Innocent |Derek Hale [Teen Wolf]

Capítulo 3

Estos días resultaron difícil para Robin, no se parecía nada a lo que se imaginó cuando su hermano mayor le dijo que iría a Beacon Hills a descubrir lo que le sucedía. Los chicos habían descubierto la lista negra, por lo cual la pequeña Whittemore seguía sin ser un asunto de prioridad y hasta creía que había sido archivada como si fuera un papel de escritorio.

Era una mañana tranquila Robin aprovecho que los demás estaban en el instituto y salió a investigar por su cuenta, fue a la antigua residencia Whittemore. A pesar de ser solo un año menor que Jackson siempre fue tratada diferente por sus padres, como la princesa en la torre. Si sus amigas querían verla debían ir, ella era llevada y buscada del instituto por sus mismos padres, nunca le permitían estar sola en el mundo exterior ni mucho menos estar expuesta por mucho tiempo y ahora todo eso le resultaba sospechoso. Porque al llegar a Inglaterra fue como si le quitaran las cadenas y la dejasen ser libre, como si la razón por la que lo escondían hubiera quedado en Beacon Hills.

No encontró nada fuera de lo normal en su antigua casa, se aseguró de dejar todo como estaba para que nadie notase que estuvo allí. Todo el camino de vuelta a la casa de Scott ella sintió que la seguían, volteaba cada tanto asegurándose de que nadie la siguiera e incluso había tomado una gran piedra y la había metido en su bolsillo por qué fue lo primero que vio.

Cuando llego a casa del alfa y cerró la puerta con seguro se permitió soltar un suspiro de alivio, se quedó unos segundos contra la puerta y vio el abrigo de Scott en el perchero. Se acercó y busco en el bolsillo con la esperanza de encontrar algo y así fue, la lista negra de la que tanto habían hablado, pero nunca le permitieron ver, por fin estaba en sus manos.

Al abrirla y leer los nombres encontró algunos que conocía, otros que jamás vio en su vida y justo al final estaba el suyo.

Robin Whittemore 30

-¿De quién es la casa en la...-Derek no pudo terminar su pregunta por qué la joven reacciono y le arrogo la roca la cual él atrapo-Buenos reflejos-dijo impresionado.

Robin puso una mano en su pecho respirando agitada.

-¡Tienes que dejar de aparecer así!

Derek soltó una risa suave y asintió.

-Vale, es verdad. ¿Que hacías metida en esa mansión?-pregunto.

-¿Me estabas siguiendo?-pregunto sorprendida, se sentía un poco aliviada ahora que sabía que era él y no su paranoia-¿Tu no deberías estar ocupado buscando la manera de ser un adulto de nuevo?

Él hizo una mueca. A pesar de que Peter se había tomado su tiempo para explicarle a Derek que en realidad debía tener 22 años y que habían perdido a toda su familia por el incendio, era demasiado doloroso para procesarlo, aunque sabía que se suponía que ya había pasado por eso, simplemente no lo soportaba.

-Tu cara ha cambiado de repente. ¿Te sientes bien?-pregunto Robin acercándose a él y este respondió dando un paso atrás alejándola-Como sea...-ella se iba a ir directo a su cuarto pero Derek le tomo la mano.

-¿Que problemas puedes tener tú?-pregunto de forma brusca.

-Para empezar, me haces daño-Derek dejo de sujetarla con fuerza, pero no la libero, Robin suspiro al notar que él no tenía intenciones de soltarla-se lo que sientes, entiendo que estés actuando así. Pero solo conseguirás lastimar a las personas que te quedan-ella evito mirarlo a los ojos en todo momento.

-Tú no sabes lo que siento, ni siquiera te atreves a mirarme. No sabes lo que se siente perder a toda tu familia de repente-dijo Derek molesto y se sorprendió al sentir que Robin apretaba su mano.

Ella lo miro a los ojos y de pronto era él quien estaba nervioso.

-Hace un mes iba en el auto con mis padres, yo sabía que no debíamos salir de casa, mi hermano me había advertido sobre la manada con la que tenía problemas. Pero fui estúpida y no le hice caso, era mi trabajo cuidar a mis padres y llamar a mi hermano si sucedía algo, pero no. La niña caprichosa quería salir de su casa e hizo que sus padres la llevaran al cine...-entonces Derek vio en los ojos de Robin el dolor que él sentía-cinco minutos, cinco minutos de charla con mis padres en el auto fue lo último que tuve. Aun puedo recordar el impacto de mi cráneo contra el techo del auto al volcar... Cuando desperté estaba cubierta hasta la cabeza por una sábana blanca en una cama de hospital, mi hermano cuando me vio me abrazo tan fuerte que sentí mis huesos tronar, pregunte por mis padres una y otra vez llorando porque lo note en su mirada, note que lo habíamos perdido todo. No fue hasta que escape de sus brazos y corrí a la habitación del hospital que los vi, como los ponían en bolsas de morgue como si no significara nada, como si hace unas horas ellos no hubieran estado vivos...-las lágrimas de la chica desbordaban opacando sus ojos-¡No fue justo!¿¡Crees que no entiendo tu dolor!?¡Tú te culpas tanto como yo me culpo a mí!¡Porque era yo quien quería salir!¡Ellos solo querían hacerme feliz!¡No se merecían eso!¡No se lo merecían!

Ella perdió el control, el lobo noto un extraño destello azul en los ojos de la chica y la abrazo contra su pecho conteniéndola, se había arrepentido de sus palabras, ella entendía su dolor y lo hacía a la perfección porque sentía lo mismo que él, el mismo dolor profundo e interminable.

-Robin...-murmuró intentando verla al rostro, ella libero del agarre y limpio sus mejillas avergonzada.

-Lo siento... yo... yo mejor iré a mi cuarto.

-Espera... quiero estar contigo, digo quiero hablar contigo-se corrigió rápidamente-no volveré a dudar de ti, entiendo que en este momento estamos pasando por lo mismo... así que te ayudare a descubrir que criatura eres y tú me ayudaras a volver a ser un adulto. ¿Qué dices?-ella le regalo una pequeña sonrisa y asintió.

-Tenemos un trato Hale. Tú me ayudaras a saber quién soy y yo te ayudare para que vuelvas a ser un lobo gruñón-Robin soltó con diversión haciendo reír al chico.

-Todos dicen eso. ¿Tan amargado seré cuando crezca?

-Tal vez exageran-comento la castaña.

-¿Que tomaste de la chaqueta de Scott?-pregunto el lobo y la joven le entrego el papel.

-Es la lista de las criaturas sobrenaturales de Beacon Hills, tengo entendido que eso significa que te van a cazar... Es decir que me van a cazar porque mi nombre esta allí.

-Vales 30, más que Scott-dijo Derek sorprendido.

-¿30 mil?

-Millones-corrigió el lobo y la chica comenzó a toser porque se había ahogado con su propia saliva.

-¿Pero qué demonios? Tengo precio alto y ni siquiera sé que soy-se quejó Robin.

Derek abrió el papel que se encontraba doblado viendo dos nombres más en la lista.

-No eres la única mira...-ella se acercó a él y leyó los nombres.

Dania Russell 30
Castiel Russell 30

-¿Russell?... Eh oído ese apellido antes-murmuró Robin-¡Ya se! Son una familia que vive al final de la calle en mi antiguo vecindario, pase frente a su casa cuando venía.

-Bueno, tal vez ellos tengan respuestas para ti-dijo Derek.