Ante la repentina desaparición de Bonnie sus compañeros de banda y mejores amigos deciden ir a averiguar lo que pasa, pero solo se encuentran con sangre y un montón de cartas. Cada sobre tiene un nombre, un destinatario, por lo que deciden repartirl...
Hace más de una hora que estaba dando vueltas por toda la habitación que compartía con Onnie, la carta seguía doblada sobre mi cama y cualquier cosa era una excusa válida para mantenerme ocupado.
—No aguanto más— murmuré dejando de lado un piercing que acababa de tunear de un azul eléctrico, fui directo a mi cama y me tiré sobre esta tomando la carta. La desdoblé con cuidado mordiéndome la mejilla interna, yo era alguien fuerte, no debía llorar.
"Oxy Noxo Jerung de las Mercedes, bueno, eso último no.
¿Cómo estás? ¿Feliz? Seguramente sí, desde que estás con Onnie te he visto sonreír mucho, ¡y eso me pone muy contento! No podía creer que me hayas pedido ayuda para conquistarlo, pero fue muy divertido y lindo que me hayas incluido.
¿Al fin entendiste que yo no era un enemigo?
Espero que haya sido así, porque ahora me he ido como tantas veces lo deseaste. No sé como será tu reacción, aunque secretamente me gustaría que me extrañes un poquito.
Sigue queriendo tanto a Onnie como siempre y cuida de todos en mi ausencia.
Pd: Recuerda que Maggie es una mujer, y ella tiene otras necesidades, así que por favor, lee algunos tips para tratarla como merece.
Y por favor, no me busquen, no puedo volver. "
Ahogué un grito de furia y tristeza mezclada y me levanté yendo a la cocina donde seguramente estarían todos, hoy mismo lo haría.
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