You're not a hero (Katsudeku)

Capítulo 8

Capítulo 8: ¿su cura o su enfermedad?

Midoriya despertó justo entonces, y su habitación de hospital se inundó de gritos envueltos en desesperación.

Katsuki, alertado por las voces y el ir y venir de enfermeras al cuarto del peliverde, empezó a correr hacia la habitación, tirando a un lado por el camino lo que había conseguido para el desayuno, descubriendo en la habitación una escena desgarradora:

Las máquinas que monitoreaban a Deku no dejaban de pitar fuera de control mientras que el pecoso se movía violentamente en la cama al tiempo que su cuerpo era retenido de alguna manera y con muchísimo esfuerzo por los médicos a su alrededor. Parecía estar siendo presa de unos dolorosos espasmos mientras gritaba desorientado. Y precisamente lo que gritaba era lo más desconcertante de todo.

-¡NO TE VAYAS!. KACCHAN, NO TE VAYAS.-repetía una y otra vez.-PUEDO SALVARTE, ¡VOY A SALVARTE!. KACCHAN, ¡¡¡KACCHAN!!!.

El rubio reaccionó en el acto y se precipitó sobre la cama, deshaciéndose del agarre de todos lo médicos que intentaron detenerlo, obviamente sin éxito. Katsuki le sujetó de brazos y piernas con la intención de inmovilizarlo, pero incluso así se le hizo difícil controlar la fuerza del peliverde.

-Deku, OE, ¡DEKU!. ¡CÁLMATE MALDITO NERD!.-gritó exasperado.

Izuku respondió a la voz de su amigo de la infancia, deteniéndose en el acto y abriendo por primera vez los ojos, los cuales, había estado cerrando con todas fuerzas mientras las lágrimas salían a borbotones. 

-Kacchan...-masculló al ver al rubio explosivo encima de él.-KACCHAN.-con toda la fuerza de su brazo sano, atrajo al chico hacia él y lo retuvo con desesperación.-Estás aquí... estás aquí... Lo siento, lo siento tanto...

Bakugou no entendía nada de lo que decía aquel idiota, pero trató de corresponder aquel abrazo desesperado mientras veía por el rabillo del ojo cómo los médicos inyectaban algo en las vías de Deku. Un tranquilizante, seguramente. 

-Estoy aquí, idiota, lo estoy...-dijo el rubio, acariciándole la cabeza al otro.-No voy a irme a ningún sitio.

Katsuki notó cómo la fuerza que empleaba Izuku para retenerle aminoraba lentamente, hasta que el peliverde dejó caer el brazo y ladeó la cabeza. El sedante había funcionado. Se había quedado dormido. 

Fuera de la habitación, los doctores explicaron tanto a Katsuki como a Inko Midoriya, que había llegado escasos minutos atrás al hospital, que aquel ataque de pánico había sido causado por una fuerte impresión, tal vez, un shock nacido por una repentina comprensión de su estado actual. Los médicos añadieron con pesar que estaban muy extrañados de que aquello no hubiese pasado antes, que el chico debía de tener una voluntad de acero para haber aguantado un mes sin desmoronarse.

-Debes de ser muy importante para él.-comentó uno de los médicos a Bakugou cuando el resto se hubo retirado.-Lo único que hacía era llamar tu nombre, y tú fuiste el único capaz de calmarle... Tal vez puedas convertirte en su cura.

El rubio se quedó mirando al doctor hasta que éste desapareció tras la esquina del pasillo. ¿Su cura?. ¿La cura de Deku?. ¿Él?. Si ni siquIera sabía por qué lo estaba llamando desesperadamente cuando al despertarse le había escuchado murmurar su nombre con tanta paz... 

Bakugou golpeó la pared con su puño y apretó los dientes. 

¿Su cura?. Él era más bien su enfermedad. 

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Izuku empezó a tener esa pesadilla a diario. El contraste era hiperbólico. Primero cumplía su sueño más añorado, y de un momento a otro, éste se hacía pedazos. Literalmente. Esto se tradujo en ataques de ansiedad diarios que debían ser paliados por tranquilizantes y la intervención inmediata de Bakugou. 

Día tras día, Katsuki lo interrogaba para saber qué es lo que le atormentaba tanto en sus sueños, porque había llegado a la conclusión de que sus ataques siempre sucedían cuando Izuku despertaba. Pero Deku aseguraba no recordar nada de lo que soñaba.

Mentía.

Lo recordaba claramente, y esa claridad era lo que le atormentaba. 

El no poder ayudar a Kacchan, el no poder salvarlo... El ser un inútil... El ser Deku. Pero eso era algo que no podía decirle a Bakugou. Él le gritaría algo así como que no necesitaba a nadie que lo salvara, y mucho menos a él... Sin embargo, Izuku no lo veía así. Él quería estar a su lado, luchar a su lado... Había incluso soñado tener una vida a su lado... de alguna forma. Solo quería sentirse útil, apoyarle, ayudarle y salvarle de ser necesario... pero ya no podía... 

Ya nadie le necesitaba... 

Kacchan no le necesitaba. 

¿A caso alguna vez.... le había necesitado?.

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Un poquito corto pero el siguiente ya será normal~