Hyung.

Especial I: Yoonkook♡

Era un nuevo día en la gran ciudad de Seúl, el sol entrando por las ventanas avisando y dando el anuncio de que un nuevo día florecía en este lado del mundo, despertándo así a las personas. Muchos lo recibian con molestia, y otros con una sonrisa en la cara.

Pues Min Yoongi estaba entre los primeros nombrados.

Se movió con pereza en su cama, entre aquellos brazos que tanto le gustaban y que le daban un calor reconfortante que no cambiaría por nada en el mundo. Aspiró el olor de la mañana junto a tan característico olor de su alfa.

Nunca pensé que me gustarían tanto las nueces pensó el ahora peli-plata, dandose la vuelta para encontrar el mejor de los planos en su vida. A su querido alfa peli-negro sin camiseta, durmiendo plácidamente mientras por acto de reflejo, apretaba el agarre en su cintura apegándolo más a su cuerpo, Yoongi solo soltó una pequeña risa y se dedicó a observar sus hermosos ojos cerrados, el como las pestañas largas descanzaban en el inicio, su larga nariz perfilada con la que tantas veces le había molestado, siguiendo por sus labios rellenos y algo resecos por haber dormido con el aire encendido pero igual de apetitosos, siguiendo el hermoso camino hacia su cuello y riendo por ver las marcas algo rojizas en el. Había sido algo bruto pero en su defensa, Fue culpa de Jeon.

Tan concentrado estaba que no se dió cuenta de cuando cierto alfa juguetón abrió sus ojos y amplio su sonrisa al ver como cierto beta seguía mirando su cuerpo completamente maravillado.

-Hyung, me desgastaré si me sigue mirando así- Bromeó algo ronco.

Y sintió al pequeño cuerpo en sus brazos temblar. Todo un pervertido fue lo que pensó el alfa echándose a reír.

-No seas presumido Jeon- Se quejó el beta, claro que no era muy convincente marcando aquel rojo en sus orejas. -¡Yah! No te rias alfa de pacotilla- Se quejó en un ataque de verguenza tratando de librarse.

-¿A dónde vas?- Comentó tranquilamente Jungkook mientras ajustaba más su agarre en la cintura, sintiendo el pálido cuerpo a su lado revolverse.

-En dónde no te burles de mí- Chilló el beta obstinado en su intento de escape.

-Ya, ya no te molestaré más, precioso- Dijo y cuando sintió al cuerpo a su lado dejar de forzajear, sacó una de sus sonrisas malvadas. -Aunque admito que soy irresistible como para no ser observado.

-¡Eres un appsososbxo!- Y fué callado cuando una guerra se desató en la cama.

Sábanas volando al igual que las almohadas solo para terminar mostrando a un alfa muy risueño encima de un beta algo molesto y con las mejillas tintadas de rojo.

-Sacate de encima Jeon, pesas como ballena- Se quejó el beta.

-Eso no era lo que me decía anoche, Hyung- Dijo el alfa con una sonrisa de lado.

Haciendo que el pequeño beta se pintara de un color rosado muy oscuro hasta las orejas y empezara a patalear.

-¡Salte de encima tarado! Ya verás cuando te ponga las manos encimas, te vas a arrepentir de ser tan fanfarrón- Chilló el beta molesto.

-¿Yo fanfarrón?- Cuestionó el menor entre risas. -Pero si yo no fuí el que anoche dijo "Ves a este alfa, es mío y solo mío. Asi que sácale los ojos de encima, zorra" a aquella Omega que trabaja en mi oficina.

Y entonces Min Yoongi podía compararse con un jodido tomate andante, se revolvió debajo del gran cuerpo de su menor gruñendo en molestia y tratando de ocultarse porque, de solo recordar el cómo había perdido los estribos la noche pasada en la fiesta de otoño que hacían en la oficina donde ahora trabajaba Jungkook le daban ganas de meter la cabeza en la tierra y no sacarla de ahí.