Amor a primer barista

13. Cuenta pendiente

Capítulo dedicado a Devon_2017

Al día siguiente noté que mi jefa estaba especialmente extraña. Sí, muchas veces estaba extraña y podía pensar que era por los celos. Seguramente pensaba que seguía con mi cabeza loca después de nuestro "encuentro" y de verdad era así. Había pasado de ella, no había intentado quedar con ella otra vez. Para mandarme las cosas me hablaba mal o señalando con el dedo.

―¿Te pasa algo conmigo? ―En realidad no me importaba mucho, pero me aburría un poco en el trabajo.

―Tú a lo tuyo.

―Vale.

―Sólo que eres un puerco. Y como tal te comportas. Eso y nada más es lo que pasa.

―¿Qué pasa, te quedaste con ganas de más, eh?

Me miró con furia, como tantas otras veces. Pero esta vez me pareció diferente. Incluso Paco, que estaba a mi lado en la otra caja, se quedó mirando asombrado.

Cuando terminé mi turno y encendí el móvil, vi el mensaje. Me mató.

Carla: "Fue bonito mientras duró. Qué pena que no haya durado nada. No quiero saber nada más de ti, Víctor"

¿Cómo, qué, cuándo, dónde? Se me ocurrían muchas preguntas puesto que no entendía nada. ¿Qué había pasado? Con lo bien que habíamos estado el día anterior...

Víctor: "Oye, ¿qué pasa? Explícamelo"

No contestó. A las dos horas vi el doble check azul, pero tampoco contestó entonces. Pasé mala tarde. No entendía nada y sólo quería arreglar las cosas, pero como no sabía lo que había ocurrido no podía arreglarlas.

A las dos de la madrugada, me llegó por fin su respuesta.

Carla: "Sabes muy bien lo que ha ocurrido"

Pensé que no era buena idea contestarle a esas horas, así que apagué el móvil e intenté dormir. Imposible. Un rato después, lo vi claro:

¡Mi jefa!

Quemé su telefonillo hasta que se dignó contestarme.

―¿Quién es?

―Sabes perfectamente quién soy. Zorra.

―¿Perdona? ¿Vienes a las tres de la madrugada a mi casa a insultarme? Voy a llamar a la policía.

―Bien. Así te denunciaré por romper mi relación. Le has dicho que nos acostamos.

―¿Eres tonto? En todo caso te denunciaría yo por liarte con una chiquilla de quince años, a ver quién sale peor parado.

―¡Ah! ¿Quién es el tonto aquí? Has caído. Reconoces que has sido tú. Has destruido mi relación con Carla. Eres tonta de cojones.

―Bueno, en realidad deberías estarme agradecido. Esa cosa que tenías con esa niña, que me niego a llamar relación, era ilegal. Deberías estar en la cárcel.

―¿Puedes bajar o tenemos que estar hablando por telefonillo? Se va a enterar toda la calle de lo que hablamos.

―Mejor. Así todos sabrán lo pederasta que eres.

―Bueno, como quieras. ¿Qué le has dicho a Carla exactamente? Necesito saberlo para arreglarlo.

―¡Que no quiero que arregles nada! Es por tu bien, créeme.

―Ya. Sólo que no lo haces por mi bien, sino por el tuyo. Quieres estar conmigo y te la tenías que quitar de encima.

―Yo no necesito quitarme a una niña de encima para estar contigo. Además, sueñas si piensas que quiero estar contigo.

―Lo has reconocido con lo que acabas de decir. De verdad eres muy tonta.

―Como me vuelvas a insultar llamo de verdad a la policía y te denuncio por violación a menores.

―Mira, que te den por culo.

Me marché. No iba a arreglar nada. Me fui a casa y esperé al día siguiente para arreglarlo todo. Pero... ¿sería verdad que mi jefa estaba dispuesta a denunciarme?

¿Y tú crees que su jefa será capaz de denunciarlo? Venga que nos acercamos al final de la historia, como os conté es una historia corta. Espero que os esté gustando, y si no, acepto críticas constructivas :)