Ello, yo y super yo
20 de julio 2016
Hoy, después de tan pocos días pero tantos relatos por contarle he decidido hacer algo por mí, para sentirme bien yo, conmigo mismo.
Ha terminado la hora del almuerzo y todos en el salón están preocupados por la siguiente clase, no por lo difícil que es manejar el contenido tan exigente y poco habitual, sino por contener el sueño y las ganas de dormir.
4:06 p.m y el profesor alzó la voz mientras Natalia y otros compañeros duermen, recuerdo cuál fue exactamente su pregunta, dejando a todo mundo atónito y esperándola a ella para contestar la pregunta y salvar el día:
- Chicos, ¿alguien puede decirme por qué se da un edema pulmonar y como se puede quitar?
Por supuesto, nuestra afamada chica fan de la medicina respondió con esa voz tan perfecta:
- Un edema pulmonar se da debido a acumulación de materia dentro de los pulmones, haciendo que la gente tenga dificultades para...
Una abrupta interrupción se escuchó en el salón, era mi súper yo. El que rondaba todo el tiempo en mi cabeza haciéndome el héroe y dejándome a los ojos de los demás como el amo del salón.
- No es materia, es líquido que las personas acumulan con el tiempo en los pulmones.
Se puede dar por indicios de problemas cardíacos o digestivos.
La manera de quitar un edema, es aplicando diuréticos naturales, como frutas que sean ricas en agua como la sandía, melón, uvas, etcétera. Incluso con bebidas alcohólicas, puesto que harán que la persona quiera ir al baño constantemente y así sacar el líquido retenido. Un edema causa inflamación en las personas, por ejemplo en el rostro, manos o pies debido a la excesiva retención de líquidos.
También funciona con diuréticos no naturales como el oxígeno o lo que naturalmente conocemos como nebulización.Y las miradas me penetraron, excepto la de Natalia claro está. Acto siguiente pude apreciar cómo su cabeza giró hacia mí mientras me observaba con asombro y una leve sonrisa en su rostro que me iluminó la tarde y que pienso que si despertó a los bellos durmientes del salón, podría hasta levantar a los muertos como un llamado a enamorarse.
El timbre sonó y salí apresurado como un Rockstar evitando ser entrevistado después de una gran hazaña.
*Hysteria - Def Leppard de fondo*
Con audífonos y mis cassettes de un viejo Nintendo en mano, seguí avanzando.Siento levemente sobre mí, una voz a lo lejos que estoy seguro no es la del cantante en mis audífonos. Siento el toque de una liviana mano sobre mi hombro izquierdo y a la par, una silueta.
Me quito el audífono para escuchar y volteo para ver quién osaba a interrumpir mi trayectoria de esa forma.Era ella, más radiante que nunca y con una sonrisa (otra vez) encantadora y asombrada, la escucho decir:
-Oye, vaya que si fue una respuesta genial a esa pregunta -me decía mientras su respiración agitada por correr hacia mí se hacía evidente- ...creí que era por la acumulación de materia, aunque si entendí lo demás y me parece increíble que hayas profundizado tanto en ese tema, seguro ya tienes un cien en el exámen la próxima semana. Me llamo Sofía -sugirió antes que yo pudiera si quiera pronunciar una palabra, aunque en teoría no tenía ninguna por el impacto que causó en mí al sólo tocar mi hombro. Y extendió su mano.
-Yo soy Leonard -contesté a secas, no teniendo nada más que decir y al mismo tiempo estrechando su mano.
-Pues mucho gusto Leonard, amo la medicina y la biología. Y por lo visto eres bueno en eso, ¿hay algo que tú también ames?
-"Si tan sólo supieras" -me autocontesté mentalmente, mientras mis nervios se hacían evidentes al hablar.
-Emm si, si, amo la tecnología y el arte, me fascina la pintura.
A este punto, ya era evidente mi falta de experiencia al hablar con mujeres, y mi timidez volvió a ganar la pelea.
Al transcurrir de los minutos la charla se hizo amena y la timidez aunque presente, todavía me permitía darle batalla.
Era una gran oportunidad para decirle lo mucho que la quería, pero realmente ya no sé qué esperar ni de mí ni de nadie.
Seguimos avanzando. A medida que los dos no sabíamos a dónde se dirigía el otro, se hizo incómodo el silencio entre los dos. Hasta que llegó el momento de despedirnos.
Vaya sorpresa, ¡el mundo me ama y yo lo amo!, Sofía vive justo a cincuenta y cinco pasos de mi casa.Una gran oportunidad para que los algoritmos me muestren como sería si fuéramos juntos a la escuela o fuera yo a visitarla a su casa, o incluso dejarle mis versos debajo de la puerta. Pero estaba seguro que eso no iba a pasar.
Así que por ahora, mientras me tomo un té y repaso cada una de mis palabras para verificar si no dije alguna estupidez al mismo tiempo que trato de calmar mis nervios, siento que hoy más que nunca no debo renunciar a escribirle.
Porque, ¿quién podrá juzgarme por hacerlo?
Nadie lo hará seguramente, pero si no lo hago, me terminaré juzgando yo.
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Quiero hacerte el amor
PoesiaLeonard Fitcher, un estudiante formal pero con capacidades muy llamativas e intelectuales descubre una capacidad y una forma de llamar la atención de la chica de sus sueños, Sofía Michaels, estudiante en su mismo curso quien destaca en él lo que un...