- Rin... despierta niña... - una voz ronca me llamaba a la lejanía.
- ¿Y si ya murió abuelito? - decía la voz de un niño.
- ¡Shh! está despertando - murmuraba Meri.
- ¿En dónde estoy? - pregunté levantándome del piso cubierto de césped.
Al abrir los ojos y entrar en razón me di cuenta de en donde estaba, nuevamente me encontraba con Yoshi, el pequeño que lo acompañaba aquella vez en mi trance y Meri quienes estaban al rededor de mi con semblante preocupado.
- ¿Qué hacemos aquí? ¿No se supone que solo puedo verlos cuando entro en trance en una situación de peligro? - dije dirigiéndome al anciano.
- Estamos en peligro Rin - respondió Meri - de alguna manera Hebi y Yuu lograron burlar los guardias que ordené que cuidaran cada puerta hacia tu mundo y te encontraron - di un profundo suspiro.
- Afortunadamente cuando eso sucede entras en trance y tu alma viene a aquí para poder aconsejarte, como tu mentor - concluyó Yoshi.
- ¡¿Entonces en estos momentos están tratando de asesinarme?! - pregunté asustada.
- No, al estar aquí se genera una barrera al rededor de tu cuerpo que nos da tiempo de hablar contigo - comentaba aquel dulce niño -además Aki está haciendo todo lo que puede para protegerte y los chicos están en camino.
- ¿Cómo es que sabes de Aki? - pregunté al pequeño.
- Cuando aún vivía, Aki era mi compañero así que se perfectamente como actuaría - al decir eso no pude evitar poner mi rostro impresionado - Yoshi era mi mentor pero desafortunadamente contraje una enfermedad que me llevó a la muerte, mi último deseo fue que Yoshi pudiera darle a Aki a alguien con un gran corazón y valentía.
Miré al anciano un poco confundida
- Rin tienes que regresar y tratar de hacer tiempo hasta que lleguen tus compañeros, juntos traten de volver a Jigoku y cierren la barrera a tu mundo - asentí cuando Meri terminó de darme instrucciones.
- Lo haré - pronuncié decidida - pero antes necesito saber algo... ¿Por qué me escogiste a a mi? digo, seguramente hay más personas más valientes que yo y de mejor corazón - dije dirigiéndome a Yoshi.
- Ya es tiempo de que lo sepas - suspiró - tu abuela pertenecía a los túnica roja... pero ella era totalmente diferente, la conocí en Gorush cuando ambos éramos aún muy jóvenes, ella me ayudó a encontrar el camino hacía la puerta más cercana a Niyool, en ese tiempo los capa roja aún no eran exiliados por lo que regresamos juntos. Pasó el tiempo y me enamoré profundamente de ella... pero nunca pasó algo más que amistad entre nosotros y los problemas con su clan se intensificaron hasta que fueron exiliados, Hebi siempre trató de separarnos y cuando se fueron él tomó ventaja y la desapareció de mi vida, solo supe de ella hasta el día de su muerte - Yoshi lo contaba con una tristeza notable en su rostro - cuando el pequeño Taro estaba moribundo - señalaba al niño a su lado - los túnica roja sabían del asombroso poder de Aki por lo que nos enteramos que venían a Niyool por él para poder conquistar tu mundo, entonces Taro me dijo su deseo, sabía que Karim había tenido tres hermosas nietas pero no sabía a cual de todas entregarle la gran responsabilidad así que el destino jugó a favor mío y el día que nos atacaban tu estabas sola en Gorush y ... el resto de la historia ya la sabes.
Al fin tenía la respuesta que tanto deseaba, pero me sentía vacía y sin saber qué decir.
- ¡Es hora Takashi! están a punto de quitar tu barrera, no olvides lo que te dije y sobre todo... no confíes en lo que ellos te digan - interrumpió Meri, tocó mi medallón y todo se volvió blanco.
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Cayendo a las nubes
Fantasy¿Has sentido la necesidad de huir de tu origen para cumplir tus sueños? pero, ¿Qué harías si en el camino te encuentras con obstáculos fuera de este mundo? Rin, una chica de 24 años, se ve inmersa en un lío que la persigue desde hace algún tiempo y...