapiGuard a base de sangre debes dejar atrás empatía y sentimientos, solo cumplir órdenes...