#17 madre e hija. 2\2

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Narra rin
Ya habíamos llegado al centro comercial, lo cual me aliviaba, cabe aclarar que mi casa queda un poco muy lejos del centro comercial, ustedes se preguntaran "¿porque no tomaron un taxi o algo así?", pues porque a mi mama se le ocurrió una gran idea, dijo que yo estaba falta de ejercicio y ¿que mejor forma de ejercitar que caminar hacia nuestro destino que estaba tan lejos de nuestra casa?, si una " excelente idea" .

-mama, nunca mas me hagas caminar hasta tan lejos.- dije fatigada.

-no seas exagerada rin, ni yo que estoy más vieja.- hablo con cierto tono de burla, la mire fulminante.

Fuimos a una cafetería, estaba muerta, no es bonito caminar de frente al sol por muchas calles que, por cierto, no tienen ninguna clase de árbol que de sombra, enserio, no se lo recomiendo a nadie.

Nos sentamos, yo pedí un refresco con mucho hielo y mi mama un café, esa mujer esta loca, ¿a quien se le ocurre comprar un café después de haber caminado kilómetros? A saber.

Me quede observando los alrededores, había mucha gente, muchas solo caminaban por ahí mirando las cosas sin comprar nada, otras compraban estupideces, malgastando dinero, otras compraban lo habitual, cosas para la casa, comida, entre otros.

De lejos divise una cabellera peliaqua.

-¿miku..?- susurré para mi, cerré los ojos y nege con la cabeza repetidas veces y luego volvía a mirar al lugar anterior.

Ya no estaba.

-"me lo habré imaginado "- pensé, encogí mis hombros y voltee a ver a mi madre quien miraba su teléfono.

Me miro y me sonrió, dejo su teléfono a un lado de ella.

Me estaré volviendo loca, pero con todo y la amabilidad de mi madre, había algo que no me dejaba tranquila.

Es raro simplemente, es decir, ella siempre es así conmigo, pero la notaba nerviosa y ella solo se pone así cuando necesita decirme algo, algo que sabe que si o si no me gustara, me preocupa.

Llegaron nuestros pedidos, mientras yo tomaba mi refresco, mi mama miraba detenidamente su taza de café.

Sigo preocupada, mas que antes.

-ma, ¿te pasa algo?- pregunte, ella me miro, me sonrió y luego negó con la cabeza.- no puedes engañarme, se cuando algo te preocupa, además sabes que puedes contarme lo que sea.

Se quedo callada.

Mire hacia otro lado, un silencio realmente incomodo nos envolvía.

Termine de tomar mi refresco mas rápido de lo que esperaba y mama aun tomaba su café, estaba dispuesta a romper ese silencio si o si, preguntando así lo primero que se me ocurrió.

-y... Has sabido algo de el?- pregunte.

-de quien?- pregunto confundida, la mire con obviedad, entendió perfectamente de quien hablaba.

-bueno, me dijo que estaba bien y que nos extrañaba mucho.- dijo mi madre con cierta melancolía.

-sabes cuando volverá?- pregunte una vez mas.

Hubo silencio, mucho silencio.

La preocupación subió cuando logre ver tristeza en sus ojos.

Muy bien rin, excelente.

-esta bien, cam-cambiemos de tema.- dije tartamudeando un poco.

Mama me sonrió débilmente, como no hacerlo, le había recordado que no lo tiene al lado.

La Casamentera (Rinxlen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora