Chittaphon Project [Vol. I]

42.

Débilmente abro mis ojos. Lo primero en visualizar son las luces del techo. Escucho el típico monitor cardíaco que me han conectado.

Doyoung está a mi lado apoyando su cabeza en una parte de la cama en la que estoy.
Al hacer un pequeño movimiento, se percata de eso y despierta.
Talla sus ojos, y sonríe. Quiero llorar.
¿Cómo es que a pesar de todo lo que hemos pasado sigue aquí?.

─Hola bonita, finalmente has despertado

Alcanza mi mano y pone mis nudillos en sus labios. Es la persona más hermosa que he conocido jamás.

─Perdón   ─niega y sigue sonriendo─,  Do, ¿desde cuando estoy en el hospital? ¿Mis padres lo saben?

─Han pasado dos días, y tus padres han ido a asearse. No saben nada .., a excepción de que te asaltaron. Parece que tu padre está muy cabreado por no saber nada de Ten

Asiento y no cuestiono más.
Me duele bastante el área afectada y muy difícilmente puedo moverme.

Durante un rato llegan los asistentes del médico a evaluarme, traen algunas pequeñas porciones de comida batida y con ayuda de Doyoung puedo sentarme a comer.

─Sé que no es el momento, pero ..,

─¿Quieres saber de él?   

─¿Puedo?

─Es tu decisión. Pero tampoco te voy a mentir, no sé dónde está. Esa noche me pidió llevarte a casa, como puedes observar no lo hice. Ayer fui a buscarlo, no lo encontré

─En pocas palabras .., volvió a desaparecer

Los siguientes tres días en que sigo hospitalizada solo van en preguntas por parte de mis papás. Sobre donde está quién prometió una vez, cuidarme.
Me encantaría también saber lo mismo.
Aunque no lo quiera sentir de ese modo, es angustiante.

El día en que me dan de alta, mi madre va por el auto mientras espero junto a Doyoung.
Antes de eso, una camioneta blanca frena delante de nosotros. No es necesario que salga para saber que se trata de él.

─¿Irás?

─¿Debo?

─No me gusta esa opción. Pero si lo crees necesario, hazlo. Solo, llámame si requieres que vaya por ti

Antes de abordar la camioneta, Chittaphon sale y me abre la puerta. Me adentro y tras cerrar, se vuelve a Do. Ambos mantienen una postura seria. Solo son dos minutos los que charlan y después vuelve conmigo. Arranca y nos vamos.

No decimos nada en el camino.
Hasta que llegamos de nueva cuenta a su apartamento.
Frenéticamente abraza mi cuerpo en cuanto estamos a solas. Esconde su cara en mi cuello y deja besos en su camino.

─Me estaba volviendo loco sin tenerte a mi lado

─¿Podemos, hablar?

─Es lo que menos deseo hacer teniendote aquí  ─susurra en mi oído dejando una mordida en el.

─Es lo único que deseo hacer ahora

Tras pedirlo de modo cortante. Separa nuestros cuerpos. Me da la vuelta y puedo verle bien.
Sigue teniendo algunas cicatrices. Sus ojos están ligeramente irritados.

─Bien, dime de que quieres hablar

─Primeramente exigo saber porque me usaste como si solo fuese una persona que no vale la pena. Al ser considerada como algo que podías sacrificar para darle gusto a un maldito enfermo como lo es JungWoo .., ¿Porque? Quiero saber

─Ahora mismo ya no tiene caso hablar de eso

─¿Por?

─Porque justo ahora tu no eres algo que no vale la pena. Hoy, desde que he vuelto, te has convertido en mi todo. ¿No lo ves? Daría y haría todo para que sigas a mi lado ..

─Lamento mucho el ya no poder creer en ti

─Las cosas van a cambiar, lo prometo. Vayamonos lejos

─No iré a ninguna parte contigo. Ya no

─Tu lugar es conmigo, Iseul. Sigues siendo..

─Basta con eso. Desearía enormemente nunca haber puesto mis ojos en ti. Ser esa niña idiota que soñaba en que su crush le haría caso y sería feliz  .., esas ensoñaciones se han ido a la mierda. De acá en adelante ya no hay un nosotros

─No puedes abandonarme   ─pide de modo suplicante. Pero a simple vista se mira que ya no es el mismo de hace unas semanas. A ciencia cierta no se todo lo que le hicieron durante esos cuatro días. No quiero imaginarlo tampoco. Tuve mucho con lo que quisieron hacer en Doyoung.

Por primera vez, tengo miedo. De todo lo que pueda provocar si seguimos juntos.

─No me busques .. yo .. ─toma mi rostro con ambas manos mientras sigue negando─,  deseo que ésto sea nuestro fin

Mi corazón se encoge al ver sus lágrimas bajar y empapar sus mejillas. Baja la cabeza y en esa posición pronuncia lo que hace mucho, anhelaba escuchar.

─Te amo Iseul  ..

─No me digas eso solo para hacer que me quede, no es justo  .. basta

─Se que soy un asco en poder demostrarlo, pero lo siento. Aquí,   ─señala su pecho golpeandolo─, estás desde hace mucho. Cree al menos eso

Si sigo más tiempo aquí, no tendré más fuerza para después poder irme.
Doy dos pasos hacia atrás de modo en que me ha soltado.

─No vuelvas más a mi vida

─Iseul ..

Salgo de ahí y tras ver cerrar el elevador, me he puesto a llorar.
Despedirme de él me duele más que el daño físico que tuve que soportar.
Pero es precisamente por eso, que ya no deseo más.
Mi pequeña historia a su lado, ha llegado a su fin.