Capítulo 9 "No quiero extrañar nada"

75 5 1
                                    



Leo y yo caminamos juntos horas más tarde por la playa mientras Ahjumma, Hyoyeon y Yuri toman en el sol en la arena.

—Mami, ¿cuándo iremos a casa de Yun Ji? Yo quiero conocer su casa—me pregunta Leo, con el ceño fruncido.

Y otra vez la misma pregunta.—No creo que podamos ir a su casa, Leo. Mamá tiene que trabajar mucho.—le digo mientras hago una mueca.—pero adivina qué, ¡ellos vienen en dos semanas! Tio Yong, Tía Seohyun y Yun Ji estarán aquí pronto.

Él me da una sonrisa feliz. —¿en serio, mami?

Yo asiento.—Así es.

—Entonces, yo puedo ir con ellos cuando se vayan a su casa. Después me vas a buscar a su casa mami...

—Cariño...

—Sólo será un día, mami.

Los ojitos brillantes y llenos de deseo de mi hijo hacen que mi corazón se contraiga con pena. Me pongo a su altura y tomo sus hombros para hablarle amablemente.

—No podré ir a buscarte allá, cariño. Tenemos que quedarnos aquí. Además, Corea está muy lejos y mami no puede estar sin ti. ¿entiendes, verdad? —le explico mirándolo a los ojos, en busca de su mirada porque no me mira. Esté mirando al piso con tristeza.

Un leve puchero se forma en su rostro pero no insiste y agradezco al cielo que ya no lo haga. Mi pobre niño.

—¿Quieres que vamos por un helado?—le pregunto intentado distraerlo.

Él y yo caminamos hasta un puesto de helados y compramos varios para llevarles a las chicas también.

Yuri y Hyoyeon llevan a Leo de la mano mientras yo me aparto para atender el teléfono.  Diablos tenía 10 llamadas perdidas.

—¿Qué pasa? —le pregunto a mi hermana, quien ha llamado insistentemente y yo no lo había notado.

—Hasta que a fin contestas.—dice en un suspiro.

Me río al oírla tan cabreada.—Ya está aquí por quien lloras. —bromeo.

—Estoy viajando a Corea ahora mismo.

—¿Por qué?

—Ocurrió un accidente en las instalaciones y hay 2 trabajadores fallecidos y 4 heridos.

—Mierda.

—Estaré aquí al menos dos semanas. Dejaré todo arreglado antes de volver.

—Prepararé mis cosas ahora mismo.

Ella suspira sonoramente.—Quédate, vuelve mañana. Lamento arruinar tus vacaciones.

—De qué hablas, no arruinaste nada. Sólo la suerte no está de nuestro lado, ¿Quién se quedó a cargo?

—El director Choi. Va estar a cargo mientras vuelves.

—Está bien. —digo mientras me abrazo a mí misma por el frío.

—Me apena dejar a Young Hae, ¿puedes cuidarlo?

—¿Es eso una pregunta? Por supuesto que cuidaré de mi sobrino.

Ella suspira sonoramente.—Me gusta lo que hago, me apasiona, pero siento que estoy tan sumida en el trabajo que estoy dejando de lado a Young Hae y Kang Soo Han. Mi esposo está trabajando duro también y no lo sé, estoy un poco agobiada.

—Lo siento. —le digo. —¿al menos mi cuñado sabe que tienes que ir a Corea?

—Sí. Lamentablemente tampoco puedo venir conmigo. Bueno, hermanita tengo que irme. Tengo que subir al avión. Te llamaré por cualquier cosa.

Escrito en el AguaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora