One Shots/Drabbles //MARVEL

Él es mío, Eres mío

Stony. Versión femenina de Tony y un intento de Steve EMH.
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Debía haberle hecho caso a Pepper, debía haberla escuchado cuando le dijo que aquello era una locura. Pero claro, como era Toni Stark, había hecho lo que se le daba la gana como todo el tiempo. Ahora estaba lamentándose mientras el frío se colaba entre sus pocas prendas y la nieve comenzaba a caer suavemente sobre el terreno ya nevado.

—¡Maldición!—Miró al cielo, el vaho de su boca elevándose como el humo de una chimenea. Luego, miró hacia su experimento que se había averiado y la había dejado ahí, varada en quien sabe donde.—Tonto traje.

Toni había trabajado arduamente en la idea de "un piloto sin nave." Había trabajado durante días sin descanso, y cuando finalmente pudo obtener algo seguro para comenzar el primer prototipo, decidió que debía hacer como los antiguos científicos y llevar todo a la prueba por sí misma. Fue así que se metió en aquel traje metálico y salió a probarlo, aún contra la voluntad de su mejor amiga Pepper. El prototipo había funcionado bien durante un largo tiempo, JARVIS había mostrado continuamente el status del traje, así que, confiando en su creación había intentado romper un récord de altitud y entonces fue cuando falló y cayó. Así que ahora ahí estaba, perdida en un lugar olvidado, rodeada de nieve y sin una sola pista de a dónde dirigirse.

Se sobó sus brazos tratando de hacerlos entrar un poco en calor y suspiró. Sí, definitivamente debió esperar y tal vez, también haber escuchado a su I.A. cuando le aconsejó caminar antes de correr. Dio una patada a la armadura y miró de nuevo el panorama. No, nada de eso estaba bien.

El lugar donde había caído su armadura había dejado un cráter enorme; Toni supuso que quizás alguien había visto su aterrizaje forzoso y seguramente se acercaría por curiosidad y de esa manera podría ser salvada. Pero... Mientras eso sucedía...

Pasó sus manos por los costados del traje y usó toda la fuerza de sus piernas para poder moverlo y sacarlo del cráter. Resbaló un par de veces hasta que consiguió moverlo un poco, cosa que ocasionó que se fuera de espaldas hacia la nieve.

—¡Oh si! ¡Esto no puede ir mejor!—Se levantó, sacudió su ropa y entonces lo vio.

La luz de la luna era escasa pero la suficiente para que lograra distinguir algo brillar entre la nieve. Dio un esfuerzo más, antes de poder quitar completamente la armadura de su nuevo descubrimiento. Se arrodilló y con sus manos barrió un poco la nieve, dejando al descubierto algo que oscilaba entre el color blanco y azul.

—¿Pero qué...?—Con prisa, despejó un poco más la zona, dejando finalmente a la vista algo completamente increíble.

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Toni estaba eufórica, Pepper poco podía entenderla con toda esa rara palabrería sobre "las historias de mi padre", "segunda guerra mundial" y "Tía Peggy tenía razón".

Toni se había desaparecido durante semanas luego de su locura con aquel traje. Pepper había estado preocupada por su paradero pues JARVIS le había dicho que la señal se había perdido en algún punto del Ártico. En su desesperación, habia llamado a Rhodey y él, llevado por la histeria de su amiga, había terminado realizando una misión de rescate. Y bueno, al parecer todo fue para nada.

—¡Toni, alto! ¿De qué demonios estás hablando?—Gritó Pepper, harta del parloteo de la genio.

—¡Lo encontré, Pepper! ¡Lo encontré!—Exclamó la castaña con un brillo intenso en sus ojos. La emoción fluía de ella a tal grado que era contagioso.

—¿Qué cosa?—Preguntó con cautela. Toni solía tener ese tipo de episodios de locura, cuando un acontecimiento que sólo ella comprendía, sucedía. La había visto actuando así cuando había logrado sintetizar un nuevo elemento para su reactor Arc.